Unos 50 menores que aguardan la ejecución de su pena de muerte en Pakistán podrían beneficiarse de los planes del gobierno militar de actualizar su sistema judicial de acuerdo con la Convención de las Naciones Unidas sobre los Derechos del Niño.
El gabinete federal ya aprobó una serie de recomendaciones propuestas por el Ministerio de Bienestar Social para mejorar las leyes sobre menores infractores, que causan preocupación entre organizaciones nacionales e internacionales de derechos humanos.
"Esperamos que el presidente promulgue la ley en la última semana de abril", expresó Shahid Msood, portavoz del ministerio.
La nueva ley prohibirá la pena de muerte, los latigazos y el uso de esposas y grillos contra menores, en satisfacción de antiguos reclamos de grupos de derechos humanos.
Los gobiernos provinciales establecerán nuevos tribunales de menores además de los ya existentes en Karachi y en las sureñas Sindh y Sahiwal, considerados inadecuados.
La Comisión de Derechos Humanos de Pakistán, con sede en Lahore, y otros grupos defensores de los derechos de la infancia esperan que, una vez prohibida la pena capital para menores, se perdone automáticamente a los menores ya condenados, incluso un niño de 14 años que aguarda su ejecución en la cárcel de Bahawalpur.
Pero existen otras interpretaciones sobre la aplicación de la nueva ley, porque algunos funcionarios de gobierno ya destacaron que no habrá retroactividad.
"Es cierto que las leyes no pueden ser retroactivas, pero seguramente un juez que revise los casos tendrá una visión compasiva", señaló Masood.
De hecho, ningún menor de 18 años ha sido ejecutado hasta ahora en Pakistán, destacó un funcionario de la Comisión Nacional para el Bienestar Infantil y el Desarrollo.
Muchos de los cambios propuestos en las leyes sobre justicia de menores habían sido planteados en el Proyecto sobre Menores Infractores en el Senado durante el gobierno de Nawaz Sharif, derrocado en un golpe militar el pasado octubre.
El proyecto aún estaba en estudio cuando el Senado fue disuelto.
Luego del golpe de Estado, la Comisión para el Bienestar Infantil propuso revisar el proyecto y sustituir la definición de "menor" para cubrir a todos los menores de 18 años, y no de 16.
"El nombre de la propuesta también fue cambiado por el de Proyecto sobre el Sistema Judicial de Menores, que es más adecuado", dijo el funcionario.
La ley estará de acuerdo con las obligaciones de Pakistán según la Convención sobre los Derechos del Niño, incluso las relativas a definición de la edad, justicia de menores y mejor interés del menor.
"Pakistán otorgó prioridad a los programas de supervivencia, protección y desarrollo de los niños, y trata de evitar que los menores sean víctimas de tortura, tratamientos crueles y arrestos ilegales, como lo enuncia la Convención, de la cual Pakistán es signataria", destacó el funcionario.
El gobierno sostiene que la reforma se inició tras un proceso de consulta, pero grupos paquistaníes de derechos de la infancia sostuvieron que ellos no participaron de la revisión.
"No hemos visto el proyecto de ley, por lo tanto no puedo hacer comentarios sobre si los cambios son o no suficientes", declaró Anushay Hussain, director de Sahil, un grupo defensor de los derechos de la infancia con sede en Islamabad.
Mientras, la Comisión de Derechos Humanos de Pakistán afirmó que fue consultada hace varios años cuando el gobierno preparaba un proyecto, pero que no se le consultó sobre los últimos cambios.
"En ese entonces propusimos un proyecto alternativo, porque el del gobierno no ahondaba lo suficiente", dijo Aziz Siddiqui, director de la Comisión.
"No conocemos los cambios específicos propuestos ahora, pero pretendemos reformas suficientes para proteger los derechos de los menores. Por ejemplo, debería definirse como menor a toda persona que no haya cumplido los 18 años de edad", agregó.
Además, los menores solo deberían ser llevados bajo custodia como último recurso, y deberían tener tribunales separados para manejar sus casos, exhortó Siddiqui.
"También debe haber establecimientos adecuados de custodia, ya que los niños no deben estar en cárceles, debe realizarse el mayor esfuerzo para su rehabilitación y definitivamente no debe haber pena capital para menores de 18", añadió.
Actualmente hay unos 4.000 menores presos en Pakistán, la mayoría en cárceles de adultos, dado que la capacidad de las dos prisiones especiales para menores, en Karachi y Bahawalpur, no es suficiente.
La mayoría de los menores están presos por delitos menores, pero padecen terribles abusos en la cárcel por parte de reclusos adultos, guardias de prisión y autoridades.
Los grupos de derechos humanos también exhortan a aumentar la edad mínima de responsabilidad penal de siete a 15 años y a poner énfasis en la educación y la capacitación, en lugar de la cárcel y los castigos. (FIN/IPS/tra-en/mr/rdr/mlm/hd/00