VENEZUELA: Violencia en tiempos de campaña electoral

El Consejo Nacional Electoral de Venezuela (CNE) convocó hoy a todos los partidos políticos a buscar un acuerdo que permita reducir la violencia de la campaña previa a las elecciones del día 28, las mayores de la historia del país.

"Esto debería ser una gran fiesta nacional", comentó el presidente del CNE, Estanislao González, que en varias oportunidades llamó a la ponderación en la contienda política por las elecciones generales.

Los 11,7 millones de venezolanos convocados a las urnas deberán elegir a más de 6.000 funcionarios entre unos 30.000 candidatos. Debido a sus dimensiones inéditas para esta democracia nacida en 1958, los comicios son conocidos popularmente como "megaelecciones".

En las urnas se decidirán los cargos de presidente, parlamentarios, gobernadores, legisladores regionales, alcaldes, concejales y miembros de las juntas parroquiales, con el fin de que cumplan con las normas aprobadas en la nueva Constitución, vigente desde el 30 de diciembre.

En la primera línea del artículo 1, esa Constitución proclama que el nombre de este país es el de República Bolivariana de Venezuela.

"El nacimiento de una república debe realizarse en plena paz", comentó Gonzalez este lunes, reunido con expertos en procesos electorales, relacionado con la realización de los comicios en Venezuela.

Un aviso publicado este lunes en la prensa por el CNE, árbitro de todos los comicios en Venezuela, propuso a los partidos pacificar el "clima electoral" con el fin de "lograr una imagen positiva tanto en lo nacional como en lo internacional" como resultado de las elecciones.

También pidió a las 22 organizaciones convocadas para una reunión este martes realizar una campaña "regida por el equilibrio y la ponderación".

González había planteado este fin de semana que algunos conatos de violencia eran considerados como "signos inquietantes" por el consejo.

La diversidad y la cantidad de cargos en disputa en estas elecciones ha reavivado enfrentamientos locales y regionales, pero los incidentes más fuertes se registraron entre seguidores de los dos candidatos a la Presidencia con mayores posibilidades.

El presidente Hugo Chávez, favorito en todas las encuestas, fue desafiado por su ex compañero del ejército y de golpe de Estado, Francisco Arias, quien aspira a capitalizar el descontento con la gestión presidencial.

El viernes, cuando Arias realizaba una caminata por una barriada popular de Caracas, su comitiva fue agredida por partidarios de Chávez que lanzaron piedras, agua y botellas, provocando tensión entre los dos bandos.

Arias aseguró tras el incidente que no se dejaría intimidar y que seguiría en campaña, mientras responsabilizaba a Chávez de su integridad física. "Yo no voy a temer", aseguró el candidato, quien rechazó los intentos de "amedrentamiento".

Por su parte, Chávez, quien en tiempo de elecciones suele apelar a un estilo de enfrentamiento, pidió a sus partidarios que no agredieran más a su retador, pues "la indiferencia duele más que una pedrada".

"Lo que da es lástima", dijo el mandatario, quien, según analistas políticos locales, conserva una alta popularidad entre los más desposeídos.

El aspirante a la reelección suele calificar los procesos electorales de "batallas" e invitar a echarle "plomo grueso" a los adversarios.

Chávez llegó a la Presidencia en febrero de 1999, e impulsó la aprobación de la nueva Constitución como elemento clave de un proceso de cambios políticos al que denomina "revolución pacífica y democrática" con el cual aspira a "refundar" la democracia.

"Los partidos políticos tienen que tener en cuenta de que esta es una disputa de carácter civilizado", advirtió el CNE, que realizó sus llamados a la ponderación en medio de una crisis de credibilidad en torno de su imparcialidad frente al proceso.

Fuerzas de oposición dudan de la transparencia del CNE debido a que sus integrantes fueron nombrados por una comisión legislativa dominada por partidarios de Chávez y que reemplaza al parlamento durante la transición constitucional.

El CNE ha convocado un comité de auditoría integrado por organizaciones de la sociedad civil para que supervisen el proceso electoral, y además invitó a numerosas organizaciones y personalidades internacionales para participar como observadores de los comicios. (FIN/IPS/lc/mj/ip/00

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