La batalla entre Cuba y Estados Unidos por un niño cubano de cinco años involucrado en un caso de emigración ilegal podría llevar al naufragio los acuerdos bilaterales de migración, la única área de mutua colaboración en cuatro décadas de enemistad.
La única solución posible es "la devolución del niño" a Cuba, advirtió el gobierno de Fidel Castro, que emplazó a Washington a encarar su "responsabilidad directa" en tragedias de emigrantes cubanos como en la que participó Elián González.
El niño sobrevivió al naufragio el 25 de noviembre de una embarcación que llevaba 14 personas a Estados Unidos, y ahora es reclamado desde Cuba por su padre, Juan Miguel González Quintana. El accidente causó 11 muertos, entre ellos la madre de Elián.
Familiares del niño radicados en Estados Unidos intentan evitar la repatriación de éste, un asunto que comenzará a ventilarse judicialmente el 23 de este mes, aunque todo indica que las autoridades cubanas desconocerán cualquier veredicto de los tribunales estadounidenses.
"Este no es tema de negociación, ni de trámites legales en manos de jueces venales y corrompidos como los de (el estado de) Florida, sino una cuestión política de alta sensibilidad", advirtió el portavoz de la cancillería cubana, Alejandro González.
De no ser devuelto el niño a su padre legítimo, residente en Cuba, "el gobierno de Estados Unidos será responsable de la forma en que puedan agravarse las relaciones entre los dos países", dijo González.
"Elián no necesita abogados ni cortes federales", afirmó este viernes en un comentario de primera pagina el diario Granma, órgano oficial del gobernante Partido Comunista.
Granma recordó que la patria potestad es un derecho legal tanto en Cuba como en Estados Unidos, donde fue llevado Elián por su madre sin el consentimiento del padre del niño.
Los ciudadanos cubanos menores de edad no pueden viajar al exterior sin permiso de padre y madre.
"Con la violación de las leyes cubanas que definen claramente el derecho del padre, se transgreden también de modo sospechosamente expedito e inexplicable las leyes norteamericanas que reconocen la patria potestad del padre", señaló Granma.
La cancillería inició a fines de la semana pasada las gestiones para la repatriación de Elián, y se comprometió a agotar "todos los esfuerzos necesarios" y "todas las vías posibles" para lograrlo.
"Esperamos que el gobierno norteamericano no sucumba una vez más a la trama macabra que se teje alrededor de este caso", declaró el portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores.
Resulta inexplicable "por qué no es posible que inmediatamente el niño retorne al seno de su familia y el cuidado del padre, ya que sin su permiso y violando las leyes cubanas fue llevado de manera ilegal a los Estados Unidos", indicó Granma.
Elián, quien cumplirá seis años este lunes, ha sido convertido en tanto en símbolo del movimiento anticastrista de Miami. Su fotografía aparece en un cartel distribuido por Estados Unidos por la Fundación Nacional Cubano-Americana, contraria al gobierno de Castro.
La imagen del niño rodeado de juguetes, repetida mil veces en Miami, santuario del exilio cubano en Estados Unidos, fue también difundida por la televisión estatal de la isla, aunque como muestra de la manipulación del caso.
"Estamos asistiendo a un nuevo y grotesco show que con fines políticos se está montando por la mafia terrorista de Miami, con la complacencia del gobierno de los Estados Unidos", advirtió González.
Otras dos personas que sobrevivieron al naufragio pueden acogerse a la Ley de Ajuste, que facilita la residencia legal y el permiso de trabajo en Estados Unidos a los emigrantes cubanos que logran llegar a territorio estadounidense.
Se trata de una ley específica para los cubanos y el gobierno de Castro la considera un estímulo para el tráfico ilegal de emigrantes, que en Cuba se castiga incluso con prisión perpetua.
El tema forma parte de las conversaciones con que regularmente ambos países someten a examen los acuerdos alcanzados en 1994 y 1995 para lograr un flujo emigratorio ordenado, legal y seguro hacia Estados Unidos.
"Cuba siempre actúa con plena responsabilidad en sus compromisos" y exige "el cumplimiento de la otra parte", comentó el portavoz de la cancillería, ante la eventualidad de que el caso de Elián perturbe el clima de la ronda de negociaciones bilaterales prevista para el 13 de este mes en La Habana.
El gobierno acusa a sectores anticastristas del exilio en Miami y a sus "cohortes de la extrema derecha en Estados Unidos" de pretender "liquidar el único acuerdo de normalidad" que Washington ha firmado con La Habana.
"Conocemos perfectamente la intención de estos grupos de provocar incidentes que lleven a una confrontación directa entre ambos países. Cuba, como siempre, actuará con plena responsabilidad", declaró González.
Los convenios firmados comprometen a Estados Unidos a conceder visa al menos a 20.000 ciudadanos cubanos al año y a repatriar a los emigrantes ilegales. A su vez, Cuba se obligó a no aplicar represalias a estos.
Esos acuerdos permitieron la salida normal de Cuba desde 1994 de casi 100.000 personas, aunque no se ha logrado acabar con la aventura de las travesías ilegales, realizadas la mayoría en embarcaciones procedentes de Estados Unidos. (FIN/IPS/pg/ff/ip/99