Las últimas elecciones generales de Malasia fueron hace más de seis meses y para las próximas faltan años, pero el partido de gobierno y el principal partido opositor se esfuerzan por conquistar o consolidar el apoyo de los musulmanes como si estuvieran en medio de una campaña electoral.
La Organización Nacional de Malayos Unidos (UMNO), el partido dominante en la coalición de gobierno, y el opositor Partido Islámico (PAS), se disputan el apoyo de los malayos musulmanes, que constituyen más de la mitad del electorado.
La comunidad malaya ha sido tradicionalmente la base electoral de UMNO, pero en los comicios del pasado noviembre el partido de gobierno sufrió graves pérdidas en ese electorado.
El PAS del que se dice que pretende establecer un estado islámico- fue el mayor beneficiario de la mala fortuna política de UMNO.
Ahora, los analistas señalan una convergencia de posiciones entre ambos partidos, que reforzaron sus respectivas campañas para ganar puntos entre los malayos musulmanes.
ôPAS y UMNO se están aferrando al Islam como forma de movilizar apoyo políticoö, afirmó Johan Saravanamuttu, profesor de ciencia política. ôAmbos están a la pesca de votos musulmanesö.
Sin embargo, existe una tenue diferencia de enfoque. ôPAS quiere mantener los votos de los musulmanes, pero también intenta conquistar el apoyo de los no musulmanesö, observó Johan.
Siempre identificado como un partido islámico conservador, PAS era rechazado por los no musulmanes, pero ahora cayó en la cuenta de que, sin el apoyo de éstos, su objetivo de llegar al gobierno federal nunca se har á realidad, comentó Johan.
Pero UMNO no parece preocuparse por los no musulmanes. Su desafío consiste en seguir siendo atractivo para los malayos jóvenes seducidos por los ideales islámicos, representados por el expulsado viceprimer ministro Anwar Ibrahim.
Es por esta razón que los analistas dieron gran importancia a la oraci ón pública de 2.000 delegados de UMNO guiada por el primer ministro Mahathir Mohamad al final de su discurso inaugural de la asamblea general del partido, el día 11.
Mahathir pidió a Alá que protegiera a UMNO de sus enemigos, bendijera la lucha del partido y le diera la victoria en este mundo y más allá.
En lugar de elogiar la devoción del primer ministro, los analistas describieron la acción de Mahathir como una señal de que UMNO trata de ôparecer más islámicoö.
Mahathir ôparece volcarse a la religión para mejorar la suerte de UMN O. Se ha dado cuenta de que el Islam es todavía una fuerza primordial dentro de la sociedad malayaö, observó Johan.
Además, Mahathir probablemente sabe que eso ôfue un factor importante en la pérdida de votos malayos por la UMNOö en las elecciones generales de noviembre, añadió.
El problema con UMNO es que ôno ha tenido una ideología definidaö, y en cambio proclamó su misión de defender la raza, la religión y la naci ón de los malayos, señaló la analista política Maznah Mohamad.
ôLa transparencia, el buen gobierno y la democracia nunca han sido las preocupaciones primarias de UMNOö, añadió.
La necesidad de una nueva estrategia se volvió urgente para UMNO en vista de los movimientos de PAS para ganar más terreno político.
El líder espiritual de PAS, Nik Aziz Nik Mat, se dirigió este mes a u nos 400 cristianos en la capital y dijo que las leyes civiles existentes que sean paralelas a las leyes islámicas serían mantenidas en una sociedad islámica, aunque deberían realizarse enmiendas en caso de contradicciones.
Nik Aziz, quien también es ministro jefe del estado costero oriental de Kelantan, dijo a su audiencia que el PAS organizará más ôsesiones de diálogoö para aclarar malentendidos y disipar la imagen del Islam como u na religión extremista.
Cuando Nik Aziz insistió en que el objetivo del PAS no es crear un ôestado islámicoö sino una ôcomunidad islámicaö, la sorpresa en la audiencia fue evidente, comentó el analista político M.G. Pillai.
Pero más que nada, destacó, ôpor primera vez desde la independencia en 1957, un partido islámico se presentó ante una audiencia no musulmana pa ra explicar su visiónö.
En contraste, ôUMNO no ha querido explicar sus políticas islámicas ante ninguna audiencia, incluida la de PAS, y rechaza todo intento de realizar reuniones ecuménicas del Islam y otras religionesö, señaló Pillai.
Sin embargo, UMNO tiene sus propias credenciales musulmanas. Durante años promovió una política de ôislamizaciónö, aunque discretamente, e introdujo, por ejemplo, un sistema bancario islámico paralelo al tradicional.
Así mismo, UMNO estableció una Universidad Islámica Internacional y promueve la educación religiosa.
Pero los analistas creen que se trata de un problema de credibilidad. ôMuchos de los malayos no creen que UMNO posea el manto del Islamö, afir mó Johan. (FIN/IPS/tra-en/ann/ccb/mlm/ip-cr/00)