La persistencia de la corrupción es "el riesgo mayor" que enfrenta el gobierno venezolano de Hugo Chávez, pese a su disposición a combatirla, advirtió hoy uno de los principales operadores políticos del oficialismo.
"Hay una cultura de la corrupción, una praxis difícil de controlar", señaló el ministro de Relaciones Exteriores, José Vicente Rangel, cuando fue consultado sobre el tema por periodistas extranjeros.
El gobierno ha dicho que la aprobación de una nueva Constitución en el referendo del 15 de este mes le permitirá contar con herramientas para combatir mejor la corrupción, incluyendo la renovación del Poder Judicial.
La corrupción "es uno de los temas más delicados, más riesgosos y más peligrosos para el gobierno", debido a las dificultades para erradicarla, admitió Rangel.
Chávez, un teniente coronel retirado que asumió el poder en febrero, practica un discurso de rechazo de las fuerzas políticas que se alternaron en el poder durante los últimos 40 años.
Y con frecuencia asegura que este país vivió un régimen de corrupción que se ha comprometido a conjurar. "Lo que ha quebrado al Estado es la corrupción y el mal manejo de los recursos", afirmó el mandatario este jueves, en un acto por la campaña constitucional.
"Hay voluntad de cortar cabezas, sea de quien sea", aseguró el canciller. Pero también observó que la corrupción es un problema arraigado en una burocracia costosa.
Por otra parte, planteó las dificultades para enfrentar este tipo de delitos cuando el propio Estado está minado por jueces y policías que favorecen la corrupción. Rangel lamentó que incluso cuando algunas personas son atrapadas con las manos en la masa, logran salir en libertad.
"La corrupción es un dolor de cabeza para nosotros, una trampa montada en la cual puede caer cualquiera", añadió.
El ministro dijo que los fenómenos de corrupción se manifiestan casi como un "sub Estado", y como tal logran tener continuidad independientemente que los gobiernos pasen.
"Lo que realmente acecha al gobierno es que continúe operando ese estado paralelo de corrupción", insistió Rangel.
El último informe de la organización no gubernamental Transparencia Internacional consignó un leve mejoramiento de Venezuela, un país al que llevó en su lista de "percepción de la corrupción" del puesto 77 en 1998 al 75 en 1999.
El número 75 es compartido por Venezuela, Ucrania, Moldavia, Costa de Marfil y Vietnam. La lista de Transparencia Internacional comprende 85 países.
Informes de la Contraloría General e investigaciones de la prensa han indicado este año que, pese a los propósitos anticorrupción del gobierno, persisten irregularidades en algunos sectores del Estado.
Rangel advirtió que se trata de un problema incluso más difícil de conjurar que la crisis económica o social. (FIN/IPS/lc/ff/ip/99