La capital de Venezuela fue atravesada hoy por las comitivas de dignatarios ataviados con túnicas árabes, trajes africanos, asiáticos u occidentales que en un marco de estricta seguridad participan de reuniones bilaterales previas a la cumbre de la OPEP.
Los 11 miembros de la OPEP (Organización de Países Exportadores de Petróleo), creada hace 40 años, realizan desde este miércoles en Caracas su segunda reunión cumbre, un acontecimiento aprovechado por las delegaciones interesadas en profundizar contactos bilaterales.
El presidente anfitrión, Hugo Chávez, instaló su oficina en un hotel, donde fue visitado por casi todos sus huéspedes. Otro centro de actividades fue el alojamiento del emir de Qatar Hamad Ben Khalifa Ben Hamed Al-Thani.
Las 11 delegaciones participantes en la reunión agotaron las plazas ofrecidas por los hoteles de cinco estrellas de una ciudad de cuatro millones de habitantes, y realizan todos sus traslados con fuerte escolta.
Mientras los países industrializados y los operadores del mercado petrolero concentran su atención en posibles novedades en la estrategia de precios de la OPEP, los habitantes de Caracas observan con curiosidad una verdadera explosión de diversidad.
El presidente de Irán, Seyyed Mohammad Jatami, circuló por Caracas y por los pasillos de su hotel ataviado con el traje típico de su país, y lo mismo hacen Abdurrahman Wahid, de Indonesia, y Olusegun Obasanjo, de Nigeria.
Seis de los 11 países de la OPEP estan representados por sus gobernantes, mientras que los otros cinco enviaron delegaciones de alto nivel que incluyen a personalidades como el príncipe heredero de Arabia Saudita, Abdullah Bin Abdulaziz Al Saud, o el vicepresidente de Iraq, Taha Yassin Ramadan.
Chávez propuso la celebración de la cumbre poco después de llegar al gobierno en febrero de 1999, y logró hacerla realidad tras viajar en agosto de este año a todos los países miembro de la organización.
El presidente venezolano ha demostrado gran interés por la cultura de los otros países de la OPEP, y en sus frecuentes mensajes por radio o televisión ha destacado la necesidad de informarse con mayor profundidad de la realidad de los "hermanos del mundo árabe e islámico".
Venezuela, actualmente el único miembro sudamericano de un grupo en el que también participó Ecuador en el pasado, es socio fundador, y a sus delegados se les adjudica un papel clave en la gestación de la OPEP, fundada el 14 de septiembre de 1960.
La primera cumbre de la OPEP se celebró en 1975 en Argelia.
El antagonismo entre algunos de sus miembros, notoriamente entre Iraq e Irán, que se enfrentaron con las armas en los años 80, y entre Iraq y Kuwait, las dos naciones en que se concentró la guerra del Golfo, de 1991, había postergado hasta ahora la oportunidad de la segunda cumbre.
Esos antagonismos aún existen, pero todos los países acordaron aceptar la convocatoria de Chávez, quien planteó la necesidad de actualizar la OPEP frente a los desafíos del siglo XXI.
Los venezolanos recibieron abundante información sobre la importancia de esta reunión y sobre la importancia de hospedarla en su capital. "Venezuela promueve la armonía global", aseguró la campaña gubernamental sobre la cumbre.
Las delegaciones comenzaron a llegar el fin de semana, y los jefes de Estado y de gobierno llegaron este martes al aeropuerto internacional Simón Bolívar, donde fueron recibidos por Chávez en medio de un espeso protocolo.
Para los habitantes de Caracas la visita significa cierres de calles, restricciones a la circulación, controles policiales y la presencia de numerosos escoltas con diversos uniformes. Los desvíos han ocasionado atascos.
Por otra parte, las calles aledañas a los hoteles fueron limpiadas, y los vendedores callejeros y mendigos fueron retirados por la policía. Así cambió por algunos días la cara de esta nación petrolera donde 80 por ciento de la población vive en situación de pobreza.
Mientras, los medios de comunicación venezolanos reflejan la gran curiosidad de los venezolanos por las costumbres de sus invitados y sus grandes comitivas.
Los periodistas de televisión entrevistan a empleados de los hoteles sobre los habitos alimenticios de las delegaciones musulmanas, las restricciones de seguridad y los pedidos formulados desde las habitaciones de los gobernantes. (FIN/IPS/lc/mj/if ip/00