Las principales bolsas de valores de América Latina comenzaron hoy sus operaciones del nuevo año sin sentir la falla informática del milenio, que tampoco tuvo el efecto temido en servicios públicos.
En la bolsa de Sao Paulo, la mayor de la región, se puso a prueba con éxito un sistema informático renovado para evitar los graves problemas aguardados del cambio de la numeración de las computadoras, y tambien operaron sin trastornos los mercados de Buenos Aires, Lima, México y Santiago,
Pero la bolsa de Caracas postergó hasta este martes su reapertura, a causa de un feridado bancario dispuesto previamente por el gobierno. No obstante, el Banco Central y el resto de las empresas del sistema respondieron adecuadamente en pruebas realizadas a puertas cerradas, informó la autoridad monetaria.
Tampoco hubo alteraciones por la falla del milenio en otras áreas informatizadas de Venezuela, aseguró la Comisión Presidencial encargada de vigilar el comportamiento de los sistemas durante el cambio de año.
Venezuela, con una inversión de 800 millones de dólares, fue uno de los países latinoamericanos de mayor esfuerzo económico para adaptar computadoras y programas al cambio del año. Como en todo el mundo, se temía que los sistemas se bloquearan ante los dos ceros que leerían al empezar el 2000.
La Comisión habilitó un Centro Nacional de Respuesta que se declaró en emergencia máxima 12 horas antes del momento crítico de la medianoche del 31 de diciembre, pero no detectó problemas. Sin embargo, "no bajamos la guardia", dijo el presidente de la Comisión, Gustavo Méndez.
La falla del milenio tuvo al parecer un impacto irrelevante en América del Sur, al igual que en el resto del mundo. Ni siquiera se dio cuenta de grandes trastornos en Paraguay, donde la prensa había destacado el atraso de las medidas de prevención.
"Se invirtió muchísimo dinero y tiempo en el mundo" para conjurar riesgos, comentó en Argentina el subsecretario de Coordinación Interministerial de la Jefatura de Gabinete, Carlos Rabat.
"Probablemente, las previsiones minimizaron los efectos, pero nadie puede aventurar qué habría ocurrido si no se tomaban medidas. Probablemente no habrían sido tan dramáticas, pero tampoco tan leves como se puede imaginar hoy a la luz del resultado mundial", señaló Rabat, presidente del comité argentino de Respuesta al Y2K (falla del 2000).
"Yo escuché distintas cifras de gastos. La más plausible de las cifras de gasto por este tema es 600.000 millones de dólares en todo el mundo. Cien mil millones sólo en Estados Unidos. Pero hay que ver qué se cuenta en esta suma, porque hay inversiones privadas que no se hicieron sólo para (enfrentar) el Y2K", agregó.
"No va a suceder nada, los clientes (de los bancos) no tendrán ningún tipo de inconvenientes", aseguró este lunes el subgerente de Informática del Banco Central de Argentina, Alejandro Saravia.
Las empresas que integran el Grupo Enersis en Chile, Argentina, Brasil, Colombia y Perú atravesaron con éxito el también llamado Efecto 2000. No hubo contingencias en el mercado de Enersis, una compañía que depende de Endesa España y atiende a más de 9,3 millones de clientes.
Así mismo, se informó en Chile de una completa normalidad del resto de los servicios públicos y en los gasoductos, oleoductos y poliductos, incluyendo los tres gasoductos trasandinos, por los que fluye el gas natural importado de Argentina.
La misma información fue proporcionada en Colombia, aunque los expertos en informática de la Oficina Proyecto Año 2000 aún permanecían en alerta este lunes, en previsión de efectos posteriores de la falla.
No se espera "ningún contratiempo" en la actividad financiera, "porque todos los sistemas fueron debidamente probados", declaró a IPS Alberto López, de la misma Oficina.
Los integrantes de la Oficina "estaremos pendientes" también de eventuales dificultades debidas "al año bisiesto", los días 28 y 29 de febrero, advirtió López.
En Perú, el gobierno y las empresas, especialmente la banca, invirtieron en conjunto 186 millones de dólares en las acciones preventivas de la falla del 2000, reveló Felix Murillo, jefe del Instituto Nacional de Estadistica e Informatica.
El resultado de la inversión fue satisfactorio, pues no hubo hechos anormales. Pero Murillo señaló que la vigilancia continuará el martes y, como el colombiano López, identificó el 29 de febrero como otra fecha crítica para las computadoras.
En Costa Rica no se dio cuenta de fallas en las 26 instituciones públicas consideradas de alta prioridad ni en las empresas privadas, comunicó el Centro Nacional de Coordinación de la Comisión 2000, formado para evitar el desastre apocalíptico que muchos temían al comenzar el nuevo año.
Como en el caso de comisiones especiales de otros países, el Centro Nacional de Coordinación costarricense puntualizó que se mantendrá el monitoreo de equipos en los próximos días.
La vigilancia también sigue en Panamá, donde el canal interocéanico, que desde el viernes está bajo soberanía nacional, opera con "absoluta normalidad", al igual que los servicios públicos, aseguró Henry Sánchez, gerente del Centro de Información para el Manejo de la Falla del Milenio. (FIN/IPS/ff/sc/00