La Organización de las Naciones Unidas (ONU), que arbitra en varias guerras fronterizas y civiles de Africa, Asia y Europa, se ofreció para actuar como un "mediador honesto" en la disputa por la reforma agraria de Zimbabwe.
Mark Malloch Brown, director ejecutivo del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), destacó que la ONU goza de la confianza de todas las partes porque no tiene intereses propios.
El conflicto por la tierra en Zimbabwe, que tiene connotaciones étnicas, enfrenta al gobierno del presidente Robert Mugabe con una poderosa comunidad de agricultores blancos, descendientes de los antiguos colonos británicos.
Alrededor de 4.460 agricultores comerciales en gran escala, en su mayoría blancos, poseen 11,2 millones de hectáreas de las tierras más fértiles del país africano, mientras más de seis millones de granjeros negros ocupan 16,4 millones de hectáreas de tierras poco productivas.
Malloch Brown, quien fue designado por el secretario general Kofi Annan como una suerte de mediador en la controversia, destacó que su organización está genuinamente comprometida a ayudar al proceso de reforma agraria en Zimbabwe.
Ya en 1998, una conferencia sobre la cuestión estuvo presidida conjuntamente por el gobierno de Zimbabwe y el PNUD.
El proceso de reforma agraria incorporó principios tanto de distribución de la tierra como de compensaciones, y también un marco legal que gozó de amplio apoyo de Zimbabwe y de donantes occidentales. "Sin embargo, los hechos hicieron fracasar los esfuerzos", lamentó Malloch Brown.
Según el PNUD, la "desigual propiedad de la tierra" es desde hace mucho tiempo una fuente de tensión política y económica en el país africano.
El acuerdo de 1998 contempló la transferencia de cinco millones de hectáreas de tierra en cinco años para ayudar a la reinstalación de 150.000 familias.
Pero el objetivo clave de cualquier programa de reformas y recolonización, según el PNUD, debe alentar sistemas equitativos de propiedad incorporando no solamente la agricultura en gran escala sino también a los cultivadores pequeños, para ayudar a aliviar la pobreza.
Sin embargo, en el clima actual, se ha hecho difícil restablecer el marco de semejante proceso. Malloch Brown dijo que los donantes occidentales están deseosos de respaldar el acuerdo.
"Pero no habrá cheques en blanco", previno. "El dinero vendrá cuando haya un acuerdo que los donantes puedan apoyar", agregó.
Basado en esa seguridad, el PNUD planea iniciar negociaciones entre las partes en litigio. La atracción de recursos para un programa adecuadamente financiado depende de los cambios dentro de un contexto político más amplio, lo cual está por encima de la competencia del PNUD, observó su director ejecutivo.
"La reanudación del proceso debería persuadir a los zimbabwenses que tuvieron por delante una reforma agraria creíble y plausible", dijo. Eso debería aliviar la tensión en el campo político y allanar el camino para que los donantes aporten recursos financieros.
Desde que los donantes occidentales pusieron fuerte énfasis en el "buen gobierno" como condición para la asistencia al desarrollo, toda financiación dependerá de que se lleven a cabo elecciones "libres y justas" en Zimbabwe.
Malloch Brown dijo que el anuncio de la iniciativa de la ONU, junto con los esfuerzos del gobierno para reducir la tensión y la violencia, podrían traer alguna estabilidad al país. La violencia sobre la reforma agraria fue causada al principio debido a la frustración ante la falta de progreso en los resultados.
Interrogado sobre si el gobierno se comprometió con el programa, dijo que si la propuesta no estaba basada sobre un transparente proceso legal que fuera aceptable a todas las partes, los donantes se negarían a proveer recursos.
"Por lo tanto, cada uno deberá hacer un esfuerzo respecto al otro para poder trabajar mancomunadamente", expresó.
Añadió que el papel del PNUD, como organización de desarrollo, implicaría trabajar con el gobierno de Zimbabwe y la comunidad internacional, especialmente los donantes, y aquellos comprometidos sobre el terreno para poner en marcha un plan de acción aceptable. (FIN/IPS/tra-en/td/da/ego/mlm/dv-ip/00