Indígenas de todo Brasil se reúnen a partir de hoy en el litoral del estado de Bahía, donde desembarcaron los conquistadores portugueses, en una conferencia de protesta contra la conmemoración oficial de los 500 años del "descubrimiento" del país.
Unos 1.500 representantes de 170 pueblos indígenas procedentes de distintas regiones, en especial de la Amazonia, llegaron hasta Santa Cruz de Cabralia, ubicada en las proximidades del lugar de desembarco de los portugueses, para discutir con sus colegas locales los problemas comunes.
Pero hechos ocurridos en las últimas semanas ampliaron el carácter opositor del encuentro, que culminará este viernes en una gran manifestación con participación de movimientos negros y de campesinos sin tierra.
El 4 de este mes 200 policías militares de Bahía invadieron un área indígena de Cabralia y destruyeron el monumento que el pueblo local, Pataxó, construía en memoria de los habitantes autóctonos masacrados durante los 500 años de "invasión" blanca del territorio brasileño.
El "Monumento a la Resistencia" consistía en un mapa de América Latina dibujado en las rocas, conteniendo artesanías para representar la ocupación anterior a la llegada de los portugueses. La violencia policial provocó indignación nacional y hasta ahora ninguna autoridad superior asumió haberla ordenado.
El ministro de Deportes y Turismo, Rafael Greca, coordinador de las fiestas de los "500 años", es señalado como principal responsable por haber pedido al gobierno estadual de Bahía "medidas preventivas" para asegurar "que la intolerancia de unos pocos no impida a la nación celebrar la brasilidad".
El principal acto de las conmemoraciones oficiales, con la presencia de los presidentes Fernando Henrique Cardoso, de Brasil, y Jorge Sampaio, de Portugal, tendrá lugar el mismo viernes en Porto Seguro, a escasos 15 kilómetros de la conferencia indígena llamada "Otros 500".
En la protesta del viernes se espera juntar 100.000 personas, entre indígenas, negros, militantes del Movimiento de los Sin Tierra (MST) y otros "excluidos", señaló José Adalberto Silva, uno de los organizadores de la conferencia y procedente del extremo norte del país, en la frontera con Venezuela.
La tensión local, permanente debido a la lucha de los Pataxó por recuperar sus tierras ocupadas hace décadas por hacendados, se intensificó desde fines del año pasado.
La decisión de los indígenas de expulsar a los "invasores" generó conflictos y represión, que dejaron como saldo dos policías muertos y un líder Pataxó estuvo preso dos semanas.
A eso se agrega la acción del MST, una organización campesina con gran capacidad de movilización en todo el país y que protagoniza en estos días actos de protesta en varias capitales del país y en la región cercana a Porto Seguro y Cabralia.
La coincidencia de fechas conspira contra la intención gubernamental de hacer de los 500 años una fiesta patriótica.
El "descubrimiento" de Brasil ocurrió el 22 de abril de 1500. El 17 de abril cumplió cuatro años la "masacre de Eldorado de Carajás", que provocó conmoción nacional e internacional con el asesinato de 19 campesinos por parte de la policía, hecho difundido en vivo por la televisión.
El MST desató el lunes una ofensiva nacional para recordar la matanza, cuyos autores están impunes hasta hoy.
Un primer juicio absolvió a los tres oficiales que comandaron la acción, pero fue anulado, y luego más de una docena de jueces se negaron a presidir nuevos juicios a los 155 policías involucrados.
Es que el estado de Pará, donde queda Eldorado de Carajás, es conocido por la violencia rural, con numerosos asesinatos de sindicalistas, líderes campesinos y abogados, a causa de conflictos por la tierra. La impunidad de los matadores es total.
La protesta del MST y partidos de izquierda en Belém, capital de Pará, se convirtió el lunes en una batalla callejera, después que un grupo de manifestantes tiraron piedras contra la sede central de la policía y damnificaron por lo menos a 10 vehículos.
La represión policial fue violenta, resultando por lo menos 15 personas heridas y tres detenidas.
Más de 60 ocupaciones de predios rurales fueron ejecutadas el lunes y se estima unas 500 en la actual ofensiva, según lo anunciado por dirigentes del movimiento de campesinos.
El ministro de Desarrollo Agrario, Raul Jungmann, aseguró que tales acciones fueron mucho menos y condenó la violencia, "innecesaria" porque la reforma agraria avanza en el país.
Cerca de 400 campesinos invadieron el lunes por la noche en Salvador, capital de Bahía, la sede del Instituto de Colonización y Reforma Agraria, órgano ejecutivo del Ministerio de Desarrollo Agrario. La ocupación prosiguió este martes, con la retención de cuatro funcionarios en el edificio.
Las protestas del MST aumentaron los riesgos de conflictos en la región de Porto Seguro, donde se concentraron más de 2.000 de sus militantes.
En los últimos días la policía local intentó inutilmente, una vez de forma violenta, contener el flujo de campesinos hacia el área de las conmemoraciones de los "500 años".
Ante la tensión existente, las autoridades estudian limitar la presencia del presidente Cardoso en las celebraciones, suspendiendo una visita al área indígena, donde el gobierno construyó un centro comercial para venta de artesanía pataxó y viviendas para sustituir las casuchas locales.
El proyecto sedujo a un grupo, pero sin neutralizar el rechazo de la tribu a los "500 años" de exclusión.
La Iglesia Católica, que recordará la primera misa celebrada en el país el 26 de abril, hará un pedido de perdón por su participación en el exterminio, que redujo la población indígena de Brasil de cinco millones, estimados en 1500, a los 350.000 de hoy.
Además mantiene como uno de sus organismos el Consejo Indigenista Misionero, que en las últimas décadas se destacó por el apoyo a los reclamos de la población autóctona.
Pero el gobierno tomó el camino opuesto, criticado también por historiadores, al dar carácter de fiesta, sin reflexión, a las celebraciones del quinto centenario de la llegada de los portugueses y excluir a los indígenas, adoptando el concepto colonialista de "descubrimiento".
El posible fracaso es una consecuencia. (FIN/IPS/mo/dm/ip/00