CUMBRE SUR: Cuba alerta al Norte sobre peligros de la pobreza

Cuba advirtió hoy a los países ricos que sólo un diálogo con las naciones del Sur en desarrollo podrá "salvarlos" de los efectos de la globalización en un mundo "cada vez más inestable e inseguro".

"El tiempo se acaba. La paciencia de nuestros pueblos se agota. Han sufrido decenios de promesas incumplidas y viven hoy una situación económica y social cada vez más grave e insostenible", afirmó el canciller cubano Felipe Pérez Roque en el segundo día de la Cumbre Sur del Grupo de los 77 (G-77).

Si no se resuelve la pobreza creciente y el hambre, "¿qué harán los cientos de millones de excluidos de nuestros países, sino intentar emigrar hacia los países ricos en busca del sueno que cada día les promete la televisión?", preguntó Pérez Roque.

"¿Acaso los países desarrollados podrían vivir tranquilos si no se resuelve la pobreza creciente y el hambre en los países subdesarrollados?", agregó.

Fiel a la tradición impuesta por el presidente cubano Fidel Castro cada vez que interviene en foros internacionales, Pérez Roque pronunció el discurso más radical que se ha escuchado hasta ahora en la reunión del G-77, portavoz de los países más pobres en la Organización de las Naciones Unidas (ONU).

El canciller cubano habló en la apertura de la reunión de ministros de Relaciones Exteriores del G-77 que comenzó este martes.

La reunión de expertos, que se había iniciado el lunes, aún no había logrado un consenso sobre los documentos que deberán aprobar los cancilleres para presentarlos a los jefes de Estado y de gobierno.

Fundado en octubre de 1967, el G-77 debe su nombre a la alianza de los 77 países en desarrollo que asistieron a la primera reunión de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo, efectuada en 1964 en Ginebra. En la actualidad agrupa a 133 naciones.

Más de 40 jefes de Estado y de gobierno de los países miembros del Grupo de los 77 y una veintena de altos funcionarios, entre ellos el secretario general de la ONU, Kofi Annam, se reunirán en La Habana del miércoles al viernes.

Hasta el lunes, 122 delegaciones estaban acreditadas ante los organizadores de la cumbre. Más de 60 países estarán representados por jefes de Estado o de gobierno, o por vicepresidentes o viceprimeros ministros, y 40 por vicecancilleres.

Como invitados participan delegados de 34 países ajenos al G-77 y de 35 organismos internacionales.

De los 32 países latinoamericanos y del Caribe miembros del G- 77, hasta este martes habían confirmado su asistencia a la Cumbre los presidentes Bharrat Jagdeo, de Guyana, René Preval, de Haití, y Hugo Chávez, de Venezuela. Está prevista también la participación de México en calidad de invitado.

Entre los altos funcionarios que ya se encuentran en Cuba para participar en la cumbre figuran el presidente Yasser Arafat, de la Autoridad Nacional Palestina, y Robert Mugabe, de Zimbabwe.

Nnca antes había sido "tan necesario y urgente" que el G-77, que celebra su primera cumbre, "adoptara una estrategia común para defender nuestros intereses", afirmó Pérez Roque.

"Este es el momento para forjar una posición común de nuestros 133 países", consideró el canciler cubano.

Pérez Roque basó su apreciación en "el naufragio de la Conferencia (ministerial) de la Organización Mundial de Comercio (OMC), en Seattle", Estados Unidos, en diciembre pasado, y a la próxima celebración, en septiembre, de la "Cumbre del Milenio" al inicio de la próxima sesión de la Asamblea General de la ONU.

"La globalización de la economía mundial no puede seguir significando subdesarrollo, pobreza y exclusión para las mayorías y derroche lujoso e innecesario para una minoría privilegiada", afirmó el canciller cubano.

"El sistema económico y financiero internacional es injusto e insostenible", la OMC debe encarar un profundo y amplio debate y la Ayuda Oficial para el Desarrollo sólo puede llegar de los países del Norte industrial, pues "son los que tienen el dinero", añadió.

Cuba exigió "comercio justo" en lugar de "libre comercio a ultranza", respeto a la diversidad y apoyo a los más vulnerables, "solución a nuestro endeudamiento externo y no simple remedio insuficiente", acceso a los mercados del Norte y precios justos para los productos del Sur.

"Debemos reclamar en esta Cumbre la adopción de políticas que favorezcan realmente la transferencia de modernas tecnologías hacia nuestros países, así como los necesarios recursos para formar y calificar adecuadamente a nuestros trabajadores, única vía posible para que permanezcan en nuestros países", advirtió Pérez Roque. (FIN/IPS/da/mj/ip/00

Archivado en:

Compartir

Facebook
Twitter
LinkedIn

Este informe incluye imágenes de calidad que pueden ser bajadas e impresas. Copyright IPS, estas imágenes sólo pueden ser impresas junto con este informe