Una coalición internacional de más de 40 organizaciones no gubernamentales aplaudió el nuevo acuerdo de la ONU para prohibir el reclutamiento de niños soldados por gobiernos y grupos rebeldes de todo el mundo.
"Este tratado podría marcar una diferencia para cientos de miles de niños y niñas de todo el mundo", dijo Jo Becker, de Human Rights Watch (HRW), de Nueva York, quien preside la Coalición para Detener el Uso de Niños Soldados.
Se trata de la primera vez que los gobiernos acuerdan que el uso de niños en la guerra es inaceptable, destacó Becker, directora de la división de defensa de los derechos de la infancia de HRW.
El acuerdo, que establece una edad mínima de 18 años para la participación en conflictos armados, fue adoptado por unanimidad luego de seis años de negociaciones. El Grupo de Trabajo de la ONU (Organización de las Naciones Unidas) adoptó la decisión en Ginebra el día 21.
La restricción de edad será una enmienda -oficialmente llamada el Protocolo Opcional- a la Convención de las Naciones Unidas sobre los Derechos del Niño, que ha sido ratificada por todos los países miembros excepto Estados Unidos y Somalia.
Como Estados Unidos, que siempre se opuso a la edad mínima de 18, apoyó el Protocolo Opcional, HRW urgió a Washington a ratificar también la Convención.
En una concesión a Washington, la restricción de edad no se aplicará a los enrolamientos voluntarios en las fuerzas armadas nacionales.
Las Fuerzas Armadas de Estados Unidos aceptan actualmente voluntarios de 17 años con permiso de los padres, y en los últimos años desplegaron soldados de esa edad en Somalia, Bosnia y la guerra del Golfo.
Sin embargo, Estados Unidos tiene menos de 3.000 jóvenes de 17 años en una fuerza activa de 1,2 millones, señaló HRW.
La aceptación del Protocolo significó un gran cambio político, "porque por primera vez Estados Unidos aceptó poner fin al despliegue de menores en combate", destacó Becker.
Unos 300.000 menores de 18 años participan actualmente en conflictos armados en todo el mundo, estimó HRW.
El acuerdo también fue aplaudido por la Secretaría de la ONU, que durante largo tiempo hizo campaña para poner fin al reclutamiento de menores.
Olara Otunnu, representante especial de la ONU para Niños y Conflictos Armados, declaró que el Protocolo Opcional es una victoria para los niños "expuestos a una explotación cínica en situaciones de guerra".
"Me complace que la edad límite para la participación en hostilidades haya sido aumentada de 15 a 18", expresó.
Otunnu reclamó presión internacional sobre las partes en conflicto que actualmente utilizan menores como combatientes.
También es importante considerar los factores políticos, sociales y económicos que facilitan la explotación de niños de esta manera, exhortó.
El acuerdo permitirá a la comunidad internacional movilizar los recursos necesarios para aplicar programas eficaces de desmovilización, desarme y rehabilitación social de menores obligados a participar en guerras.
HRW ha investigado el uso de niños como soldados en países como Angola, Liberia, Sierra Leona, Sudán, Uganda, Colombia y Líbano.
La organización también documentó el despliegue de menores en la primera línea de combate, así como su uso como espías, cargadores, guías, y, en el caso de las niñas, como esclavas sexuales de comandantes militares. (FIN/IPS/tra- en/td/ks/mlm/hd/00