La tranquilidad reinaba hoy en Comoras, una ex colonia francesa frente a la costa oriental de Africa, luego del golpe de Estado en la separatista isla de Anjouan que puso en duda el proceso de reconciliación nacional.
En Mutsamudu, la principal localidad de Anjouan, la vida volvió a la normalidad. Los soldados están acuartelados, las tiendas están abiertas y la población está tranquila, según periodistas de la zona contactados desde Nairobi. El cambio de gobierno tampoco parece haber afectado a los turistas.
Pero el futuro de Comoras, un archipiélago situado 600 kilómetros al noroeste de Madagascar, no está nada claro, según analistas.
El golpe incruento tuvo lugar el jueves poco antes de una reunión crucial para analizar un proyecto de Constitución basado en la llamada declaración de Fomboni, firmada en febrero por delegados de las principales islas del país: Anjouan, Gran Comora y Mohéli.
La declaración de Fomboni pretendía la reconciliación nacional, luego de que Anjouan y Mohéli declararon su independencia del resto de la República Federal Islámica de Comoras en agosto de 1997.
Anjouan sostenía que no recibía las ganancias que le correspondían por la exportación de la flor ylang yland, utilizada para hacer perfume.
Los delegados estaban reunidos el jueves en Mohéli para discutir el proyecto de Constitución cuando se produjo el golpe.
Los golpes de Estado han sido la constante en el pequeño archipiélago volcánico de 1.860 kilómetros cuadrados y menos de 700.000 habitantes desde que en 1975 se independizara de Francia. El primero tuvo lugar un mes después de la independencia, y el del jueves fue el decimonoveno.
El golpe despuso al líder de Anjouan, el coronel Said Abeid Abderemane, quien a su vez había tomado el poder por la fuerza en junio de 1999. Abderemane está bajo arresto.
La secesión de Anjouan y Mohéli en agosto de 1997 desencadenó una crisis que se tornó violenta cuando Gran Comora intentó invadir a Anjouan un mes después.
Aunque el coronel Abderemane era un secesionista acérrimo que pretendía una confederación libre, accedió en febrero con la declaración de Fomboni a la reunificación con las demás islas y a crear una federación nueva.
La declaración, también firmada por el líder de Gran Comora coronel Azaly Assoumani, tiene el objetivo de que Comoras vuelva a ser una sola entidad federada otorgando mayor autonomía a las tres islas mayores.
La Constitución nueva otorgaría jurisdicción al gobierno central sobre las relaciones exteriores, la defensa, la moneda, la nacionalidad y la religión.
La misma instauraría elecciones directas en las tres islas y a un jefe de una futura Unión de Estados Comoranos elegido por vía indirecta. Una vez acordado el proyecto final, sería sometido a referéndum en septiembre.
Los golpistas anunciaron el viernes que permanecerán en el poder hasta que se apruebe una Constitución que consagre la unificación de las Comoras.
El gobierno militar está integrado por tres presidentes, los comandantes Mohamed Bacar, Hassane Ali Toiliha y Halidi Charif. Charif fue un cercano colaborador del depuesto Abderemane y tuvo un papel fundamental en la redacción de la declaración de Fomboni.
Así mismo, Charif representará a Anjouan en la comisión de reconciliación nacional.
Los golpistas acusaron a Abderemane de corrupción y poder autocrático. Un integrante del gobierno dijo a la radioemisora británica BBC que los pobres eran los más perjudicados por el régimen depuesto y que «todo el pueblo desea la libertad».
Los golpistas se declararon demócratas y pretenden nombrar técnicos civiles al frente de las carteras ministeriales. Las prioridades del gobierno son la paz, la democracia, la transparencia, la confianza y la economía, agregaron.
Pero no todos confían en las intenciones de los dirigentes golpistas. La Organización de Unidad Africana deploró lo que calificó de «crisis emergente en la isla».
«Francia desea que los hechos ocurridos (el jueves) en Anjouan no influyan en la aplicación del acuerdo de reconciliación nacional firmado en Fomboni», declaró un funcionario del Ministerio de Relaciones Exteriores el viernes.
«Francia alienta a todas las partes a seguir las gestiones emprendidas para el retorno de la unidad de Comoras y para el retorno de la legalidad institucional a través de la instalación de instituciones democráticas en las tres islas», agregó el portavoz. (FIN/IPS/tra-en/ks/mn/aq/ip/01
