La alta Comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Mary Robinson, en el informe sobre su visita a Israel y territorios palestinos, propuso que se evalúe enviar una fuerza internacional de control a esa zona sacudida por la violencia en los últimos dos meses.
Robinson estimó que las autoridades israelíes no han excluido por completo la posibilidad de una presencia internacional, pese a que no aprueban la internacionalización del conflicto por esa vía y prefieren reanudar el diálogo con los palestinos a través de los carriles convenidos en el proceso de paz iniciado en Oslo.
La idea de una fuerza internacional había sido impulsada dos semanas atrás por funcionarios de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), pero fue abandonada ante la reacción negativa de Israel.
Robinson, antes de insistir en la propuesta, consultó el domingo al secretario general de la ONU, Kofi Annan, a quien le adelantó el borrador del documento que este lunes presentó a la mesa directiva de la Comisión de Derechos Humanos y a la Asamblea General del foro mundial.
La alta comisionada de la ONU estuvo en Medio Oriente entre los días 8 y 16, en cumplimiento de un mandato de la Comisión de Derechos Humanos, que realizó en octubre una sesión especial para examinar el nuevo estallido de violencia en esa región, que ya ha causado más de 200 muertes.
En el informe sobre el viaje expresa su profunda preocupación por el severo deterioro de la situación de los derechos humanos en los territorios palestinos ocupados y en Israel, y por el terrible costo en vidas humanas.
La situación general es extremadamente grave y por esa razón en mis recomendaciones refiero la urgente necesidad de una protección internacional o de alguna presencia internacional de control, dijo Robinson.
El conflicto acarrea consecuencias económicas devastadoras. Los cierres de accesos impiden llegar a sus ocupaciones a un número elevado de pobladores de los territorios palestinos, por lo cual una gran cantidad de familias recurren a sus últimos ahorros para comprar alimentos esenciales.
Los cierres de carreteras complican también la distribución de ayuda humanitaria. En Gaza y en la Banda Occidental escasean las materias primas, como el cemento. La industria de la construcción está paralizada y eso tiene un efecto asolador en el empleo.
Durante la visita a los territorios palestinos ocupados, Robinson recibió referencias de una realidad cotidiana de injusticias y humillaciones causadas por la ocupación israelí.
Dos médicas de Gaza describieron las humillaciones que padecen cuando atraviesan los puestos de control israelíes para dirigirse a la Banda Occidental, donde trabajan en un programa de salud infantil.
Robinson observó que ese cúmulo de humillaciones cotidianas no ha sido reconocido por los israelíes ni por las organizaciones de derechos humanos de ese país.
La alta comisionada estimó que se ha producido un deterioro de la imagen de Israel debido a la intensidad del conflicto, al número de adolescentes palestinos heridos o muertos y al uso excesivo de municiones letales.
El informe recomienda el cese de la construcción de nuevos asentamientos de colonos judíos y el traslado de aquellos instalados en áreas densamente pobladas por palestinos.
Todos los casos de empleo de fuerza letal, por parte de ambos bandos, deben ser investigados y sometidos a la justicia, para evitar la impunidad, comentó.
El documento reclama el respeto de todos los lugares santos y del acceso de todas las confesiones religiosas.
Robinson puntualizó también que las autoridades israelíes deben facilitar el acceso y la libertad de movimiento del personal local e internacional de las agencias de la ONU. (FIN/IPS/pc/dm/ip hd/00