Ricardo Lagos triunfó hoy en la segunda vuelta de reñidas elecciones y será el segundo presidente socialista en la historia de Chile y el tercer mandatario promovido por la Concertación por la Democracia.
Lagos, un abogado y economista de 61 años, nacido en Santiago el 2 de marzo de 1938, que guiará el ingreso de este país en el nuevo milenio, inició tal vez sin proponérselo una imprevista y a la vez lenta carrera hacia la Presidencia la noche del 25 de abril de 1988.
Presidente entonces del flamante Partido por la Democracia (PPD), apuntó su índice a las cámaras durante un programa político televisivo de alta audiencia para conminar al dictador Augusto Pinochet (1973-1990) a dejar el poder.
Hasta ese momento, ningún político había osado emplazar públicamente al "hombre fuerte" del país, que pretendía prolongar su régimen en el plebiscito presidencial del 5 de octubre de 1988, en el cual fue finalmente derrotado.
Desde entonces, Lagos fue el líder natural del PPD y del Partido Socialista (PS), pero debió esperar hasta 1999 para que su liderazgo se legitimara sobre el conjunto de la Concertación por la Democracia.
En la coalición, formada también en sus orígenes por los partidos Demócrata Cristiano (PDC), Radical Socialdemócrata, los Verdes y los Humanistas, se impuso la hegemonía democristiana para las elecciones presidenciales de 1989 y 1994.
Socialistas y socialdemócratas aceptaron de buen grado en 1989 llevar como candidato de la coalición a Patricio Aylwin, quien recibió el gobierno de manos de Pinochet el 11 de marzo de 1990 para dirigir por cuatro años la transición a la democracia.
Para las presidenciales de 1993 fue levantada por el bloque PS- PPD la precandidatura de Lagos, que resultó derrotado por el actual presidente, Eduardo Frei Ruiz-Tagle, del PDC, en las primarias internas de la Concertación por la Democracia.
Postulado nuevamente por el PS-PPD y con el apoyo del Partido Radical Socialdemócrata, Lagos ganó finalmente la candidatura presidencial de la Concertación el 30 de mayo de 1999, al derrotar con 71,34 por ciento de los votos al precandidato del PDC Andrés Zaldívar.
El ahora presidente electo comenzó entonces su carrera al palacio presidencial de La Moneda con un claro favoritismo en las encuestas de intención de voto para los comicios del 12 de diciembre.
Pero la confianza en un triunfo fácil -similar al de Aylwin y el de Frei- se fue tornando relativa a medida que crecía la figura de su principal oponente, el candidato de la derechista coalición Alianza por Chile, Joaquín Lavín.
La propuesta de "crecer con igualdad" que inspiró la campaña de Lagos no encontró la recepción esperada en gran parte del electorado, que sufrió en 1999 el impacto de la crisis internacional, con su secuela de alto desempleo.
El mensaje más simple y despolitizado de Lavín, un dinámico ex alcalde acusado por sus adversarios de demagogo y populista, incluyó promesas con buenos réditos electorales de solución de los problemas de empleo, salud, educación y seguridad ciudadana.
En la competencia entre seis candidatos del 12 de diciembre se produjo un virtual empate. Con 47,95 por ciento de los votos, el abanderado oficialista aventajó por apenas 31.142 papeletas a Lavín, quien obtuvo 47,51 por ciento.
Al no lograr la mayoría absoluta exigida por la Constitución, Lagos tuvo que enfrentarse a Lavín en esta segunda vuelta, en la primera vez que se recurre a este mecanismo en Chile, instituído desde 1980.
La victoria definitiva de este socialista moderado se debió a una mayoría progresista que va desde el centro hasta la extrema izquierda, concentrada en torno de Lagos para rechazar a Lavín, a quien identifica con la dictadura de Pinochet.
Lagos se convertirá así en el segundo presidente socialista en la historia de Chile, 30 años después de Salvador Allende, cuyo gobierno, iniciado el 4 de noviembre de 1970, fue derrocado cruentamente por el golpe de Estado del 11 de septiembre de 1973.
"Fui allendista, a mucha honra, pero hoy son otras las condiciones históricas", dice Lagos, quien debió combatir en su campaña los intentos derechistas de asimilar su candidatura con la Unidad Popular, la coalición de socialistas, comunistas, radicales y cristianos de izquierda que gobernó con Allende.
Equidad, justicia social, modernización, fortalecimiento de la educación y profundización de la democracia son conceptos presentes en el programa de gobierno con que Lagos invitó a los chilenos a votar por él para "entrar en el nuevo milenio".
Su gestión como ministro de Educación en el gobierno de Aylwin y de Obras Públicas en la administración de Frei fue su carta de presentación ante el electorado como un servidor público eficiente e innovador capaz de dirigir los destinos del país.
Lagos, como político, encarna con propiedad al polémico socialismo renovado que desde fines de los años 70 se alejó del credo marxista-leninista y reivindicó el pluralismo y la democracia representativa, pero también el mercado.
Durante el gobierno de Allende, el actual presidente electo tuvo un discreto papel de asesor externo, junto a una brillante carrera como académico y secretario general de la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales.
El flamante triunfador de la elección se define como un típico producto de la clase media que surgió con el Chile laico y democrático que se comenzó a construir en los años 30 con los gobiernos del viejo Partido Radical.
El propio Lagos militó en las filas del radicalismo durante su brillante carrera de estudiante secundario y en la Escuela de Derecho de la Universidad de Chile, alejándose cuando ese partido se alió con el gobierno conservador de Jorge Alessandri (1958-64).
Graduado de abogado en 1962, el presidente electo obtuvo un doctorado en Economía en la universidad estadounidense de Duke en 1966. Tras el golpe de 1973 hizo clases en los Estados Unidos y fue funcionario de la Organización Internacional del Trabajo.
Entre 1983 y 1984 fue presidente de la Alianza Democrática, germen de la actual coalición oficialista, y en 1987 fundó el PPD, concebido entonces como un grupo instrumental del PS y de otras organizaciones proscritas por la dictadura.
En 1986 fue encarcelado por Pinochet junto a otros líderes democráticos, luego del fallido atentado contra el entonces dictador del insurgente Frente Patriótico Manuel Rodríguez.
Amigo personal de los presidentes Fernando de la Rúa, de Argentina, y Fernando Henrique Cardoso, de Brasil, del ex presidente español Felipe González y del primer ministro británico Tony Blair, Lagos integra el Comité de Doce Miembros Distinguidos de la Internacional Socialista.
El presidente electo de Chile está casado en segundas nupcias con la asistente social Luisa Durán, con quien tiene una hija, Francisca, aunque el núcleo familiar es de cinco hermanos, sumando los hijos que ambos tuvieron en sus primeros matrimonios. (FIN/IPS/ggr/ff/ip/00