Canadá, uno de los principales socios comerciales de Cuba, podría quedar atrapado en la compleja y tensa telaraña legal en torno de los casos del diplomático expulsado de Washington José Imperatori y del niño náufrago Elián González.
Imperatori, vicecónsul que cumplía tareas en la Oficina de Intereses de Cuba en Washington, está en Ottawa tras su expulsión por espionaje. Mientras, Elián González vive, contra la voluntad de su padre residente en Cuba, con familiares en Miami desde que fue rescatado en el mar hace tres meses.
El gobierno cubano insiste en que detrás de las denuncias estadounidenses de espionaje que este fin de semana derivaron en la expulsión de Imperatori se oculta la intención de "impedir a toda costa la devolución" del pequeño a su padre, Juan Miguel González.
A su vez, Estados Unidos optó por no cerrar la posibilidad de que Imperatori, declarado "persona no grata" y obligado a viajar a Otawa el domingo, pueda prestar testimonio en el juicio por espionaje contra Mariano Faget, ex empleado del Servicio de Inmigración y Naturalización (INS).
En ese sentido, James Rubin, portavoz del Departamento de Estado (cancillería) estadounidense, dijo el lunes que si los funcionarios judiciales "procuran su presencia (de Imperatori) en un juicio u otros procedimientos legales, y decide venir, podrá hacerlo".
Faget será enjuiciado bajo cargos de espiar para Cuba, en un caso que involucraría a Imperatori y a Luis Molina, su antecesor en el cargo en la Oficina de Intereses, representación de la isla en Washington.
Imperatori se encontraba hasta este martes en la embajada de Cuba en Otawa, donde continúa su huelga de hambre iniciada hace tres días en demanda "de una respuesta honorable a su situación", informó la prensa oficial de la isla.
"Defenderé mi moral y mi verdad", dijo en carta a su esposa, Raquel Fundora, en la cual asegura estar ya sintiendo los efectos del prolongado ayuno.
La noche del lunes vencieron las 48 horas concedidas por el gobierno de Canadá y su permanencia en esa legación diplomática contra la voluntad de Otawa podría interferir en las relaciones de La Habana con uno de sus mejores socios económicos y comerciales.
Los vínculos entre ambos países son amplios y se desarrollan por sobre algunas diferencias en materia de derechos humanos, área en la cual el año pasado hubo fricciones, pero, al parecer, sin mayores consecuencias.
Canadá es el inversor más importante de la isla, con un capital superior a 600 millones de dólares y el segundo socio comercial de La Habana, con un intercambio superior a los 500 millones de dólares.
En medios diplomáticos se considera difícil que la sangre llegue al río, aunque hasta el mediodía de este martes un velo de misterio rodeaba la situación de Imperatori.
El gobierno de Fidel Castro habría solicitado a las autoridades de Canadá una visa que le permita quedarse más tiempo, pero éstas insisten en que debe marcharse.
Las muestras de apoyo al ex diplomático, considerado por La Habana inocente de los cargos que se le imputan, se añadieron a la demanda de regreso de Elián González junto a su padre que cada día se reitera en marchas, tribunas abiertas y mesas redondas desde diciembre.
En el curso de la próxima semana, el juez de distrito Michael Moore, de Miami, deberá decidir si su corte tiene competencia para oponerse a la devolución del niño a su padre, tal como decidió en enero el INS, que puso plazo hasta el 14 de ese mes.
El destino del sobreviviente del naufragio en que murió su madre, Elizabeth Brotons, quien lo había sacado de la isla clandestinamente para emigrar a Estados Unidos, se ha ido enredado en una maraña judicial que entorpece aún más un desenlace.
Una repentina enfermedad impidió al juez William Hoeveler conducir la audiencia prevista para el día 22, lo que derivó en el nuevo cambio de fecha y de magistrado, luego de que el primer designado, James Lawrence King, rechazó el caso un mes antes.
En tanto, una corte familiar de Miami que también intentará decidir la semana próxima sobre la custodia temporal de Elián González fue encargada a un tercer juez, luego de que Michael Chavies se retiró por conflicto de intereses.
Armando Gutiérrez, asesor y coordinador de la campaña para impedir que Elián González sea repatriado a Cuba, manejó también la postulación de Chavies en 1994.
Gutiérrez también dirigió la campaña para postular a la jueza Rosa Rodríquez, que otorgó la custodia de emergencia a Lázaro González, tío abuelo paterno del menor, residente en Miami.
La última encuesta conocida establece que 67 por ciento de los estadounidenses apoya la decisión del INS de entregar a Elián González a su padre en Cuba. (FIN/IPS/pg/mj/ip/00
