El presidente colombiano Andrés Pastrana y el estadounidense Bill Clinton admitieron hoy que el nuevo plan de lucha contra el narcotráfico afectará a los países vecinos de Colombia.
Los dos mandatarios, que sellaron en el puerto colombiano de Cartagena una alianza estratégica, coincidieron en que el objetivo común es luchar contra el narcotráfico y buscar la paz interna en este país, al hablar en rueda de prensa realizada al concluir la visita de nueve horas de Clinton.
También descartaron que se planee una intervención militar directa estadounidense a Colombia y prometieron apoyo a los países vecinos que resulten afectados de alguna manera por la ejecución del nuevo plan de lucha contra las drogas, que incluye programas de desarrollo y búsqueda de la paz.
Clinton admitió que el llamado Plan Colombia puede producir el éxodo de campesinos a causa de la violencia y la incursión fuera de fronteras de guerrilleros y narcotraficantes, como advirtieron Brasil, Ecuador, Panamá, Perú y Venezuela.
Al respecto, aseguró que Estados Unidos cuenta con recursos para asistir a esos países en caso de que esto ocurra una vez que se ponga en marcha el programa, que podría comenzar antes de fines de año.
Washington apoya una solución pacífica y negociada del conflicto armado interno colombiano, ya que la vía militar no ha logrado resolver el problemas que se arrastra desde hace 40 años, agregó Clinton.
«Lo que queremos es incrementar la capacidad del gobierno colombiano para combatir contra los narcotraficantes" y, al hacerlo, reducir los ingresos provenientes «de ese negocio ilegal», lo cual aumentará las posibilidades del presidente Pastrana «de encontrar una solución pacífica a la guerra civil, afirmó.
El gobernante estadounidense también se refirió a las relaciones comerciales entre ambos países.
Anunció que tramitará ante el Congreso un recurso para modificar la legislación comercial vigente, con el fin de otorgar a Colombia beneficios arancelarios para productos que no están incluidos en la ley de preferencias que brinda a los paíss andinos (ATPA por sus siglas en inglés).
Clinton, en compañía de Pastrana, recibió a empresarios colombianos, quienes le pidieron adoptar un mecanismo de corto plazo para enfrentar los efectos negativos que ocasiona el tratado de preferencias arancelarias entre Estados Unidos y la Cuenca del Caribe.
Estados Unidos es el principal socio comercial de Colombia, con cerca de 3.180 millones de dólares que representan 40 por ciento del total de ventas externas colombianas.
El presidente de la Asociación Nacional de Exportadores, Javier Díaz, opinó que el Plan Colombia será más exitoso si se ofrecen mayores oportunidades al sector privado.
Según Clinton, las prferencias arancelarias son importantes para que Colombia pueda recibir inversiones, combatir el desempleo, que llega a cerca de 22 por ciento de la población económicamente activa, y atacar los problemas sociales.
Por su parte, la ministra colombiana de Comercio Exterior, Marta Lucía Ramírez, dijo que un tratamiento preferencial "sería un gran aporte a la paz de los colombianos y a la disminución de la violencia en el país".
No obstante, el analista Juan Tokatlián, columnista del diario El Tiempo, entiende que la alianza que sellaron este miércoles Clinton y Pastrana sigue marcada más por el tema de la guerra a las drogas.
Tokatlián señaló que esta alianza encierra "múltiples mensajes con un fondo común": en el caso de Colombia se mueven muchos intereses.
Para el analista, la visita de Clinton tiene un fin político y es "mostrar que es capaz de aplicar mano dura en la guerra a las drogas" y respaldar al candidato del Partido Demócrata en las próximas elecciones estadounidenses, el vicepresidente Al Gore.
Otros expertos consideran que la alianza entre los dos mandatarios fortalece en especial a Pastrana en el plano interno, pero lo limita ante otros sectores como la guerrilla con la que negocia la paz.
Los insurgentes ven en la presencia del mandatario estadounidense una intromisión en los asuntos internos colombianos.
Según las rebeldes Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia, el plan que apoya Clinton es "militarista, guerrerista y no beneficia en nada al pueblo colombiano".
Como resultados de las protestas contra la presencia de Clinton en Colombia, resultó muerto en Bogotá un agente de policía. (FIN/IPS/yf/dm/ip/00