Las universidades del Sur en desarrollo utilizan los satélites, el correo electrónico y la Internet para impartir educación a distancia a sus alumnos y de paso revolucionar la forma de enseñar.
Este mes llega a su fin el período de prueba de 15 nuevas universidades virtuales en Corea del Sur, y todo indica que el país adoptará el programa.
La Universidad Virtual de Africa (AVU) comenzará a ofrecer carreras de cuatro años en octubre luego de probar con éxito un proyecto piloto, y el Instituto Tecnológico de la mexicana Universidad Virtual de Monterrey imparte cursos de posgrado a América Latina, Canadá, Estados Unidos y México a través del ciberespacio.
"Quizás el principal motivo para adoptar ese modelo particular de educación es su alta viabilidad, dado que con un reducido número de recursos económicos y humanos se puede acceder a vastos sectores de población", señaló Víctor Guerra Ortíz, coordinador del Instituto Latinoamericano de Comunicación Educativa en México.
"El proceso de enzeñanza y aprendizaje mejora sustancialmente con el uso de tecnologías informáticas. En México, los principales elementos de esas técnicas son las ciencias de la computación, las telecomunicaciones y la televisión educativa".
"Hoy, la profesión de enseñar se basa en una combinación de esos medios para… desarollar la educación a distancia en México", explicó.
La liberalización y privatización enfrentaron a los países en desarrollo con la necesidad de educar a más gente con menos recursos públicos. La educación a distancia se percibe como la respuesta a los crecientes costos de la enseñanza superior.
En Africa, el fenómeno se produce como respuesta a la decreciente calidad de los centros de enseñanza e investigación y a la fuga de cerebros atraídos por las mejores oportunidades y salarios que ofrecen las universidades e industrias de los países ricos.
Más de 30.000 africanos con doctorados viven en el exterior, según estimó la Comisión Económica de las Naciones Unidas para Africa.
En su página en Internet, la AVU asegura que brinda la "flexibilidad y los bajos costos de una infraestructura académica virtual para producir gran cantidad de profesionales con formación científica y tecnológica, y apoyarlos con permanentes oportunidades de adquirir más conocimientos".
"De esa manera se pueden superar las actuales barreras de reducción de presupuestos, escasez de profesores, equipos anticuados y espacios e instalaciones limitadas que obstaculizan el acceso a la educación superior a una significativa mayoría de estudiantes en Africa subsahariana", agregó la AVU.
La AVU presta servicios en 16 países africanos con profesores del continente, Europa y América del Norte mediante videos grabados, la Internet o transmisiones en directo por satélite.
También permite la interacción a través del teléfono, el fax y el correo electrónico. La AVU cuenta con una biblioteca digital, fuentes informativas sobre Internet y recursos como archivos de periódicos y publicaciones de su patrocinador, el Banco Mundial, y el Fondo Monetario Internacional (FMI).
"Pese a que la actual participación en la educación virtual es reducida, la posibilidad de crecimiento es espectacular y la aplicación de este nuevo medio de enseñanza y aprendizaje ya existe", apuntó Gajaraj Dhanarajan, titular de la organización Comunidad de Aprendizaje.
La Comunidad de Aprendizaje es un organismo internacional creado por los jefes de gobierno de la Comunidad Británica de naciones para fomentar el desarrollo y la participación en la educación a distancia.
"En ninguna parte es tan grande la necesidad de aplicar esas nuevas tecnologías como en muchas zonas de la Comunidad donde la brecha entre la oferta y la demanda es tan considerable", dijo Dhanarajan.
Entre los centros líderes de educación a distancia se incluyen el Sistema Universitario de Televisión de China y la Universidad Anadolu de Turquía, ambas con más de 500.000 estudiantes cada una, así como la Universidad Nacional Abierta Indira Ghandi en India, la Universidad Nacional Abierta de Corea y la Universidad de Sudáfrica.
Como institución, la universidad tiene más de 1.000 años de antigüedad en Europa, donde se estableció como fuente, guardiana y transmisora de la alta instrucción.
Pero los avances tecnológicos, así como la democratización y privatización de las universidades, ayudó a tranformar esos centros de enseñanza en instituciones más informales y accesibles que pueden llegar a los hogares de los estudiantes.
La Internet, que pasó de ser un instrumento especializado de la comunidad científica a comienzos de los años 90 a uno capaz de ser utilizado por todos, es un puntal de esa transformación.
Sus 180 millones de usuarios se convertirán en 700 millones el año próximo, lo cual la convertirá en la herramienta de comunicación con crecimiento más rápido de la historia.
Aunque la mayoría de los usuarios están en países industrializados, las naciones en desarrollo son concientes de la necesidad de ampliar sus redes informáticas.
En la década pasada, México experimentó un crecimiento nunca inferior a 20 por ciento anual en su infraestructura de computadoras y telecomunicaciones, señaló Guerra Ortiz.
México sólo tiene 12 teléfonos y 2,2 computadoras por cada 100 habitantes. Sin embargo, cuenta con una moderna infraestructura digital de telecomunicaciones que incluye 1.600 kilómetros de cables de fibra óptica. También posee satélites con cobertura continental, el más moderno de los cuales es el Satmex 5.
Del otro lado del Golfo de México, la Universidad de las Antillas (UWI) actualiza su infraestructura tecnológica como parte de un esfuerzo compartido en el Caribe oriental. El centro de enseñanza utilizará la Internet para impartir cursos de física a distancia, entre otros avances proyectados.
"Cuando finalice la actualización, la universidad espera incluír video conferencias en sus instalaciones", explicó Peter Dirr, de la Corporación del Servicio Público de Telecomunicaciones, en Estados Unidos.
Fundada en 1948 como una universidad tradicional en Mona, Jamaica, la UWI se ha convertido en líder de la educación a distancia para habitantes de la mayoría de los países caribeños. (FIN/IPS/tra-en/gm/ks/ego/aq/ed/00
