América Latina camina a paso lento en materia de desarrollo humano, llevando a cuestas una gran desigualdad social, tímidos avances tecnológicos y escaso crecimiento económico, según el último informe especializado del PNUD, presentado hoy en México.
La mayoría de países de la región subieron posiciones en la tabla del Informe de Desarrollo Humano 2001 respecto del año anterior, pero Chile, República Dominicana, Guyana y Venezuela bajaron. Mientras, Haití se mantuvo como el de peor desempeño, no obstante haber subido 16 puestos en un universo de 162 países.
América Latina y el Caribe, considerados en bloque en el informe, mejoraron en algunas áreas, pero la desigualdad persiste como principal problema, dijo a IPS la cubana Elena Martínez, directora del PNUD (Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo) para América Latina.
En 13 de los 26 países de la región que fueron analizados, el 10 por ciento más pobre tiene menos del cinco por ciento del ingreso del 10 por ciento más rico, señala el informe.
«Los países de América Latina y el Caribe se sitúan entre los de mayor desigualdad de ingreso» del mundo y «sólo podrán alcanzar el objetivo de reducir la pobreza a 50 por ciento para 2015 si generan más crecimiento y (si) ese crecimiento beneficia a los pobres», advierte.
Pero el camino se ve cuesta arriba, pues para lograr mejoras en la distribución y el ingreso, la economía de los países debería crecer entre cinco y seis por ciento anual y eso no sucede, reconoció Martínez.
Mientras en Asia oriental y el Pacífico, el ingreso por habitante se cuadriplicó entre 1975 y 1999, en América Latina y el Caribe el crecimiento fue inferior a uno por ciento en el mismo periodo.
El índice de desarrollo humano (IDH), que incluye en su cálculo la esperanza de vida, los indicadores sobre educación y el ingreso por persona, es importante, pero hay que ver más allá para descubrir que en el caso de América Latina lo más relevante es la desigualdad, insistió la directora del PNUD.
El documento, que se presenta cada año desde 1990, incluyó en esta ocasión un estudio especial sobre el papel de la tecnología en la lucha contra la pobreza, y por primera vez una tabla de países, 72 en esta ocasión, ordenada por nivel de desarrollo tecnológico.
Según el tradicional IDH, Barbados (en el lugar 31 de la tabla mundial), Argentina (34), Uruguay (37), Chile (39), Costa Rica (41) y Bahamas (42) son los únicos países de América Latina y el Caribe ubicados en el grupo de alto desarrollo humano.
Con desarrollo humano medio figuran, en orden descendente, Trinidad y Tobago (49), México (51), Panamá (52), Belice (54), Venezuela (61), Colombia (62), Suriname (64), Brasil (69), Perú (73), Jamaica (78), Paraguay (80), Ecuador (84), Republica Dominicana (86), Guyana (93), El Salvador (95), Bolivia (104), Nicaragua (106), Honduras (107) y Guatemala (108).
En último lugar en la región, ya en el grupo general de desarrollo humano bajo, se ubica Haití, en el lugar 134.
Algunos países de la región, entre ellos Cuba, no aparecen en la tabla, pues no brindaron información estadística que sea posible comparar con la del resto de la región, indicaron técnicos del PNUD.
A pesar de que seis países (Barbados, Argentina, Uruguay, Chile, Costa Rica y Bahamas) aparecen en el grupo de alto desarrollo humano junto con los europeos, ninguna nación de América Latina y el Caribe está entre los líderes del desarrollo tecnológico.
Los mejor ubicados en la materia se encuentran en el grupo de 19 líderes potenciales, y son encabezados por México, seguido por Argentina, Costa Rica y Chile. Trece países latinoamericanos y caribeños figuran entre los 26 ubicados en el siguiente escalón, el de seguidores dinámicos.
América Latina se ubica mejor que otros países en materia de desarrollo de tecnología en medicina, agricultura y manejo de redes informáticas, pero su brecha con los países ricos sigue siendo muy grande, expresó Martínez.
Por ejemplo, la proporción de usuarios a la red mundial de computadoras Internet en la población subió en la región de 0,8 a 3,2 por ciento entre 1998 y 2000. Pero esa relación pasó en Estados Unidos, en el mismo periodo, de 26,3 a 54,3 por ciento.
No obstante las distancias con el mundo rico, el PNUD destacó los esfuerzos de Costa Rica, Cuba, Chile, Brasil y México por avanzar en el desarrollo de la tecnología.
Para cerrar distancias con el mundo industrial, el PNUD recomienda nuevas regulaciones internacionales, que los países reformen sus estrategias en la materia y que los países ricos y empresas privadas reconozcan que el mercado no podrá modificar esa situación por sí solo.
América Latina tiene mucho que hacer aún para subirse al carro de la tecnología y mejorar en materia de desarrollo, pero también habrá que considerar los efectos «negativos de la mundialización», dijo Martínez. (FIN/IPS/dc/mj/dv/01