La Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) decidió que ningún líder religioso asistirá a la Cumbre del Milenio, programada del 6 al 8 de septiembre.
Se esperaba que un representante de los 1.000 líderes religiosos y espirituales que concurrirán a la primera Cumbre Mundial de la Paz del Milenio en menos de dos semanas sería invitado a participar en las sesiones plenarias de la Cumbre del Milenio.
Participarán de la cumbre de septiembre unos 125 jefes de estado y de gobierno que adoptarán una Declaración del Milenio, proyectando una visión global para el siglo XXI.
Bawa Jain, secretario general de la Cumbre Mundial de la Paz del Milenio de Líderes Religiosos y Espirituales, anunció que protestará por la decisión de la ONU. Jain ya planteó la cuestión al secretario general, Kofi Annan.
"Vamos a llevarlo al más alto nivel. Estoy consternado y desilusionado porque algunos estados votaron para que esto no ocurra. No puedo entender por qué", dijo.
En un proyecto de resolución presentado la semana pasada por el presidente de la Asamblea General de la ONU, Theo-Ben Gurirab, de Namibia, se recomendó la inclusión de un representante de líderes religiosos y espirituales en la lista de oradores de las sesiones plenarias de la Cumbre del Milenio.
La Cumbre Mundial de la Paz se llevará a cabo una semana antes de la conferencia del milenio en forma intencional, para tener "mayor impacto", según Jain. "El secretario general de la ONU nos dio la fecha teniendo en cuenta específicamente ese factor".
Sin embargo, en la resolución sobre "organización de la Cumbre del Milenio de la ONU", emitida esta semana, la referencia a los líderes religiosos y espirituales que asisten a la conferencia de paz fue eliminada.
"Ese era un compromiso hecho desde el principio y ahora estoy muy desilusionado. Muchas de las religiones representadas en la cumbre no se habían reunido antes y tienen diferencias fundamentales, pero ahora se reúnen en el espíritu de la ONU. Bloqueando esto, la ONU afecta a toda la causa", afirmó Jain.
Interrogado sobre los motivos del voto contrario de algunos estados a la participación de religiosos en la cumbre, Jain dijo que "les preocupó mucho la amplia publicidad que estábamos obteniendo. Algunos países tienen una clara política sobre la separación de Iglesia y Estado".
China, que impidió la asistencia del Dalaí Lama, líder espiritual del Tibet, a la Cumbre de la Paz en el edificio de la ONU, se opuso a la participación de líderes religiosos y espirituales en la conferencia.
El Dalaí Lama, el líder budista que huyó de Tibet en 1959 tras el fracaso de una revuelta contra el poder chino, sigue desde el exterior su lucha contra la ocupación de su patria.
Wang Doaghua, representante de China, destacó que la Cumbre del Milenio será de naturaleza intergubernamental y objetó la propuesta de representación de organizaciones no gubernamentales (ONG), incluso organizaciones religiosas y espirituales.
"Desde el comienzo tuvimos gran cooperación con los chinos. Estoy muy sorprendido y voy a hablar con el embajador. Comprendimos sus reparos y los respetamos, aunque no estamos de acuerdo. Estoy muy desilusionado por su reacción", expresó Jain.
La decisión fue un compromiso tácito de la Asamblea General para evitar protestas por la posible participación de las ONG en la cumbre.
La Asamblea acordó que portavoces del Foro del Milenio, una reunión de ONG que elaboró una declaración para expresar sus intereses en la Cumbre del Milenio, podrán asistir a esa reunión, pero los líderes religiosos quedarán excluidos.
Ahmad Chaudhry, representante de Pakistán, dijo a los delegados la semana pasada que si bien está de acuerdo con la presencia de ONG y la sociedad civil en la cumbre, creía que la participación de líderes religiosos y espirituales podría sugerir "selectividad".
Bawa Jain discrepó. Si bien el Foro del Milenio tuvo una representación religiosa, piensa que "no fue suficiente" porque ninguna de las máximas denominaciones religiosas mundiales estuvieron allí y no hay ONG afiliadas a la ONU.
Jain insistió en que los líderes religiosos y espirituales que desean concurrir tienen un mandato más amplio que cualquier jefe de Estado o institución política. "Estamos hablando de 83 por ciento de la población mundial (que adhiere a algún sistema religioso o espiritual formal)", subrayó.
"Es importante para los líderes religiosos y sus intereses que reciban respeto. Han hecho un importante compromiso para ayudar y colaborar con la ONU. Eso nunca se había hecho antes", agregó.
Representantes de la Unión Europea (UE) e India figuraron entre aquellos que lamentaron la exclusión de líderes religiosos. Atl Khare, de India, dijo que se unió a los que desaprobaron el bloqueo de líderes religiosos como participantes.
Yves Doutriaux, representante de Francia, hablando en nombre de la UE, había expresado la esperanza de que grupos no gubernamentales, incluso religiosos, fueran invitados a la cumbre.
"Pensamos que es una buena idea, porque la ONU es un espacio abierto, siempre interesado en escuchar nuevas ideas. Tratamos de apoyar la Cumbre de Paz si bien no hubo un pedido formal en ese sentido de sus organizadores", manifestó.
Los organizadores de la Cumbre de Paz dijeron que, al no estar representados en la Cumbre del Milenio, perderán la oportunidad de conocer los compromisos que contraerán los jefes de estado y el papel que podrían jugar los líderes religiosos en su implementación.
Aunque se revierta la decisión, la Cumbre de Paz seguirá teniendo un impacto en cada estado miembro de la ONU, según Dena Merriam, vicepresidenta de la reunión.
"De cualquier manera habrá un informe que será enviado a las misiones y los jefes de Estado acerca de las decisiones y resultados de la Cumbre de Paz", aclaró. (FIN/IPS/tra-en/ml/da/ego/mlm/cr-ip/00