Más de 2.000 médicos abandonaron Ecuador en lo que va de este año, en especial hacia Chile y Argentina, y otros 21.000 trabajan en actividades ajenas a su profesión, según un informe de la Federación Médica Ecuatoriana.
El aumento del desempleo debido a la crisis económica que vive el país es la causa fundamental del éxodo de profesionales que acaban de salir de la Universidad.
De los 30.000 médicos que hay actualmente en el país, 21.000 trabajan en actividades distintas a la medicina, sobre todo de taxistas.
El presidente de la Federación Médica Ecuatoriana, Orly Ollague, aseguró que los profesionales no encuentran trabajo y cuando lo consiguen, los sueldos son "paupérrimos, luego de una carrera universitaria costosa en tiempo y materiales".
"La situación es muy difícil para ejercer y además tampoco hay posibilidades de especialización por su alto costo", señaló Ollague, quien explicó la preferencia por Chile y Argentina por su cercanía y las posibilidades de especialización.
También aseguró que los profesionales ecuatorianos van con la esperanza de encontrar una plaza fija y quedarse. El sueldo de un médico del sector público en esos dos países supera los 2.000 dólares, mientras que en Ecuador es de 130.
Luego de Chile y Argentina, los países preferidos por los médicos ecuatorianos son Colombia y Perú, donde pueden ganar entre 800 y 1.500 dólares.
Los médicos que tienen consultorios particulares en Ecuador han visto disminuir su clientela en 60 por ciento como consecuencia de la crisis, según la Federación Médica Ecuatoriana.
Es imposible cobrar más por la consulta porque cada vez serán menos los que vayan al consultorio, comentó el médico Pedro Izquierdo, quien considera que en los últimos meses aumento considerablemente el número de personas que buscan opciones de cura más baratas.
"Los ecuatorianos prefieren recurrir a terapias alternativas, remedios caseros o plantas medicinales. La medicina tradicional puede complementarse con la occidental, el problema es que la gente se automedica para evitar la consulta", afirmó.
Izquierdo cree que es necesario organizar el sistema nacional de salud, para que todos los ecuatorianos tengan facilidad de acceder a un médico.
"Hay miles de colegas desempleados y también miles de lugares en el país donde necesitan un médico o una clínica y no los tienen, y la gente se muere", enfatizó Izquierdo, quien para hacer frente a esa situación propone una mayor intervención del Estado, ya que "la medicina privada solo piensa en el lucro".
La médica Beatriz Salazar comentó que "las residencias médicas en hospitales se obtienen por concurso y sólo duran tres años. Quienes salen de allí van a la calle a buscar qué hacer, en qué emplearse, es muy penoso".
Y el médico Marcos Nieto dijo que es imprescindible buscar alternativas para dar trabajo a quienes se gradúan, porque actualmente hay una superpoblación de médicos. "Es urgente que se dé paso a proyectos como el médico escolar o el médico de familia para abrir opciones de trabajo", afirmó.
Ollague cree que para disminuir la emigración es indispensable superar el divorcio existente entre las universidades y el gobierno.
"Todavía no se ha discutido una política sostenida de creación de plazas de trabajo en relación con el número de profesionales que egresan de las facultades del país, para que al menos el 50 por ciento de éstos pueda ejercer", aseguró.
Algunos médicos y directivos de universidades han propuesto restringir el acceso de estudiantes a las carreras de medicina.
Pero Ollague considera que tanto esa propuesta, como un cierre temporal de las facultades de medicina, son medidas que deben ser debatidas por representantes del gobierno, rectores y decanos. (FIN/IPS/kl/ag/he-if/99
