Los hechos que condujeron al doloroso nacimiento de Bangladesh hace casi 29 años resurgieron este mes cuando una revista de India publicó un documento clasificado filtrado del gobierno de Pakistán, para indignación de Islamabad.
El informe de la comisión Hamoodur-ur-Rahman se refiere a la rendición del ejército paquistaní ante el indio, en diciembre de 1971, y a la creación de Bangladesh en el antiguo Pakistán Oriental.
El documento acusa de genocidio a varios generales paquistaníes protagonistas de esa guerra, donde un millón de bengalíes perdieron su vida, mientras otros 10 millones debieron huir a India.
El jefe de gobierno de Pakistán, general Pervez Musharraf, ya ordenó investigar la filtración a la revista India Today de las conclusiones clasificadas de la investigación sobre las circunstancias que condujeron a la separación del antiguo Pakistán Oriental.
"Se trata realmente de un asunto sensible y debemos aprehender a quienes proveyeron información clasificada a India solo para humillar a nuestro ejército en la víspera del día de la independencia", declaró el ex jefe del ejército paquistaní, Mirza Alam Beg.
La publicación del informe en India Today coincidió con la celebración de los 53 años de la independencia del subcontinente del dominio colonial británico, los días 14 y 15.
Nueva Delhi se negó a hacer comentarios sobre el informe, excepto que no contiene ninguna novedad.
"Debemos comportarnos como una nación responsable", declaró un alto funcionario de gobierno.
Pero el analista de defensa y asuntos estratégicos K. Subrahmanyam opinó que los acusados en el informe deben ser juzgados y castigados.
"Cuando Pakistán habla de defender a los musulmanes de Cachemira, se olvida de lo que hizo a los bengalíes de Pakistán Oriental. ¿Acaso no eran lo suficientemente musulmanes?", preguntó Subrahmanyam.
El contenido del informe resultaba tan perjudicial para Pakistán que el primer ministro de aquel entonces, Zulfiqar Alí Bhutto, quien lo había encargado, se vio obligado a ocultarlo.
Se dijo que todas las copias fueron quemadas, pero según India Today, una se salvó.
La publicación del informe dio lugar a exigencias de desclasificación en Islamabad, en especial por parte de aquellos generales acusados de crímenes en el documento.
Sin embargo, observadores políticos de Pakistán no creen que Musharraf atienda ese reclamo. Eso sería muy embarazoso para Islamabad, que ya está bajo presión para ordenar una investigación sobre la derrota del año pasado en la zona de Kargil, en la frontera con India.
El conflicto no declarado de Kargil terminó cuando el presidente estadounidense Bill Clinton convenció al gobierno de Pakistán de que hiciera retirar a los infiltrados del lado indio de la región de Cachemira.
"La derrota de diciembre de 1971 tuvo origen en 1958, cuando las Fuerzas Armadas tomaron el poder" de Pakistán, declaró a los investigadores M. Sharif, quien comandaba la Armada fuera de las costas de Pakistán Oriental durante la guerra.
"En su nuevo papel, los militares aprendieron el arte de la política pero gradualmente olvidaron el arte de la guerra, que era su función primaria, y también comenzaron a amasar riqueza y a usurpar cargos", acusó Sharif.
La comisión investigadora afirmó que "los más altos oficiales del ejército habían perdido no solo la voluntad de pelear sino también la competencia profesional necesaria para tomar decisiones vitales para el éxito en una guerra".
Beg y otros militares criticaron a los sucesivos gobiernos paquistaníes por no haber publicado el informe, y señalaron que eso dio a India la oportunidad de humillar a Pakistán.
La publicación del informe es necesaria porque su contenido es relevante para la situación actual de Pakistán, comentó Iftijar Ahmad Sarohi, ex comandante de la Armada y presidente del comité del Estado Mayor Conjunto. (FIN/IPS/tra-en/rdr/mu/mlm/ip/00
