Se prevé que este domingo vuele a Londres un avión-hospital de la Fuerza Aérea de Chile, que podría traer de regreso al país al ex dictador Augusto Pinochet dentro de una semana, según se estima en medios gubernamentales.
Pinochet estaría retornando a Chile una semana después de la crucial segunda vuelta de la elección presidencial de este domingo, en la cual el candidato del oficialismo centroizquierdista, Ricardo Lagos, se enfrentará al derechista opositor Joaquín Lavín.
El ex dictador, de 84 años, será excluido del juicio de extradición a España que se le sigue en Londres, si fracasan las medidas adoptadas por la organización humanitaria Amnistía Internacional y el juez español Baltasar Garzón, luego de que el ministro del Interior británico, Jack Straw, anunciara que piensa liberar a Pinochet.
Straw anunció el martes que tenía la intención de no entregar a la justicia española al ex dictador (1973-90) por razones de clemencia, luego de exámenes médicos que ratificaron un grave estado de salud del general retirado y senador vitalicio.
El ministro fijó un plazo de siete días para conocer los argumentos de las partes acusadoras de Pinochet, la Fiscalía británica, que representa a España, y Amnistía Internacional en nombre de los organismos defensores de los derechos humanos.
Garzón, quien acusa a Pinochet de crímenes contra la humanidad, solicitó nuevos exámenes médicos al ex dictador, pero es improbable que el gobierno derechista español de José María Aznar traslade ese pedido a la Fiscalía británica.
El canciller chileno, Juan Gabriel Valdés, sostuvo el viernes una conversación telefónica con su par español, Abel Matutes, quien le habría garantizado que mantendrá su decisión de no apelar contra la decisión de liberar a Pinochet por motivos humanitarios.
Amnistía Internacional demandó a su vez acceso a los exámenes médicos que el día 5 le practicaron al ex dictador profesionales británicos y que se mantienen en reserva, al parecer por pedido del propio Pinochet.
Straw aseveró que el diagnóstico de los especialistas indica en forma contundente que el anciano general no resistiría un proceso en España ni el previo juicio de extradición, que podría prolongarse unos dos años.
En medios gubernamentales chilenos se confía en que no prosperarán los argumentos contra la liberación de Pinochet, cuyo plazo de presentación ante el ministro británico vence el día 18.
Straw dedicaría luego entre tres y cuatro días a analizar y responder esos argumentos, por lo cual se prevé en Santiago que la salida de Pinochet de Gran Bretaña sería autorizada entre el viernes 21 y el domingo 23.
Como la decisión británica tiene carácter político, serían desechados los recursos judiciales que puedan interponer tribunales de Suiza, Francia y Bélgica que también reclaman al ex dictador.
Las hipótesis sobre el inminente regreso del ex dictador fueron rebatidas por el abogado Hugo Gutiérrez, patrocinador de varias de las 50 querellas criminales presentadas contra el ex dictador en Chile desde febrero de 1998.
Según Gutiérrez, el gobierno laborista británico anunció que accedería a la liberación por razones humanitarias, solicitada por el presidente chileno Eduardo Frei, para favorecer la candidatura oficialista de Lagos.
Durante la campaña electoral se acusó a Lavín de ocultar su identificación con la dictadura de Pinochet y los crímenes contra los derechos humanos de su régimen, y se aseguró que eso fue una causa importante de que alcanzara una alta votación, obligando a Lagos a competir en una segunda vuelta.
Gutiérrez opinó que si Lavín triunfa en la elección de este domingo, Straw dará la razón a los alegatos contra la liberación del ex dictador, retenido en Londres desde su arresto, que se llevó a cabo el 16 de octubre de 1998.
En declaraciones a un canal de televisión realizadas en la noche del viernes, Frei recalcó que la actuación de su gobierno en el caso Pinochet se inspiró en "el bien común nacional, sin intereses mezquinos ni electorales".
El mandatario reiteró sus críticas a la derecha, que tras presionar insistentemente al gobierno por su supuesta debilidad en la defensa del ex dictador, se desentendió del tema durante la campaña presidencial.
"Veíamos los desfiles (de políticos derechistas) a Londres a hacerle regalitos (a Pinochet), entregarle monos de peluche, y de repente todo eso desaparece", dijo Frei a periodistas del programa Telenoche, de Canal 13. (FIN/IPS/ggr/mp/hd ip/99
