La empresa alemana de indumentaria deportiva Adidas, uno de los principales patrocinantes del torneo de fútbol Eurocopa de Naciones que concluirá el 2 de julio, es acusada de tolerar explotación de trabajadores en las fábricas que elaboran sus artículos.
Representantes de la Campaña Ropa Limpia (CCC) en Bélgica y Holanda, los países anfitriones de la Eurocopa 2000, dijeron que Adidas viola las convenciones a las cuales está ligada la Unión Europea de Asociaciones de Fútbol (UEFA).
Los activistas acusan a Adidas de emplear obreros textiles bajo condiciones que violan las convenciones de la Organización Internacional del Trabajo (OIT).
La UEFA aceptó, según la CCC, incluir el código de conducta de la Federación Internacional de Asociaciones de Fútbol (FIFA) en materia de condiciones de trabajo justas en todos los contratos con patrocinantes para la Eurocopa 2000 que comenzó el sábado, incluida Adidas.
El código de la FIFA se basa en las convenciones básicas de la OIT. Prohíbe el empleo de niños menores de 15 años y los trabajos forzados y excesivos, y prescribe condiciones decentes, salarios suficientes para cubrir las necesidades básicas del obrero, libertad de asociación y contratos colectivos.
"Adidas, proveedor oficial de la Eurocopa 2000, no cumple con esas condiciones", afirmó Frieda De Koninck, de la CCC belga.
Junto con sus organizaciones hermanas en Alemania, Austria, Francia, Gran Bretaña, Suecia y Suiza, las CCC belga y holandesa aseguraron haber acumulado pruebas de constantes violaciones de derechos laborales por parte de firmas contratadas por Adidas para la confección de artículos deportivos.
"El código de conducta de la FIFA no forma parte del acuerdo que firmamos con la comisión de la Eurocopa 2000", dijo, no obstante, David Husselbee, director de Asuntos Sociales y Ambientales de Adidas.
"Estamos preocupados tanto como las CCC, si no más, acerca de justas condiciones laborales. Nosotros estamos vinculados con los deportes y queremos promover el 'juego limpio' no sólo dentro del campo", aseguró Husselbee a IPS.
"No existe una fábrica ideal, pero estamos examinando a nuestros subcontratistas y vamos a reaccionar cuando las cosas parezcan equivocadas. Tenemos nuestro propio equipo de observadores independientes para eso y recibimos los informes de las CCC. A veces esos informes son correctos y otras no", dijo.
El año pasado, las filiales belga y holandesa de la CCC lanzaron una campaña en los medios para señalar las malas condiciones de trabajo y términos de contrato a los cuales están sujetos los obreros textiles.
Políticos y famosos jugadores de los dos países anfitriones se pronunciaron a favor de mejores salarios y condiciones de trabajo en la industria de artículos deportivos. En diciembre de 1999, seis meses antes del puntapié inicial de la Eurocopa 2000, la CCC proclamó su victoria.
La UEFA aceptó entonces someter la producción de mercaderías en venta durante el torneo al código de conducta de la Federación de Industrias de Artículos Deportivos (FIAD).
Sin embargo, con el campeonato que acaba de comenzar bajo la intensa cobertura que los medios de comunicación, la CCC tiene dificultades para para hacer oír su mensaje.
En la fábrica Savina, en Bulgaria, país que no se clasíficó esta vez para el campeonato europeo pero produce artículos para Adidas, los obreros reciben menos de 50 dólares mensuales en términos reales, la mitad del promedio nacional, sin recibir pagos por jornadas extraordinarias.
Además, la gerencia manifiesta hostilidad hacia los intentos de sindicalización.
Por este caso, así como por otros, "vamos a seguir adelante con la campaña durante la Eurocopa 2000", afirmó Esther de Haan, de la CCC holandesa.
"Hay dos fábricas en Savina. La CCC visitó una de ellas e informó al respecto, pero Adidas elabora sus productos en la otra", dijo Husselbee.
El empleado de Adidas agregó que la firma reconoció el exiguo monto del salario mínimo en Bulgaria. Por lo tanto, "pedimos a nuestros subcontratistas que paguen muy por encima de ese nivel. También nos aseguramos que paguen el monto correcto por horas extra", agregó.
En las cuatro ciudades holandesas donde se jugarán los partidos de la Eurocopa 2000, la federación de sindicatos FNV distribuye unos 300.000 afiches para recordar a los amantes del fútbol el problema de los obreros explotados.
La CCC holandesa abrió una cuenta bancaria a fin de que los holandeses donen un euro (0,995 dólares) como incentivo para que las grandes compañías comiencen a asegurarse de que los obreros de sus subcontratistas reciben mejores salarios.
Algunos activistas aspiran a que las selecciones de Bélgica y Holanda no lleguen a los cuartos de final, para así llamar la atención sobre la campaña. "Sería mejor que perdiéramos pronto, pero no debería decir esto. Por supuesto, Holanda llegará a la final", dijo De Haan.
De Koninck, de la CCC belga, no cree que la selección de su país logre llegar a la final el 2 de julio, pero eso no le preocupa demasiado. "El gol verdadero son los derechos humanos", sentenció. (FIN/IPS/tra-eng/pd/bk/sm/ego/mj/hd lb cr/00