El presidente electo de México, Vicente Fox, puso bálsamo en los mercados al presentar un equipo ortodoxo de ministros en el área económica, y dejó expectativas abiertas en otros campos en que pretende equilibrar intereses, ideologías, regiones y géneros.
Nueve días antes de asumir la Presidencia, Fox anunció quiénes serán sus secretarios (ministros) de Hacienda, Economía (Comercio), Comunicaciones y Transportes, Energía, Agricultura, Medio Ambiente y Turismo.
Además, informó que su canciller será Jorge Castañeda, académico, analista y escritor conocido en círculos políticos de América Latina, y que su portavoz y jefa de prensa será Martha Sahagún, quien lo acompaña desde que fue gobernador del estado central de Guanajuato a mediados de los años 90.
También fueron dados a conocer otros funcionarios de menor rango. Como en el caso de los secretarios, la mayoría son hombres sin filiación partidaria, originarios de diversos puntos del país y cercanos al mundo empresarial.
En los días siguientes, Fox dio a conocer el resto del equipo de secretarios, que se proyecta como un «prodigio de equilibrio pragmático», según Sergio Aguayo, columnista del diario Reforma, Sergio Aguayo.
Ante una multitud de periodistas y en una acto en que se presentó un video promocional de lo que será el próximo gobierno, Fox, quien asumirá este viernes, dijo que su equipo de trabajo fue escogido «lejos de la cultura del amiguismo», que prevaleció en el pasado.
Son las mejores personalidades y forman «un equipo profesional que tienen un profundo amor por México», declaró.
Crecimiento con calidad, desarrollo humano y gobierno democrático y plural son los lemas que los guiarán, indicó Fox, un empresario afiliado al conservador Partido Acción Nacional.
Los principales objetivos de los secretarios de Estado serán combatir la pobreza, gastar el dinero de manera oportuna y eficaz, liberar la creatividad productiva de la población y generar más empleos y mejor remunerados, apuntó.
El presidente electo, un ex directivo de la Coca-Cola, se comprometió a trabajar desde este viernes con una actitud gerencial, manifiesta en objetivos y metas previamente establecidos y en la rendición pública de cuentas.
En el próximo cambio de gobierno, según analistas, no se vislumbra una crisis económica, a diferencia de lo sucedido en los anteriores. Este será el primero en 71 años en que un presidente perteneciente al Partido Revolucionario Institucional (PRI) entregue el poder a uno ajeno a ese sector.
El presidente Ernesto Zedillo está a punto de terminar seis años de gestión con una economía que crece siete por ciento anual, inflación de un dígito, bajo déficit fiscal, holgura en los compromisos de pago de deuda externa, reservas internacionales robustas y una elevada confianza en los mercados.
En la Secretaría de Hacienda estará Francisco Gil, quien trabajó hasta este mes como ejecutivo de una firma telefónica de capital estadounidense. Gil fue viceministro de Ingresos y vicegobernador del Banco Central en épocas del presidente Carlos Salinas (1988-1994).
Gil, afiliado al PRI, aunque sin militancia activa, estudió economía en la Universidad de Chicago, se considera discípulo del premio Nobel de Economía Milton Friedman y defiende el neoliberalismo y la ortodoxia económica, según analistas.
Al frente de la Secretaría de Economía, antes llamada de Comercio, Fox ubicó a Luis Derbez, un economista con estudios en las universidades estadounidenses de Oregon y Iowa y que trabajó hasta 1997 para el Banco Mundial, diseñando y asesorando programas de ajuste para países de América Latina, Africa y Asia.
Derbez es un viejo amigo de Fox, y, aunque ha criticado algunas acciones del gobierno de Zedillo, considera que el modelo de apertura y liberalización impulsado los últimos años es el mejor para México.
Gil y Derbez trabajarán junto a otros miembros del equipo económico bajo una coordinación general de asesores ejercida desde la casa de gobierno por Eduardo Sojo, amigo cercano del presidente electo y doctor por la Universidad de Pennsylvania, Estados Unidos.
Como secretario de Comunicaciones y Tranportes fue designado Pedro Cerisola, ex director general de la línea aérea Aeroméxico, ex director de operaciones de la poderosa teléfonica Telmex y ex coordinador de la campaña electoral de Fox.
En la cartera de Energía Fox ubicó al ex alumno de Harvard Ernesto Martens, quien ha sido directivo de las poderosas firmas Cintra, de tranporte, y Vitro, productora de vidrio.
En Agricultura el designado fue Javier Usabiaga, empresario rural, ex directivo de grupos bancarios y ex colaborador de Fox en el gobierno estatal de Guanajuato.
Víctor Lichtinger, un antiguo colaborador de la cancillería, ocupará la Secretaría de Medio Ambiente, y la administradora de empresas Leticia Navarro la de Turismo.
«Los mercados financieros deben estar felices. Fox les regaló unos ministros a su medida. Ahora hay que esperar para saber si en el área social hace lo mismo», opinó el analista Raúl Pieza. (FIN/IPS/dc/mj/ip if/00