Más de 3,5 millones de refugiados palestinos en Medio Oriente esperan la solución de sus problemas 50 años después de la creación de la Agencia de Asistencia y Trabajo para Refugiados Palestinos de las Naciones Unidas (UNRWA).
Las hostilidades entre árabes e israelíes de 1947-1948 causaron el desplazamiento forzoso de palestinos a quienes se proporcionó viviendas de emergencia, en terrenos cedidos por países de la región como Egipto, Jordania, Líbano y Siria. Medio siglo después, los refugiados siguen allí.
Una segunda oleada de refugiados, desplazados por la guerra de 1967, han permanecido en campos de emergencia en Jordania y Siria durante más de 30 años.
La UNRWA fue creada el 1 de mayo de 1950 para contribuir al bienestar de los refugiados, señaló Peter Hansen, actual comisario general de la agencia.
La agencia atiende necesidades básicas de los refugiados en Cisjordania, Gaza, Jordania, Líbano y Siria mediante la labor de 22.000 funcionarios, 99 por ciento de los cuales son desplazados palestinos, y promueve el desarrollo comunitario y la autosuficiencia.
El cincuentenario de la UNRWA es celebrado con diversas actividades, entre las cuales se destaca una exposición de fotografías en el salón para visitantes de la sede de la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), en Nueva York.
La muestra también puede verse en las oficinas de la agencia en Gaza, Jordania, Líbano y Siria.
La exposición incluye imágenes históricas y contemporáneas que muestran las difíciles condiciones de vida enfrentadas a diario por los refugiados palestinos en Medio Oriente, y las tareas realizadas por la UNRWA para aliviarlos.
"Los refugiados palestinos han sido una causa especial para las Naciones Unidas", declaró el secretario general de la ONU, Kofi Annan, al inaugurar la exhibición.
Annan recordó su visita de hace dos años a los campos de refugiados en Líbano, Jordania y Gaza, y dijo que vio "lo difícil que es allí la vida cotidiana, y cuán profundo es el deseo de los palestinos de que se ponga fin a sus largos años de padecimientos".
La cuestión de los refugiados figura en la agenda de conversaciones "finales" en curso entre el gobierno israelí y la Autoridad Nacional Palestina, y Annan expresó su esperanza de que se logre una solución "lo antes posible".
La UNRWA dispone de un presupuesto de 300 millones de dólares anuales, e intenta que los desplazados palestinos tengan acceso a escuelas adecuadas, servicios sanitarios y oportunidades de generar ingresos. La agencia se financia por completo con donaciones voluntarias en dinero o especies.
Entre los principales donantes se encuentran la Unión Europea, Suecia, Japón, Gran Bretaña, Dinamarca, Canadá, Holanda, Estados Unidos, el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) y la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura.
Anna nsubrayó al inaugurar la exposición de fotografías que la UNRWA ha sufrido restricciones económicas constantes, pero eso no ha impedido que la agencia lleve a cabo su labor con razonable éxito.
En materia de educación, las escuelas de la UNRWA han logrado en forma sistemática menores porcentajes de repetición y deserción que las de los países anfitriones y las niñas son 49,9 por ciento de su población escolar, en una región donde la educación de la mujer no es una prioridad.
Esos resultados han determinado un aumento de la inscripción en escuelas de la UNRWA de niños y niñas de familias originarias de los países que albergan a refugiados palestinos.
El programa de salud de UNRWA fue destacado hace poco por la Organización Mundial de la Salud y el Banco Mundial como el más exitoso y eficiente en el uso de recursos económicos dentro del mundo en desarrollo.
La mortalidad materna e infantil entre los refugiados ha descendido, y los índices de inmunización y otros indicadores sanitarios son más altos entre los desplazados que en muchos países de Medio Oriente.
Una fórmula especial de rehidratación por vía oral con sal Najjar desarrollada por la UNRWA fue adoptada por el UNICEF para su uso mundial.
En la actualidad, la agencia apoya 70 centros femeninos, 33 centros comunitarios de rehabilitación y 27 centros juveniles. En la última década desarrolló más de 1.600 proyectos de alivio de la pobreza, destinados en especial a mujeres refugiadas, y brindó medios de sustento a familias indigentes.
William Lee, funcionario de enlace de la UNRWA en Nueva York, indicó que la agencia invirtió 35 millones de dólares durante los últimos diez años en proyectos para generar ingresos y otorgar microcréditos y otros préstamos.
El funcionario subrayó que las restricciones presupuestarias de la agencia exigen que los programas de microcrédito sean autosustentados.
Lee señaló que se ha proporcionando capital a un tercio de las empresas de Gaza, donde más de 30 por ciento de la población vive en estado de pobreza, y que eso significó que 14.000 amas de casa fueran provistas de un estipendio para afrontar las necesidades básicas de sus familias.
La agencia planea mejorar su programa de microcréditos mediante un plan piloto de crédito para el consumo que ayude a familias pobres cuando necesitan ingresos extraordinarios, en ocasión del inicio del año escolar, nacimientos, bodas y otros acontecimientos.
La UNRWA también se propone extender su red de filiales para microcréditos en Gaza y Cisjordania, y mejorar su proyecto de Sistemas Informáticos de Administración.
Los refugiados ven a la agencia como "un símbolo del compromiso internacional con su causa y un testimonio de que el mundo no los olvida, mientras está pendiente una solución justa y durable de la cuestión palestina", enfatizó Lee. (FIN/IPS/tra-eng/ib/da/ego/mp/hd ip/00)