La unión política de América Latina en una comunidad de naciones sigue siendo el anhelo del Parlamento Latinoamericano (Parlatino), ahora bajo presidencia de la senadora mexicana Beatriz Paredes.
La nacionalidad de la primera mujer que preside el Parlatino desde su fundación en 1964 realza los dilemas y alternativas que tiene por delante la región, más agudos en México por su integración económica con América del Norte.
México "pertenece a América Latina, de la cual es entrañable", pero su posición geográfica le ofrece también "la oportunidad de una relación respetuosa y constructiva" con Estados Unidos, afirmó Paredes luego de asumir su nueva función, el viernes.
Ante suposiciones de que su gestión podría llevar al Parlatino a una mirada más continental, favorable al Area de Libre Comercio de las Américas en lugar de a los bloques del Sur, señaló la vocación latinoamericana siempre comprobada de su país.
México firmó acuerdos comerciales con Chile, Uruguay y países andinos, no solo con América del Norte, recordó. La meta es crear la Comunidad Latinoamericana de Naciones, pero el Parlatino debe considerar la riqueza de concepciones variadas sobre la integración regional, dijo Paredes.
La senadora del gobernante Partido Revolucionario Institucional fue elegida para presidir por dos años el Parlatino, una asociación de congresos nacionales de 22 países.
En los procesos de integración es decisiva la dimensión política, porque asegura la viabilidad del proyecto, sostuvo, por su parte, Juan Adolfo Singer, senador uruguayo que condujo la institución desde diciembre de 1995 y permanece en su dirección como presidente delegado.
Durante la Presidencia de Singer, el Parlatino estableció acuerdos de cooperación y actuación conjunta con más de 20 organizaciones internacionales, tanto oficiales y como no gubernamentales.
Muchas de estas organizaciones participan en las comisiones temáticas del Parlatino con sugerencias y proyectos. Es el caso de la Organización Panamericana de Salud, varias agencia de Naciones Unidas y Consumers International.
Un importante avance con la colaboración de Consumers International fue la elaboración de una ley marco de defensa de los consumidores para la región, cuya adopción a nivel nacional se tramita en varios parlamentos latinoamericanos, destacó Singer.
El Parlatino conquistó un asiento como observador en la Organización de las Naciones Unidas y en la Organización de los Estados Americanos, además de la Unión Europea, donde desarrolla una cooperación con el Parlamento Europeo.
La Comunidad Latinoamericana de Naciones, objetivo mayor de los parlamentarios que suman la militancia por la integración regional a sus tareas políticas y legislativas nacionales, avanza lentamente. "Mucho se ha hecho por ella, pero no lo suficiente", evaluó el senador uruguayo.
Los procesos regionales de integración económica y comercial, como el Mercado Común del Sur y la Comunidad Andina, contribuyen a construir las bases de lo que futuramente será la Comunidad Latinoamericana de Naciones, confía Singer, que seguirá dirigiendo Patria Grande, la revista del Parlatino.
Paredes y Singer comparten la dirección de la institución con parlamentarios de Argentina, Brasil, Chile, Costa Rica, Ecuador y República Dominicana, lo cual revela la búsqueda de una distribución equilibrada entre las distintas regiones.
Pero el Cono Sur concentra una presencia relativamente mayor, con el diputado brasileño Ney Lopes como presidente alterno, el senador chileno Jorge Pizarro como secretario general y el senador argentino Daniel Baum como secretario de comisiones, además de Singer.
Con sede permanente en Sao Paulo, un edificio cilíndrico y negro diseñado por el célebre arquitecto brasileo Oscar Niemeyer, el Parlatino busca aún, 36 años después de su fundación, tener alguna influencia para concretar el sueño de integración política enarbolado los libertadores de América Latina, como Simón Bolívar. (FIN/IPS/mo/mj/ip/00