COMERCIO-AMERICA CENTRAL: Se abre el gran mercado de EEUU

Estados Unidos dibujó con hilo y aguja una sonrisa en el rostro de los empresarios de América Central y el Caribe, al aprobar en primera instancia el aumento de las preferencias comerciales concedidas a las dos áreas.

Los fabricantes de tejidos y vestidos de los países centroamericanos y caribeños esperan una inversión de 1.000 millones de dólares en los próximos cuatro años gracias a la ampliación de la llamada Iniciativa de la Cuenca del Caribe.

Si bien el proyecto de ley votado el jueves por la Cámara de Representantes de Estados Unidos aún debe ser confirmado por el Senado y promulgado por el presidente Bill Clinton, el ambiente en la industria textil de América Central es de triunfo.

Los centroamericanos y caribeños podrán exportar con arancel cero tejidos y ropa a Estados Unidos siempre y cuando sean elaborados con hilo o telas de producción estadounidense, una vez que la ley entre en vigor.

"Estamos muy contentos, porque esta medida permitirá un gran crecimiento en la región", indicó a IPS Jesús Canahuati, presidente de la Asociación Hondureña de Maquiladoras.

Las inversiones extranjeras se incrementarán en América Central y el Caribe, que en 1999 exportaron tejidos y ropa por valor de 8.917 millones de dólares.

Pero sin duda, los mayores beneficiados serán los principales productores textiles del área: República Dominicana, Honduras y El Salvador.

Esta ampliación de beneficios generará sólo en Honduras entre 25.000 y 30.000 nuevos empleos por año, calculó Canahuati.

Los empresarios centroamericanos y caribeños celebran una lucha ganada. En 1994 comenzaron a presionar por mejores condiciones de ingreso de su producción en Estados Unidos, amenazados por la competencia de México, que ese año ingresó en el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN).

Las exportaciones de México a Estados Unidos se multiplicaron desde entonces.

"Por fin estamos equiparados con México y ahora sí podremos competir", destacó Canahuati.

El proyecto de ley de Comercio y Desarrollo 2000, como se denomina el texto aprobado por la Cámara de Representantes de Estados Unidos, es la iniciativa de libre comercio más importante entre las que el Congreso avaló desde la Ronda Uruguay, de 1994.

Esta nueva ley extiende la vigencia de la Iniciativa de la Cuenca del Caribe hasta 2008 y otorga los beneficios arancelarios a todas las prendas de vestir de América Central y el Caribe elaboradas con telas estadounidenses.

Además, aplica los privilegios a aquellas prendas confeccionadas con hilo de Estados Unidos hasta un máximo de 250 millones de metros cuadrados, con un crecimiento de 16 por ciento en los primeros tres años.

"Esto es un triunfo para toda la región y va a representar un impacto social muy grande", declaró a IPS Miguel Shyfter, presidente del Consejo de Cuotas Textiles de Costa Rica.

El nuevo panorama industrial robustece a América Central y al Caribe y hace prever un fuerte crecimiento del sector de la maquila y de la industria textil.

La denominación de maquila engloba a empresas que producen para la exportación con el empleo de insumos importados con arancel cero.

Shyfter observó que, si bien las maquilas son criticadas por las desfavorables condiciones en que se desempeñan sus trabajadores, ningún otro sector de actividad podría ofrecer la masiva cantidad de empleos que se abrirán al entrar en vigor la ley estadounidense, especialmente para las mujeres.

Los nuevos beneficios arancelarios son vistos como un incentivo para la inversión regional y la caída de aranceles aduaneros significará un ahorro de millones de dólares para las empresas.

Sólo en Costa Rica, las empresas textiles exportadoras ahorrarán anualmente alrededor de 50 millones de dólares.

La industria textil emplea en Costa Rica a 36.000 personas en forma directa y contribuye con 21 por ciento de las exportaciones totales a Estados Unidos. Es decir, con poco más de 800 millones de dólares por año.

Severino Mata, portavos de Agexpront, la asociación de exportadores de productos no tradicionales de Guatemala, explicó que el proyecto de ley estadounidense también permite cualquier transformación de las telas y eto favorecerá a los fabricantes de vstidos.

En El Salvador, se calcula que las exportaciones de la industria de la maquila superarán en los próximos tres años el valor de las remesas familiares recibidas desde Estados Unidos.

Las remesas enviadas a su país por salvadoreños residentes en Estados Unidos suman anualmente 1.300 millones de dólares y son la principal fuente d divisas de El Salvador.

El Senado votará probablmente la próxima semana el proyecto de ley, cuyo texto final fue preparado por miembos de las dos cámaras del Congreso. Luego debe ser promulgado por Clinton, cuyos colaboradores recibieron con beneplácito la votación del jueves en la Cámara de Representantes.

Empresarios centroamericanos indicaron a IPS que la ley entrará probablemente en vigor el 1 de octubre. (FIN/IPS/nms/ff/if/00

Archivado en:

Compartir

Facebook
Twitter
LinkedIn

Este informe incluye imágenes de calidad que pueden ser bajadas e impresas. Copyright IPS, estas imágenes sólo pueden ser impresas junto con este informe