El presidente electo de México, Vicente Fox, se reunió hoy con mandatarios de América Central para apuntalar el proyecto de desarrollo regional, mientras otras personalidades visitantes saludaron la transición política que vive el país.
Fox asumirá este viernes la Presidencia, en el marco de actos y fiestas que se extenderán hasta el próximo domingo, con los ojos del mundo atentos al fin de los 71 años de mandato en forma ininterrumpida del Partido Revolucionario Institucional (PRI).
El hecho de reunirse primero con los gobernantes de América Central da una idea del interés del nuevo gobierno mexicano por la región y por América Latina, dijo el presidente de Argentina, Fernando de la Rúa.
El mandatario saliente Ernesto Zedillo demostró ser un estadista de altura, pues permitió las elecciones más amplias y libres que se recuerden en México, y Fox tendrá el gran desafío de dar repuesta a las expectativas de su pueblo, agregó De La Rúa.
Por su parte, el presidente de Costa Rica, Miguel Angel Rodríguez, uno de los presentes en la reunión de este jueves, dijo que está «en el mismo barco» que Fox y trabajar en conjunto es la mejor manera de lograr el desarrollo.
El plan Puebla-Panamá, ideado por Fox, se propone impulsar, con un apoyo inicial de 2.000 millones de dólares de organismos multilaterales de financiamiento, obras de infraestructura como carreteras y gasoductos, la promoción de inversiones y el impulso al comercio regional.
La zona que va desde Puebla (estado del centro de México) hasta Panamá está habitada por 60 millones de personas, distribuida en siete países centroamericanos y nueve estados mexicanos, con altos índices de marginación y severos problemas sociales y económicos.
El designado secretario (ministro) de Hacienda, Francisco Gil, informó que la empresa estatal petrolera Pemex, la quinta más grande de su tipo en el mundo, abrirá en los meses próximos expendios de venta de combustible en varios países de América Central, en lo que es unos de los primeros acuerdos del plan.
México afronta una transición que enorgullece, pues es un proceso de alta calidad, «que en otras circunstancias hubiera podido ser traumático», opinó José Antonio Ocampo, secretario ejecutivo de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe.
Los visitantes, que comenzaron a llegar el miércoles y entre los que se espera al presidente de Cuba, Fidel Castro, son acompañados de un gran despliegue policial de seguridad que ha generado caos es varias zonas de la capital mexicana.
Admiradores de Castro colocaron en la céntrica avenida Paseo de la Reforma numerosos carteles con su imagen y una leyenda de bienvenida, mientras la llamada ala crítica del PRI emitió un comunicado pidiendo que se lo declare persona no grata.
Las relaciones con América Latina serán prioritarias para el nuevo gobierno, apuntan los colaboradores de Fox.
Desde el 2 de julio, cuando fuera elegido presidente del país, Fox visitó varios países latinoamericanos y expresó su interés por relanzar la relación con esa región que, según observadores, decayó durante la gestión de Zedillo porque éste privilegió los vínculos con Estados Unidos.
México, pese a que firmó 10 tratados de libre comercio y numerosos acuerdos comerciales menores con países de todo el mundo, concentra más de 80 por ciento de su intercambio con Estados Unidos.
«Con la llegada de Vicente Fox a la Presidencia llega el momento de un acercamiento más fuerte entre México y Brasil», manifestó el mandatario de ese país, Fernando Henrique Cardoso.
Para mí es un gran honor asistir a este histórico cambio en México, comentó por su parte el príncipe Felipe de Borbón, heredero de la corona de España.
Fox nombró para conducir las relaciones internacionales al politólogo y escritor Jorge Castañeda, autor de libros como «Utopía desarmada», «La herencia» y «La vida en rojo: la biografía del Che».
El senador estadounidense, Jesse Helms, del Partido Republicano, calificó a Castañeda de comunista.
Sin embargo, el secretario general de la Organización de Estados Americanos, César Gaviria, consideró que el nombramiento de un «intelectual de la talla de Castañeda» fue un gran acierto de Fox.
Gaviria y el resto de visitantes extranjeros asistirán a la ceremonia de posesión del mando este viernes por la mañana, mientas que en la noche de ese día participarán en una cena en el lujoso castillo de Chapultepec, hogar de los gobernantes mexicanos en el siglo XIX e comienzos del XX. (FIN/IPS/dc/dm/ip/00
