El socialista Ricardo Lagos, proclamado hoy oficialmente ganador de la primera ronda de las elecciones presidenciales de Chile, aseguró que volverá a superar al derechista Joaquín Lavín en la segunda vuelta del 16 de enero.
Las autoridades electorales convocarán este martes a la elección definitoria, luego de entregar este lunes el resultado definitivo de la realizada el domingo 12, en que compitieron seis candidatos.
El Tribunal Calificador de Elecciones (Tricel) dio a conocer el escrutinio que ratificó la ligera venta de Lagos, candidato de la gobernante Concertación por la Democracia, sobre Lavín, abanderado de la derechista Alianza por Chile.
Lagos alcanzó 47,95 por ciento de los sufragios válidamente emitidos el día 12, sin incluir nulos ni en blanco, aventajando así por 31.142 votos a Lavín, quien logró el apoyo de 47,51 por ciento de los votantes.
El Tricel confirmó que la comunista Gladys Marín ocupó el tercer lugar en el cómputo oficial, con 3,19 por ciento de los votos, seguida por Tomás Hirsch del Partido Humanista (0,51), la ecologista Sara Larraín (0,44) y Arturo Frei Bolívar, disidente democristiano, con 0,38 por ciento.
Roberto Dávila, presidente de la Corte Suprema de Justicia, quien preside asimismo el Tricel, señaló que luego de este resultado quedaba oficializada la realización de la segunda vuelta del 16 de enero, que será convocada formalmente este martes.
Lagos expresó su satisfacción no sólo por el hecho de ocupar el primer lugar, sino porque además el Tricel rechazó numerosas reclamaciones de los apoderados de Lavín, quienes pretendían así disminuir aun más la extrecha diferencia entre ambos.
"Vamos a volver a vencer", afirmó el candidato de la Concertación por la Democracia, coalición de socialistas, demócrata cristianos y socialdemócratas que gobierna Chile desde el restablecimiento de la democracia en marzo de 1990.
No obstante el optimismo de Lagos, el hecho relevante de estas elecciones ha sido el crecimiento de la derecha con Lavín, un candidato calificado de neopopulista que logró despolitizar su campaña y presentarse como un "hacedor de cosas".
Los dos candidatos disputarán en la segunda vuelta no sólo los votos de los cuatro postulantes menores, ya desplazados, sino sobre todo alrededor de un millón de sufragios, correspondientes a la abstención y a papeletas anuladas o en blanco del día 12.
Esta es la primera vez que una elección presidencial chilena se resolverá a través de una segunda vuelta, incorporado por la Constitución plebiscitada en 1980 por la dictadura del general Augusto Pinochet (1973-1990).
La carta política establece que el jefe del Estado debe ser elegido por mayoría absoluta y que si nadie obtiene ese margen en la primera votación, debe realizarse una segunda vuelta entre las dos primeras mayorías relativas.
De acuerdo al cronograma para esta segunda vuelta, el 2 de enero comenzará oficialmente la campaña propagandística a través de la franja electoral que los canales de televisión de señal abierta transmiten en un mismo horario y emn forma gratuita.
La franja, que se transmitirá dos veces al día hasta 72 horas antes de la elección, tiene una duración de 10 minutos, que se distribuirán equitativamente entre los dos candidatos.
Juan Ignacio García, director del Servicio Electoral, indicó que en esta segunda votación Lagos y Lavín conservarán los mismos números que tuvieron en la papeleta para la primera vuelta, cinco para el abanderado oficialista y seis para el opositor.
Esto es así porque en rigor, aunque ya no aparezcan en la papeleta los otros cuatro candidatos, se trata de una segunda votación dentro de una misma elección presidencial, explicó García. (FIN/IPS/ggr/mj/ip/99