La comisión investigadora enviada por la Organización de las Naciones Unidas (ONU) para examinar las alegadas violaciones de derechos humanos en Timor Oriental llegó a la conclusión de que el proceso debe continuar para juzgar a los responsables de las atrocidades denunciadas.
El organismo, de cinco miembros, adelantó el martes el primero de los resultados de sus investigaciones a la Alta Comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, Mary Robinson.
El informe de prensa distribuido por la ONU dijo que durante su estadía de dos semanas en Timor Oriental, la comisión recogió testimonios que ofrecieron evidencias del empleo sistemático de intimidación y terror que causaron muertos y heridos.
Las declaraciones recibidas mencionaron también ataques contra mujeres, que incluyeron abusos sexuales y violaciones. Fuentes de la Administración Transitoria de la ONU en Timor Oriental (UNTAET) informaron también a la comisión sobre los abusos cometidfos contra sus integrantes.
Los miembros del organismo comprobaron personalmente el alcance de los daños cometidos a las propiedades y entrevistaron a numerosos refugiados que regresaban al territorio. Los refugiados relataron que el terror los obligó a huir.
Otros testigos mencionaron que hubo destrucción de pruebas, incluyendo la remoción de cuerpos de los lugares de los crímenes.
El organismo investigador fue creado por el secretario general de la ONU, Koffin Annan, ante una solicitud de la Comisión de Derechos Humanos (CDH).
En una resolución adoptada el 27 de septiembre, la CDH denunció atropellos graves perpetrados en Timor Oriental, en particular después de la consulta popular del 30 de agosto que arrojó un resultado abrumador a favor de los independentistas.
La CDH dijo en su resolución que en la represión dirigida contra la población timorense oriental, y en especial contra los militantes independentistas, existió colusión entre los milicianos y los miembros de las fuerzas armadas y de la policia de Indonesia que ocupaban Timor Oriental desde 1975.
La comisión investigadora recibió también testimonios que evidencian la participación de los grupos de la milicia y de efectivos del ejército indonesio en la intimidación y el terror, señaló el informe distribuido por la ONU.
Los miembros de la comisión estiman que debe otorgarse prioridad al derecho de los individuos a conocer la verdad y a obtener un recurso efectivo ante las violaciones de los derechos humanos.
El informe precisó que los integrantes del organismo subrayan la necesidad de actuar contra la impunidad.
En forma unánime, los cinco miembros declararon su parecer de que el proceso de investigación de las denuncias de atrocidades debe continuar con el objetivo de llevar ante la justicia a los responsables.
Las actuaciones de los miembros del organismo en Timor Oriental se prolongaron desde el 25 de noviembre hasta el 8 de diciembre, cuando regresaron a Ginebra para preparar el informe que someterán al secretario general de la ONU.
La comisión está integrada por Sonia Picado Sotela, de Costa Rica (presidenta), Judith Sefi Attah, de Nigeria, Justice A.M. Ahmadi, de India, Sir Mari Kapi, de Papua Nueva Guinea, y Sabine Leutheusser-Schnarrenberger, de Alemania. (FIN/IPS/pc/ag/hd/99