Los presidentes Jiang Zemin, de China, y Fidel Castro, de Cuba, reforzaron en La Habana las relaciones bilaterales, que son "excelentes" y pasan por el "mejor período de la historia", según aseguraron.
Jiang finalizará este domingo una estancia de cuatro días en la isla, penúltima escala de una gira latinoamericana que comenzó el día 4 en Chile, siguió por Argentina, Uruguay y Brasil y concluirá en Venezuela.
Luego de sostener conversaciones oficiales, los gobernantes presidieron, el viernes, la ceremonia de suscripción de nueve acuerdos en materia económica y comercial.
Esos convenios, mediante los cuales Beijing concedió a La Habana créditos por 380,5 millones de dólares, destacan la creciente presencia del país asiático en la economía cubana, luego de la desaparición del campo socialista a principios de los años 90.
Doscientos millones de dólares están destinados a la modernización y expansión de las telecomunicaciones, 150 millones a la compra de televisores en China y 24 millones de dólares a la construcción de un hotel en la Habana.
Los dos países, que se rigen por el sistema socialista de partido único, «(nos) apoyamos y comprendemos", y la cooperación económica y comercial se encuentra en "expansión creciente", aseguró el portavoz vocero de la cancillería china, Zhu Bangzao.
Hay coincidencia en que los vínculos bilaterales pasan "por el mejor período de su historia" y las dos naciones mantienen una relación fructífera y de estrecha cooperación en la arena internacional, dijo el portavoz.
Al respecto, señaló el respaldo cubano a China ante acusaciones de violación de derechos humanos y para el ingreso de ese país a la Organización Mundial de Comercio.
Beijing y La Habana enfrentan mociones de censura en la Comisión de Derechos Humanos de la Organización de las Naciones Unidas, que sesiona en Ginebra.
En materia de derechos humanos «compartimos los mismos puntos de vista», opuestos a la injerencia en asuntos internos de otros países y en contra de la politización de ese asunto, comentó Bangza. Pero el asunto no fue abordado por Castro y Jiang, puntualizó.
"Estados Unidos ha promovido en nueve ocasiones en la Comisión de Derechos Humanos un proyecto de resolución contra China y en todas ha fracasado. No creemos que esta vez vaya a lograr otro resultado", dijo el portavoz.
El viaje por América Latina del presidente de China coincidió con una severa crisis diplomática entre su país y Estados Unidos, que comenzó a distenderse el miércoles. Un avión estadounidense de reconocimiento chocó en el aire el 1 de este mes con un avión caza chino, que cayó a tierra y cuyo piloto murió.
El avión espía debió realizar un aterrizaje de emergencia en territorio de China. Beijing permitió finalmente el regreso a Estados Unidos de los 24 tripulantes del aparato, y Washington presentó una nota diplomática que también contribuyó a la distensión.
El portavoz oficial chino aseguró que el caso aún no está cerrado y que Estados Unidos debe detener "sus vuelos de espionaje sobre China para evitar la repetición de estos incidentes", aunque evitó calificar el estado de las relaciones bilaterales.
Washington y Beijing iniciarán el próximo miércoles negociaciones para analizar el incidente, confirmó Bangzao.
Luego de una jornada de descanso en el balneario de Varadero, a 140 kilómetros de La Habana, Jiang partirá el domingo hacia Venezuela, donde permanecerá tres días.
Jiang visitó Cuba por primera vez en 1993, una ocasión en que Castro lo condecoró con la orden José Martí, la más alta distinción que confiere el Consejo de Estado de Cuba, y puso énfasis en el derecho de China a «construir el socialismo con peculiaridades propias».
Dos años después, el presidente cubano viajó a China para una visita de 10 días, en la que se entrevistó dos veces con Jiang.
La Habana considera que las autoridades chinas han tenido un «éxito notable» en el programa de desarrollo que aplican, caracterizado por la combinación del sistema socialista con la apertura a las inversiones extranjeras.
Es una experiencia «que examinamos continuamente» y de la cual «tomamos lo útil» para la realidad concreta de Cuba, que es muy distinta, señaló al respecto el canciller Felipe Pérez Roque, quien calificó de "excelentes" los lazos bilaterales.
China figura entre los principales socios comerciales de Cuba, con un intercambio que el año pasado superó los 480 millones de dólares.
Jiang viaja acompañado de su esposa Wang Yeping, del viceprimer ministro Qian Qichen, del ministro de la Comisión Estatal para el Desarrollo Planificado, Zeng Peiyan, y del ministro de Comercio Exterior y Cooperación Económica, Shi Guangsheng, entre otros funcionarios. (FIN/IPS/pg/ff/ip/01