Tres compañías transnacionales, gigantes del comercio de banano, recomendaron a Costa Rica, el segundo productor mundial de la fruta, reducir 25 por ciento su cosecha y despedir a más de 5.000 trabajadores para recobrar competitividad.
Seis gerentes de las empresas estadounidenses Standard Fruit Company, Del Monte y Chiquita Brands, dijeron en una entrevista publicada este lunes por el diario La Nación, de esta capital, que Costa Rica debería abandonar 25 por ciento de sus plantaciones. Es decir, poco más de 10.000 hectáreas.
La recomendación de las tres multinacionales provocaría el despido de 5.000 o 6.000 trabajadores y tendría un impacto social importante, si fuera aplicada.
Los ejecutivos de las compañías estadounidenses exhortaron al gobierno de Costa Rica a apoyar al sector bananero local, que ha perdido competitividad frente a Ecuador, el mayor productor mundial. Los costarricenses exportan a precios que los podrían sacar del mercado, señalaron.
La recomendación fue realizada por Peter Gilmore y Juan Carlos Rojas, de Standard Fruit Company, José Antonio Yoch y Hubert Steinvorth, de Del Monte, y Mario Broutin y Enrique Vásquez, de Chiquita Brands de Costa Rica.
El sector bananero costarricense ha entrado en crisis por los bajos precios internacionales, por la sobreproducción mundial y por la decisión de la Unión Europea (UE) de abandonar el sistema de compra de cuota-país, que le aseguraba a Costa Rica 25,6 por ciento del mercado de ese bloque de 15 países.
Las tres empresas multinacionales advirtieron que reducirán sus compras a los productores independientes, quienes proporcionan 58 por ciento del banano que exporta Costa Rica, y que muchos contratos de compra no serán renovados el próximo año.
«Esta una bofetada para los productores costarricenses, las compañías transnacionales nos quieren llevar a niveles de hambre», dijo a IPS Luis Umaña, vicepresidente de la Cámara Nacional de Productores Independientes.
Umaña reconoció que este año, una considerable cantidad de predios de cultivo tendrán que salir de la actividad bananera y se preguntó qué pasaría con miles de trabajadores si Costa Rica abandonara 25 por ciento de sus plantaciones.
Los ejecutivos de las tres compañías transnacionales indicaron que Costa Rica deben bajar el precio de la caja de banano, de 18,14 kilogramos, si quiere competir con Ecuador.
El costo de producción de la caja de banano ecuatoriano oscila actualmente entre 2,30 y 3,80 dólares, mientras que la de Costa Rica cuesta cerca de 5,20 dólares.
Umaña afirmó que el sobreprecio de la producción costarricense se debe a la inversión ambiental y a garantías laborales. También advirtió que las buenas condiciones sociales de las plantaciones de este país se podrían en riesgo si se recortan los precios.
A su juicio, es muy peligroso que las empresas transnacionales tengan en sus manos el poder de decidir quién sigue y quién no sigue en el mercado del banano.
El Ministerio de Comercio Exterior señaló que la crisis en curso incidirá de manera importante en las exportaciones del país. Se calcula que este año se exportarán 116 millones de cajas de banano, frente a 132 millones en 1999.
«Estamos en una situación muy difícil, pues teníamos mucha esperanza en nuevos mercados como Rusia y China, que no han respondido a nuestras expectativas de compra», dijo a IPS Eduardo Gómez, un productor de banano.
Gómez dijo que todos los actores de la actividad bananera deben esforzarse por mantener las condiciones de seguridad ambiental y las garantías laborales.
La actividad bananera emplea directamente en Costa Rica a 40.000 personas y de modo indirecto a 100.000. En 1999, el país obtuvo casi 700 millones de dólares por la exportación de esta fruta.
La prensa de Nicaragua destacó que la crisis bananera de Costa Rica podría tener impacto en ese país, pues muchos inmigrantes nicaragüenses se desempeñan en fincas costarricenses y envían remesas a sus familiares. (FIN/IPS/nms/ff/if/00