La Alta Comisionada de Derechos Humanos de la ONU, Mary Robinson, pidió «flexibilidad» para salvar la Conferencia Mundial contra el Racismo, que el lunes fue abandonada por Estados Unidos e Israel.
Las delegaciones israelíes también se retiraron, este martes, del Foro de Organizaciones no gubernamentales (ONG) celebrado en forma paralela a la tercera Conferencia Mundial contra el Racismo, la Discriminación Racial, la Xenofobia y las Formas Conexas de Intolerancia, de Durban, Sudáfrica.
La declaración final del foro, con fuerte impronta de las ONG palestinas, pidió «el cese inmediato» de los «crímenes racistas» de Israel, entre los que mencionó «crímenes de guerra, actos de genocidio y limpieza étnica» contra la población palestina.
El Foro de ONG calificó a Israel de «estado racista» y cinco organizaciones internacionales y 40 europeas no apoyaron su declaración final.
Robinson advirtió que los participantes en la conferencia oficial de Durban, cuya finalización está anunciada para el viernes, deben encontrar un espíritu de diálogo.
De lo contrario, «habremos desilusionado a aquellos que desean que esta conferencia produzca avances en la forma en que nos relacionamos como familia humana en el siglo XXI», dijo Robinson en la sesión general.
«Si todas las partes exhiben valor y flexibilidad, enviaremos una fuerte señal acerca de la determinación que nos une para hacer frente a los flagelos», declaró.
También consideró «dañino» el texto de la declaración del Foro de ONG, y agregó que, por primera vez, no podrá recomendarlo a los delegados oficiales.
La opinión generalizada en Durban es que Estados Unidos e Israel se retiraron en forma prematura de la conferencia. La razón esgrimida por estadounidenses e israelíes fue su rechazo de los borradores de trabajo de la reunión, en los que se describe a Israel como estado racista.
No obstante, Robinson aseguró que hubo avance para «acordar, limpiar y condensar» el borrador de la declaración final y la plataforma de acción que aprobará la conferencia oficial.
La conferencia no sólo ha trabajado en la redacción de documentos, sino que ofreció un espacio a las víctimas del racismo y la discriminación, destacó Robinson.
«Durban permitió que las voces de las víctimas, aquellos que fueron silenciados por demasiado tiempo en sus países, se escucharan en todo el mundo», dijo.
Así mismo, distinguió tres «puntos difíciles»: qué constituye discriminación, la situación en Medio Oriente y la compensación a las víctimas de esclavitud y colonialismo, exigida por países africanos.
Los tres asuntos fueron aislados y tratados por subgrupos, que los negociaron fuera de las reuniones más generales, explicó el delegado sudafricano Jody Kollapen.
Kollapen indicó que las preocupaciones manifestadas por Estados Unidos e Israel en el comité sobre Medio Oriente, presidido por Noruega, fueron compartidas por otros países.
Más de una veintena de organizaciones israelíes y judías protestaron este martes en conferencia de prensa por el ambiente «antisemita» imperante en el foro.
Literatura antisemita se distribuyó en el Foro de ONG, que se caracterizó por su hostilidad hacia estudiantes judíos presentes, aseguraron los delegados que ofrecieron la conferencia de prensa.
«Como víctimas, respetamos la diversidad de voces, aún en la discrepancia», dijo la portavoz del Foro de ONG, Myrna Cunningham.
«Sabemos que (la situación en) Medio Oriente ha ocultado problemas de racismo en otras partes del mundo. Pero esperamos que la Alta Comisionada (Robinson) no se concentre en un solo punto, el que ella consideró 'dañino'. Se trata de un documento universal», dijo Cunningham. (FIN/IPS/tra-en/fk/mn/aq/hd/01