Ciento veintiséis legisladores urgieron al primer ministro de India, Atal Bihari Vajpayee, a renovar la flota de aviones caza de entrenamiento, para evitar la pérdida de más pilotos y de costosos aparatos.
La fuerza aérea perdió en los últimos cinco años a 34 jóvenes pilotos y 85 aviones de combate MiG, de fabricación rusa, a causa de accidentes, informó al parlamento el ministro de Defensa.
Treinta y cinco de esos aviones eran MiG 21, diseñados hace 40 años y llamados «fabricantes de viudas» por aquellos que tienen que volarlos.
Además de la muerte de los pilotos, los accidentes causaron pérdidas a la fuerza aérea por casi 2.000 millones de dólares en valores de reposición, estimó la Auditoría General en su último informe anual.
Vajpayee había decidido la compra de 66 aviones británicos de entrenamiento Hawk, de BAE Systems, a 15 millones de dólares cada uno, pero el plan fue cancelado debido a un escándalo de soborno que le costó el cargo en marzo al entonces ministro de Defensa, George Fernandes.
Ahora, parlamentarios opositores y del partido gobernante recuerdan a Vajpayee que el gobierno se había comprometido a tomar una decisión sobre la compra antes de diciembre de 2000.
Uno de los problemas de la compra es el alto precio de los aviones. Funcionarios del Ministerio de Defensa afirmaron que había una «gran diferencia» entre el valor real de un Hawk y lo que BAE pretendía, y expresaron su temor a firmar el acuerdo por eventuales repercusiones.
Entre los competidores del contrato, propuesto por primera vez hace 18 años, figuraban los aviones AMX-T, de la fabricante brasileña Embraer, los Alfa franco-alemanes y los rusos MiG-AT.
Rusia atribuyó los frecuentes accidentes con aviones MiG a la compra de repuestos de baja calidad a repúblicas ex soviéticas, como Ucrania.
«A veces India compra repuestos viejos, y eso crea riesgos de accidente», afirmó Vladimir Barkovsky, uno de los diseñadores de los MiG.
Barkovsky también sostuvo que la fuerza aérea india estuvo negociando con Israel para modernizar algunos de sus 189 «Flogger» MiG 27 ML y sus 69 MiG 28 B/S.
«Sólo Rusia posee la tecnología necesaria para prolongar la capacidad operativa de esos aviones. No se los puede modernizar sin la participación rusa», señaló el experto.
Entre 1991 y 1999, la fuerza aérea perdió 85 pilotos y unos 190 aviones en accidentes. En su mayoría, se trataba de aviones MiG, modelos 21, 23, 27 y 29.
India también perdió en el mismo período cuatro cazas Mirage 2000 THs, de construcción francesa, y 19 Jaguar de Gran Bretaña, además de sufrir 2.800 «incidentes» que pudieron haber terminado en colisiones.
Analistas independientes calcularon que la fuerza aérea perdió en ese período cuatro MiGs cada 10.000 horas de vuelo y un avión ruso cada 2.500 horas de vuelo, una tasa alarmante.
La Auditoría General consideró que la principal causa de esta situación es la falta de equipos adecuados para el entrenamiento de los pilotos.
Según el informe de la Auditoría, 41 por ciento de los accidentes producidos entre 1996 y 1997 se debieron a errores humanos, 44 por ciento a fallas técnicas y el resto a colisiones con pájaros.
El documento expresa «dudas» sobre la competencia de los instructores de la fuerza aérea y lamenta la falta o la obsolescencia de los simuladores de vuelo.
«No existe un paso intermedio» entre el manejo de aviones de entrenamiento obsoletos y el de aviones avanzados de combate, lamentó la Auditoría.
Además, los sistemas de control de la fatiga de los aviones son «limitados», y los pilotos con frecuencia son obligados a seguir activos hasta mucho después de su edad de retiro. (FIN/IPS/tra- en/rb/rdr/mlm/ip/01