La Organización de las Naciones Unidas (ONU) designará un relator especial para la protección de los defensores de derechos humanos en el mundo.
La Comisión de Derechos Humanos de la ONU, que cuenta con 55 miembros y tiene sede en Ginebra, pidió al secretario general Kofi Annan el nombramiento de un relator especial por un período inicial de tres años, para informar sobre los problemas que enfrentan los defensores de derechos humanos.
La Comisión expresó "profunda preocupación" ante la evidencia de que "personas y organizaciones comprometidas en promover y defender derechos humanos y libertades fundamentales" son amenazadas y acosadas, son detenidas arbitrariamente e incluso han sido ejecutadas.
La organización Human Rights Watch (HRW), de Nueva York, apoyó la decisión y dijo que muchos activistas humanitarios han sido asesinados o encarcelados e intimidados en países como Colombia, Cuba, Egipto y Pakistán.
"En diversos países ni siquiera se permite un monitoreo independiente de derechos humanos", señaló Joanna Weschler, representante de HRW en la ONU. "Es alentador que la ONU actúe finalmente para proteger a aquellos que arriesgan su vida por los derechos de los demás", expresó.
El relator especial no solamente intervendrá en casos de intimidación de activistas, sino que tambien presionará por la vigencia de la Declaración sobre Defensores de Derechos Humanos, adoptada por la Asamblea General de la ONU en diciembre de 1998.
La resolución reconoce específicamente el papel de individuos y organizaciones no gubernamentales (ONG) y otros grupos desempeñan en la promoción y protección de derechos humanos y libertades fundamentales.
La Comisión de Ginebra pidió a los 188 estados miembro de la ONU su cooperación y respaldo para el futuro relator especial en el desempeño de su misión, y proporcionarle toda la información necesaria.
A su vez, el relator tendrá el cometido de buscar, recibir y examinar informes y responder a sobre la situación de los derechos del país que sea o de individuos, actuando por su cuenta o en coordinación con otros para promover y proteger los derechos humanos.
La Comisión para la Protección de los Periodistas (CPJ), de Nueva York, destacó que numerosos periodistas de todo el mundo son asesinados cada año por defender los derechos humanos o por revelar atrocidades y abusos contra personas.
Este miércoles, 3 de mayo, se celebra el Día Internacional de la Libertad de Prensa, una iniciativa de la Unesco (Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura).
En 1999, periodistas asistieron en Sierra Leona a atrocidades de los rebeldes contra civiles en las calles de Freetown. En los Balcanes, vieron a albaneses étnicos escapar ante las amenazas de muerte de la policía serbia y de los paramilitares, y en Indonesia, registraron la violencia de las milicias contra los partidarios de la independencia de Timor Oriental.
"Algunos que escribieron lo que vieron terminaron por morir por los hechos que revelaron", apuntó la CPJ en su informe anual de 1999.
Diez de los 34 periodistas asesinados en 1999 hallaron la muerte en Sierra Leona, la mayoría a manos del insurgente Frente Unido Revolucionario (RUF). Las víctimas habían sido 24 en total en 1998.
"¿Porqué el RUF tomó de blanco a los periodistas?", se preguntó la CPJ. "Debido a la prensa informó al mundo asesinatos en masa y actos de corrupción" en los que esa organización habría estado involucrada.
En un informe especial sobre Pakistán, la CPJ dijo que el gobierno anterior usó las leyes impositivas, las normas de importación y otras trabas burocráticas contra el Grupo Jang de diarios, dando ejemplo de cómo los gobernantes apelan a leyes que parecen ajenas a la censura para reprimir.
Mientras, la ONU tambien expresó preocupación por los problemas que enfrentan sus propior relatores especiales al investigar violaciones de derechos humanos.
El año pasado, la Corte Internacional de Justicia confirmó los privilegios diplomáticos y la inmunidad de un funcionario de la ONU que había sido demandado en su país natal por declaraciones públicas formuladas en cumplimiento de su misión.
Los 15 miembros de la Corte Intenacional afirmaron que Param Cumasrawamy, un abogado malasio que se desempeñaba como relator especial de la Comisión de Derechos Humanos de la ONU, tenía inmunidad penal por las palabras pronunció en noviembre de 1995 en una entrevista con una revista británica.
La Corte dictaminó por 14 votos contra uno que la Convención sobre Privilegios e Inmunidades la ONU de 1946 era "aplicable" en el caso de Cumasrawamy.
El diplomático fue encargado por la ONU de investigar la independencia de los jueces y abogados en todo el mundo, y en el desempeño de ese misión reveló las presiones de ciertas compañías para influir en un caso judicial en Malasia
La Corte tambien dictaminó por 13 votos contra dos que el gobierno malasio tiene "la obligación de comunicar esa opinión ( de la misma Corte) a los tribunales del país, de modo que las obligaciones internacionales tengan efecto y sea respetada la inmunidad de Cumaraswamy".
En 1998, Radika Coomarawamy, relatora especial de la ONU sobre Violencia Contra las Mujeres, no obtuvo autorización del estado de Michigan, en Estados Unidos, para visitar prisiones en las que se había denunciado abusos sexuales contra las reclusas.
El gobernador del estado, John Engler, impidió la visita de Coomarawamy y se rehusó cooperar con ella. (FIN/IPS/tra- eng/td/da/ego/ff/hd/00