La creciente densidad demográfica en las áreas con mayor diversidad biológica y más amenazadas del planeta aumenta el riesgo para las especies que viven en esas áreas, advirtió un informe sobre población dado a conocer en Washington.
Más de 1.100 millones de personas viven en los llamados "lugares calientes" de biodiversidad, las 25 áreas más ricas en especies y ambientalmente amenazadas del mundo, se señaló en un informe de Acción de Población Internacional (PAI) titulado "El lugar de la Naturaleza", que fue divulgado el lunes.
El concepto de "lugar caliente" fue desarrollado por conservacionistas para referirse a las regiones donde la diversidad biológica está más concentrada y el riesgo para la misma es mayor.
Esas regiones ricas en especies, que ocupan alrededor de 12 por ciento de la superficie terrestre del planeta (menos de un octavo), y albergan a no menos de la mitad de las especies terrestres, son ahora el hogar de 20 por ciento (un quinto) de la población mundial, se indicó en el documento de 80 páginas.
En todos menos uno de los "lugares calientes" se registra una clara tendencia al aumento de la densidad demográfica.
"Comprobamos que la densidad de población humana y su índice de crecimiento en los 'lugares calientes' superan en forma significativa los promedios mundiales, y este hallazgo es alarmante desde el punto de vista de la conservación ambiental", dijo Richard Cincotta, investigador de PAI y coautor del informe.
La mayoría de los biólogos piensan que una extinción masiva de especies está en marcha y que el planeta se va empobreciendo en términos de biodiversidad, se observó en el documento.
Un quinto de todas las especies vivientes podrían desaparecer en los próximos 30 años debido a la gran demanda de tierras y recursos por una sola especie, la de los seres humanos, advirtió PAI.
"La superficie de los ecosistemas naturales intactos se ha reducido a 30 por ciento o menos de su dimensión original en todos los 'lugares calientes"', agregó.
En nueve de esos sitios, incluyendo los ubicados en Filipinas, Madagascar y la región de la selva atlántica brasileña, el área de ecosistemas naturales intactos descendió a menos de 10 por ciento de su extensión original.
Según el informe, en 19 de los 25 "lugares calientes" la velocidad de crecimiento de la población humana es mayor que el promedio mundial. Así ocurre, por ejemplo, al oeste de Ecuador, en la zona tropical de los Andes y en Madagascar.
En 16 de esas áreas, la densidad de población humana ya es igual o mayor que el promedio mundial. En el informe se indicó que la densidad es más alta en los "lugares calientes" del Caribe, Filipinas y Sri Lanka.
En 1995 ya se había comprobado un aumento significativo de la población humana en tres de las mayores áreas silvestres tropicales: las grandes extensiones selváticas del Amazonas, la Cuenca del Congo y las islas de Melanesia.
"La velocidad de aumento de la población humana en esas áreas ha sido dos veces y media mayor que el promedio mundial", apuntó el informe.
Esas extensas áreas selváticas ricas en biodiversidad pueden quedar reducidas a puñados de terrenos boscosos aislados en las próximas décadas, si continúan los niveles actuales de deforestación, alertó PAI.
Una desaceleración del crecimiento demográfico podría facilitar la conservación de tales áreas, añadió.
A pesar del tono sombrío del informe, Cincotta dijo que era optimista debido a que un reciente estudio de poblacion indicó que en todo el mundo las parejas, y en especial las mujeres jóvenes, desean maternidad tardía y menos hijos.
El cumplimiento de esas aspiraciones puede contribuir en forma poderosa a frenar el aumento de la población mundial, cuyo promedio es en la actualidad 1,6 por ciento anual para las regiones en desarrollo y 0,3 por ciento para los países industrializados.
"La actual desaceleración del crecimiento de la población mundial brinda la esperanza de aliviar la presión de las actividades humanas sobre las áreas ecológicamente valiosas pero frágiles", dijo Cincotta.
Para asegurar la supervivencia de esas zonas en peligro, PAI recomendó aumentar los esfuerzos conservacionistas en áreas protegidas y el apoyo financiero a los programas de planificación familiar.
"Agencias donantes, naciones y comunidades deberían otorgar mayor prioridad a la conservación de la biodiversidad", se afirmó en el informe.
Es crucial asegurar y mantener las actuales áreas protegidas y reservas, expresó Russel Mittermeier, presidente de Conservación Internacional, la primera organización que desarrolló en forma completa el concepto de "lugares calientes".
Una investigación del Banco Mundial y el Fondo Mundial de la Naturaleza (WWF) comprobó que la mayoría de las áreas protegidas no estaban recibiendo protección suficiente de las autoridades locales o nacionales, en 10 países en desarrollo de especial importancia desde el punto de vista ambiental.
"El impacto de la población humana en los 'lugares calientes' es otro ejemplo poderoso de por qué debemos proteger todas y cada una de las especies que aún habitan en esas áreas, que son un capital de increíble importancia para la biodiversidad", manifestó Mittermeier.
Sin embargo, los esfuerzos conservacionistas deben articularse con programas de desarrollo, reforma agraria y lucha contra la pobreza, ya que "no hay duda de que necesitamos más inversiones en conservación, pero no puede haber conservación en el vacío", explicó.
Ami Coen, presidente de PAI, elogió al presidente de Estados Unidos, Bill Clinton, por proponer que el próximo presupuesto de ese país, para el año fiscal 2001, destine 542 millones de dólares a programas de planificación familiar y 150 millones a preservar selvas tropicales, en ambos casos con alcance mundial.
"La manera manera más segura de preservar nuestra herencia natural es invertir para satisfacer las necesidades de la gente. Es una inversión que no podemos permitirnos omitir", expresó. (FIN/IPS/tra-en/dk/lv/ego/en dv/00)