Belice, Costa Rica y Panamá presentan los mejores índices de desarrollo en América Central, una región caracterizada por la desigualdad entre países y grupos sociales, advirtió el Fondo de las Naciones Unidas para la Población (FNUAP) en su informe anual.
«Estamos pagando un precio muy alto por la desigualdad», dijo el miércoles Patricia Salgado, oficial nacional del FNUAP en Costa Rica, en la presentación del informe «Estado de la población mundial 2000».
Salgado dijo que la desigualdad en todos los niveles, especialmente en materia de género, está frenando el desarrollo de las personas, las comunidades y los países en esta región de 36,3 millones de habitantes.
Según la investigación, mientras en Costa Rica hay cinco por ciento de analfabetismo entre los varones y cuatro por ciento entre las mujeres, en Guatemala esos porcentajes se elevan a 24 y 40, en Honduras a 26 en los dos casos y en Nicaragua a 33 y 30 por ciento.
El informe calcula que en 2025 la población de América Central se elevará a 58,3 millones de personas, motivo de preocupación pues representa un aumento de 60,6 por ciento en apenas un cuarto de siglo.
«Esta situación nos preocupa pues el crecimiento de la población está muy relacionado con la expansión de la pobreza. En la medida en que logremos estabilizar la población podremos combatir mejor las carencias», dijo Salgado a IPS.
La funcionaria consideró necesaria la difusión de campañas informativas sobre derechos sexuales y reproductivos en la región, pues una población más conciente e informada tiene, en general, menos hijos.
Noventa y cinco por ciento de los habitantes de Belice y de Panamá manifiestan conocer métodos anticonceptivos, pero en Guatemala, por ejemplo, este tipo de información es desconocida para casi 30 por ciento.
Sin embargo, otros expertos señalan otras prioridades para los próximos años en materia de población en América Central.
«Antes que una reducción del crecimiento de la población centroamericana, los gobernantes deberían apostar por una distribución más equitativa de la riqueza», dijo a IPS Julio Varela, director del Instituto de Estudios Sociales en Población de la estatal Universidad Nacional costarricense.
Analistas del Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) también han señalado las grandes diferencias sociales entre los distintos países y aun dentro de ellos que imperan en América Central.
La pobreza abarca a 80 por ciento de la población de Nicaragua, y la mitad de los habitantes viven en condiciones de pobreza extrema.
El informe del FNUAP revela que la educación continúa constituyendo uno de los problemas más acuciantes. En países como Panamá la matrícula de la enseñanza secundaria llega a 61 por ciento de los jóvenes en edad de estudiar, pero ese porcentaje se reduce a 45 en Honduras.
«Este estudio revela que muchos retos quedan pendientes, y uno de ellos es el fenómeno de la feminización de la pobreza», dijo a IPS Grace Prada, directora de la maestría de estudios de la mujer de la UNA.
La mujer es una víctima principal del sistema económico, laboral y social que rige en América Central y que se refleja en una desigualdad salarial respecto de los hombres y en un escaso acceso femenino a servicios sociales de calidad, según Prada.
De acuerdo con el informe, por cada 1.000 mujeres hondureñas 115 muchachas entre los 15 y 19 años han tenido alumbramientos. Esa cifra se eleva a 119 en Guatemala. Se estima que la mayoría de esos partos no son atendidos por personal médico capacitado. (FIN/IPS/nms/mj/pr dv/00