El «desafío crucial» de América Latina y el Caribe es combinar su inserción en el proceso mundial de globalización con su integración regional, según Otto Boye, secretario permanente del SELA.
Boye, ex embajador de Chile en Venezuela, recalcó estos dos elementos como ejes de la visión del organismo, que cumple 25 años y que entre este lunes y el miércoles tendrá en Caracas su vigéesimosexta reunión de ministros en el marco del Consejo Latinoamericano.
«El proceso de globalización desafía al continente y hay que insertarse de una u otra manera. Ese es el gran dilema de América Latina y el Caribe», dijo Boye, quien asumió la secretaría del SELA (Sistema Económico Latinoamericano) en diciembre pasado, en sustitución del argentino Carlos Moneta.
Al evaluar el martes el cuarto de siglo del organismo, el diplomático dijo que «vive una gran oportunidad y justificación hacia el futuro».
Boye explicó en una conferencia de prensa, en la sede del sistema en Caracas, que la integración latinoamericana y caribeña requiere de un proceso de institucionalización, para lo cual el SELA podría jugar un papel relevante.
«La institucionalización de la integración necesita de un órgano político máximo y una instancia ejecutiva», aseguró Boye, al tiempo que recordó que el SELA se mueve en esos dos niveles y agrupa a 28 países de América Latina y el Caribe.
«Se necesita financiamiento para la integración», recalcó por otra parte Boye.
El SELA fue creado en 1975 por iniciativa de México y Venezuela. En la próxima reunión, su Consejo Latinoamericano evaluará la historia del organismo y sus perspectivas.
«Inserción e integración deben considerarse fenómenos complementarios y la estrategia regional a seguir pudiera definirse como de inserción con integración», indica el documento central que será debatido en la cita de Caracas.
El vigesimosexto Consejo Latinoamericano tendrá una fase técnica, un panel de discusión y luego una reunión ministerial. Este último momento será inaugurado por el presidente venezolano Hugo Chávez.
«El SELA ha atravesado las mismas vicisitudes del continente. Ha tenido sus altas y bajas», comentó Boye.
Para el diplomático chileno, el proceso de globalización es la prioridad de América Latina desde los años 90.
«La deuda externa no deja de ser un problema, pero no está en la prioridad de la agenda de muchos países», aseveró Boye, y dijo que el aumento del ingreso por exportaciones alivió la carga del pago del endeudamiento.
En relación con la integración, puntualizó que existe «una vía latinoamericana» que pasa por acuerdos subregionales con la posibilidad, ahora en discusión, de la articulación y convergencia de estos sistemas subregionales.
A su juicio, América Latina y el Caribe requiere de forma urgente una mayor integración entre sus países «para mejorar la negociación y negociar como un todo» el Area de Libre Comercio de las Américas (ALCA), que es una iniciativa de Estados Unidos.
Por otra parte, al referirse a los 25 años del sistema, Boye anunció que por primera vez en Caracas se darán cita los ex secretarios permanentes del SELA, por lo que será un escenario propicio para analizar las posibilidades futuras del organismo.
En estas sesiones coincidirán el ecuatoriano Jaime Moncayo, el peruano Carlos Alzamora, el venezolano Sebastián Alegrett, el mexicano Salvador Arriola, el uruguayo Carlos Pérez del Castillo y el argentino Moneta. (FIN/IPS/ac/mj/if/00