AMBIENTE: Activistas golpean a compañía petrolera donde más duele

Activistas por el ambiente se jactan de haber logrado que importantes inversores de la petrolera Occidental Petroleum le hayan retirado su apoyo, aunque la compañía estadounidense no cesó sus perforaciones en terrenos reclamados por una tribu de indígenas colombianos, como querían.

Desde 1992, cuando la Occidental Petroleum obtuvo del gobierno colombiano los derechos de perforación en el noreste del país, los 5.000 miembros de la tribu u'wa, que se opone al proyecto y reclama la tierra como territorio sagrado, han recibido el apoyo internacional.

Sin embargo, cuando las críticas de grupos ambientales y humanitarios de todo el mundo no cambiaron los planes de la Occidental Petroleum, los activistas tomaron de blanco al principal accionista de la corporación, Fidelity Investments.

Tras una campaña de 10 meses por Rainforest Action Network, Amazon Watch y otros grupos ambientalistas, la firma con sede en Boston vendió más de 60 por ciento de sus acciones en Occidental por un total de 400 millones de dólares.

Aunque Fidelity dijo que no había conexión entre su desinversión y la campaña, los activistas afirmaron que fue el resultado de las numerosas protestas en Estados Unidos y Europa, las cuales hicieron impacto en la reputación de los inversores.

"Fidelity aprendió en forma contundente que ser socio de Occidental es peligroso para su imagen", dijo Atossa Soltani, directora de Amazon Watch, un grupo estadounidense.

Mientras los activistas pretenden que Fidelity retire el resto de sus acciones en la compañía petrolera, grupos de presion apuntan contra otros accionistas de Occidental, la firma inversora Sanford C. Bernstein y su igual Alliance Capital Management.

"Instamos a Sanford Bernstein y otros accionistas de Occidental Petroleum de seguir el ejemplo de Fidelity y sacar sus inversiones de esa compañía, que está quebrada moralmente con su proyecto petrolero desprovisto de toda ética", dijo Soltani.

La firma tiene 53 millones de acciones en Occidental , valuadas en 1.119 millones de dólares. A comienzos de diciembre, Roberto Pérez, jefe de la nación U'wa, envió una carta a la empresa exigiendo que venda sus acciones en la compañía petrolera.

"Las perforaciones de Occidental en nuestro territorio ancestral corren el riesgo de destruir la cultura de nuestros antecesores, que hemos llevado de generación en generación", expresó la carta dirigida a Roger Hertog, vicepresidente de Alliance Capital Management y Sanford C. Bernstein.

"Por esa razón, pedimos que ustedes retiren todas sus inversiones de Occidental", expresó. La carta de Pérez fue la continuación de su sorpresiva visita, junto con los activistas de Tareas de Defensa U'wa, integrado por grupos estadounidenses y europeos, a las oficinas neoyorquinas de Sanford C. Bernstein.

Durante la sorpresiva visita, Hertog dijo que investigaría la cuestión. Entretanto, la firma acrecentó sus activos en 10 millones de acciones y se transformó la principal inversora de Occidental.

Desde que la compañía comenzó a perforar por petróleo en noviembre, la tribu dijo que su territorio se encuentra fuertemente militarizado porque grupos insurgentes utilizan las instalaciones de Occidental como blanco de sus objetivos.

Al norte del territorio u'wa, la guerrilla atacó un oleoducto de Occidental y causó el derrame de 2,3 millones de barriles de crudo, según la firma petrolera estatal Ecopetrol.

Pérez dijo que si el proyecto no se cancela, los u'wa se verán atrapados entre dos fuegos en la guerra civil colombiana.

Además de la creciente violencia en el área, la tribu también se opone a las perforaciones porque cree que el petróleo es "la sangre de la madre tierra" y no debe ser tocada.

Basados en un precedente de tres siglos, amenazaron con cometer un suicidio en masa si se permite que Occidental siga adelante con sus planes. A fines del siglo XVII, muchos u'was se suicidaron arrojándose desde un precipicio para evitar la autoridad de un grupo de misioneros españoles y de recolectores de impuestos.

Si bien el gobierno sostiene que el proyecto petrolero está situado fuera de la reserva indígena, los u'was afirman que toda la tierra dentro del llamado bloque petrolero Samore, incluso aquella no demarcada dentro de la reserva, es su territorio sagrado.

Los u'was y sus partidarios intentan detener las perforaciones impugnando legalmente la licencia de la compañía. Fundamentan el caso con actas del rey de España que datan del siglo XVII. Las actas concedían a la tribu derechos sobre minerales en superficie o bajo el terreno que reclaman como propio.

En 1873, el gobierno colombiano declaró todos los derechos sobre minerales bajo la superficie como de propiedad de la nación, excepto aquellos cedidos previamente por las actas reales sobre el territorio. (FIN/IPS/tra-en/dk/da/ego/aq/en/01

Archivado en:

Compartir

Facebook
Twitter
LinkedIn

Este informe incluye imágenes de calidad que pueden ser bajadas e impresas. Copyright IPS, estas imágenes sólo pueden ser impresas junto con este informe