Las propuestas de cese del fuego que intercambiarán el gobierno colombiano y las rebeldes Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) el 3 de julio serán estudiadas "sin bulla" para no entorpecer el diálogo de paz, aseguró en Venezuela un alto representante del grupo guerrillero.
Raúl Reyes, representante de las FARC para las relaciones externas, y Luis Guillermo Giraldo, delegado gubernamental y ex embajador de Colombia en este país, estuvieron dos días en Caracas, en el marco de una gira internacional para informar sobre el proceso de paz.
Reyes, quien insistió en la existencia de una "decisión política" de asumir el reto de la paz, confirmó que la secretaría de ese grupo, el más importante de su país y alzado en armas desde hace 36 años, ya elaboró la propuesta de tregua que hará llegar al gobierno de Andrés Pastrana.
Al mismo tiempo, espera recibir un documento similar por parte de Bogotá, en el encuentro previsto para el 3 de julio.
Sin embargo, el jefe guerrillero adelantó que se trata de "un escabroso y complejo tema", en el marco de las negociaciones iniciadas a comienzos de 1999.
Precisó que las FARC espera que los documentos sean intercambiados "sin hacer bulla", con moderada difusión y sin generar grandes expecon el fin de "evitar que la mesa les repercusiones de una conversación sobre el cese del fuego.
Reyes recordó que en un principio se aceptó llevar adelante el diálogo "en medio de la guerra" y, por lo tanto, "no podemos ser irresponsables ahora ilusionando a nadie", al abordar este tema para ser estudiado "con mucho cuidado".
La presencia de delegados del gobierno colombiano y de las FARC había sido anunciada el fin de semana pasado por el presidente venezolano Hugo Chávez, cuyo gobierno manifestó en varias oportunidades su interés por cooperar en forma activa con el proceso de paz del vecino país.
Venezuela fue escenario el año pasado de una seguidilla de reuniones entre representantes de Pastrana y del Ejército de Liberación Nacional (ELN), la segunda fuerza guerrillera colombiana, que incluso mantenía uno de sus principales representantes instalado en Caracas.
Giraldo y Reyes llegaron a Caracas después que las dos partes realizaran reuniones con delegados europeos en España.
En particular, el comandante de las FARC se ha entrevistado las últimas semanas con representantes de Europa, Cuba y República Dominicana.
Reyes tiene previsto ahora seguir su viaje a México, siempre con la intención de explicar la marcha del diálogo de paz colombiano. "Las giras que hemos hecho contribuyen a mostrar que Colombia no es solamente narcotráfico y caos", aseguró.
Añadió que el objetivo de estas visitas no es el de avanzar en aspectos concretos de la negociación, sino mostrarles a interlocutores a nivel internacional "que estamos convencidos que el futuro de Colombia no puede ser la guerra".
Señaló, además, que los resultados de los contactos sostenidos hasta el momento "son muy satisfactorios".
Pero, si bien tanto Reyes como Giraldo coincidieron en destacar la voluntad de un diálogo para la paz, los dos aseguraron que el proceso es difícil, al hablar en rueda de prensa realizada en la cancillería venezolana en medio de inéditas medidas de seguridad.
"Se trata de un proceso con etapas naturales, no forzadas", dijo Giraldo, para advertir luego que la negociación "requiere tiempo", aunque destacó como avances indudables la voluntad de sentarse a la mesa y la definición de una agenda común.
Reyes coincidió en destacar las ventajas de tener esa agenda común con el gobierno, pero comentó que en este momento "estamos apenas en el primer tema".
El ministro de Relaciones Exteriores venezolano, José Vicente Rangel, dijo estar convencido de que hay una oportunidad para resolver el conflicto, tras sostener dos días de reuniones con los representantes colombianos. "La única respuesta a la guerra es la paz", afirmó.
La participación de "buenos oficios" de Venezuela en este proceso de diálogo fue asumida con pleno conocimiento de Bogotá, aseguró Rangel, quien además fue enfático al asegurar que este país "está apostando a la paz en Colombia".
Ambos países comparten una historia común y una frontera de más de 2.000 kilómetros, a través de la cual se permean los efectos del conflicto.
"El tema de la paz colombiana también es un asunto venezolano", señaló Rangel.
De esa manera confirmó un argumento esgrimido en diversas oportunidades por el gobierno de Chávez, que asumió el poder en febrero de 1999.
Rangel también confirmó que el embajador de Caracas en Bogotá, Fernando Gerbasi, asistirá a una reunión con asesores internacionales convocada para los días 29 y 30 en San Vicente del Caguán, principal localidad del área desmilitarizada en el sur colombiano para desarrollar estas negociaciones de paz. (FIN/IPS/lc/dm/ip/00