La tecnología digital permitirá abaratar y democratizar la producción de películas en América Latina, dijo el director peruano Armando Robles Godoy mientras transcurre en Lima uno de los principales acontecimientos cinematográficas de la región.
«Para algunos países, como el nuestro, el cine es ancho y ajeno. Parafraseo el título de la novela del peruano Ciro Alegría para sintetizar que producir cine en Perú es una agonía, no en el significado de muerte próxima, sino en el sentido del vocablo griego que la origina: agon, que quiere decir lucha", comentó.
Con casi 80 años, Robles Godoy conserva el entusiasmo de los más jóvenes y considera que la constatación más importante del IV Encuentro Latinoamericano de Cine es el vertiginoso desarrollo de la tecnología digital, que abarata la filmación «y convertirá la cinematografía en un arte más accesible y democrático»
«El sistema digital ya ha logrado una calidad de imagen y sonido muy próxima a la de las cámaras de cine de mayor rango. Estoy seguro de que en pocos años las diferencias técnicas desaparecerán, y será mas barato convertir en realidad los sueños que obsesionan a los cineastas», afirmó.
«Hacer una película, aún con presupuestos ínfimos, no baja de dos millones de dólares. La tecnología digital podría bajar esa suma a 500.000 dólares, quizás 300.000», agregó.
El Encuentro «es una de las citas más importantes del cine de América Latina», pues se trata de «nueve días intensos de puro cine. En suma, una fiesta», opinó el crítico Ricardo Bedoya.
La cita, que comenzó el día 4 y concluirá este domingo, fue convocada por el Centro Cultural de la Universidad Católica de Lima, con el auspicio de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) y de algunas empresas privadas.
El Encuentro se desarrolla en dos niveles: uno público, con tres festivales cinematográficos simultáneos, y un seminario en el que participan cineastas de casi toda la región, España y Portugal, para pasar revista a la difícil y heterogénea situación del sector.
Robles Godoy recordó en el seminario que el gobierno peruano redujo 87 por ciento el fondo oficial destinado a financiar producciones cinematográficas mediante un concurso de proyectos y guiones.
«Esperamos que el gobierno se decida por fin a concretar el aporte de 100.000 dólares al que se ha comprometido a través de la Cancillería para que Perú forme parte de Ibermedia», expresa.
El programa Ibermedia incluye «un fondo financiero creado en 1997, constituido por aporte de 100.000 dólares anuales de los gobiernos de los países miembros», informó uno de sus directores, el argentino Gerardo Herrero.
«Esa suma le da derecho a los cineastas de los países miembros a un préstamo de 175.000 dólares para que comiencen a rodar su película. Si tiene éxito, el cineasta devuelve el préstamo, y si fracasa no paga nada», dijo Herrero.
Sesenta por ciento de los fondos de Ibermedia se destinan a la coproducción, 30 por ciento para ayudar en la distribución y 10 por ciento se invierte en becas de estudio y capacitación para cineastas latinoamericanos.
Junto con Herrero, asistieron al Encuentro en Lima otros dos directivos de Ibermedia: Jorge Sanchez, de México, y Elena Villardel, de España.
El eje del Encuentro es la competencia entre 17 películas procedentes de Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Cuba, Ecuador, México, Perú y Venezuela, que disputan un premio de apenas 10.000 dólares.
Entre las competidoras figuran «Todo el poder», del mexicano Fernando Sariñana, «Kalibbre 35», del colombiano Raúl García, «Tuve un sueño contigo», del chileno Gonzalo Justiniano, y «Ratas, ratones y rateros», del ecuatoriano Sebastián Cordeo.
También son exhibidas en esa sección «Lista de espera», del cubano Juan Carlos Tabío, y «Un paraíso bajo las estrellas», del también cubano Gerardo Chijona, y «Pantaleón y las visitadoras», del peruano Francisco Lombardi.
Al mismo tiempo, está en curso el Festival de Luis Buñuel, en ocasión del centenario del nacimiento del cineasta español. Entre otros de sus filmes se exhiben «Ensayo de un crimen», «Nazarín», «Viridiana», «El ángel exterminador», «Tristana» y «Ese oscuro objeto del deseo».
En el festival de documentales iberoamericanos considerados imprescindibles por los organizadores se destacan «Asaltar los cielos», de Javier Rioyo y José Lopez Linares, reportaje fílmico a Ramón Mercader, el asesino de León Trostky, y «Morir en Madrid», con textos de García Lorca sobre la guerra civil española.
También se exhibieron los documentales «Radio Belén», cortometraje de bajo presupuesto rodado en Iquitos, la principal ciudad de la selva peruana, y «María del desierto», sobre la científica alemana María Reich, estudiosa y protectora de las líneas de Nazca.
Entre las exhibiciones especiales figuran dos estrenos de l mexicano Arturo Ripstein, «El evangelio de las maravillas» y «Así es la vida» (rodada en vídeo digital), la también mexicana «Amores perros» y «Gato negro, gato blanco», del bosnio Emir Kusturica. (FIN/IPS/al/mj/cr/00
