Empresarios del transporte que prestan el 90 por ciento del servicio terrestre en Colombia ratificaron hoy la convocatoria de un paro general este jueves y viernes, para exigir al gobierno el congelamiento de los precios del combustible.
El presidente de la Asociación Nacional de Transportadores (Asotrans), Marino Quintero, dijo a IPS que el sector "no resiste más alzas de los combustibles, que este año han sido del 42 por ciento" a causa de la liberación de precios.
Una opinión coincidente manifestó Yezid Isasa, presidente del Consejo Superior del Transporte (CST), quien subrayó que la liberación de los precios de la gasolina impulsada por el ministro de Minas, Luis Valenzuela, ha representado sobrecostos que el sector no puede afrontar.
El paro afectará casi en su totalidad la prestación del servicio urbano de transporte, de carga, taxis y de recreación, lo que que se verían afectadas prácticamente todas las actividades del país.
La liberación de precios de la gasolina se "hizo en forma improvisada" y sin tomar en cuenta la situación del país, afirmó Quintero, quien puntualizó que no se opone a la medida, pero que la misma deberá adoptarse cuando se produzca "algún nivel de crecimiento" de la economía.
El ministro del Transporte, Gustavo Canal, indicó que se han tomado las medidas necesarias para modificar los impuestos mediante la presentación de un proyecto de ley al Congreso, pero los transportadores considera que no atiende sus expectativas.
Colombia cerrará este año con una caída de 3,5 por ciento en su economía y un índice de inflación de 11 por ciento, según el estatal Departamento Nacional de Planeación (DNP).
Asotrans señaló que el aumento ha afectado a dos millones de personas (cerca del cinco por ciento del total de la población) y el gobierno anunció que en diciembre habrá un nuevo aumento.
"Un incremento más llevaría a la liquidación a la industria del transporte, que no serviría ni a los transportadores ni al resto del país", señalaron directivos de Asotrans.
Diferentes estudios indican que el 85 por ciento de los colombianos se movilizan en el sistema de transporte público, que cuenta con cerca de 530.000 vehículos, entre vehículos de carga y autobuses de pasajeros.
Otro punto que han motivado la medida de fuerza de los transportadores es el sistema de peaje, que funciona por concesión a empresarios privados que se encargan del mantenimiento de la red vial.
Estos han incrementado también en 40 por ciento las tarifas en lo que va del año y en algunos casos los aumentos han sido de hasta 100 por ciento.
Los transportadores piden también la aprobación de pólizas de seguro, ante la situación que se vive en las carreteras a causa del conflicto armado.
Los autobuses que prestan servicio en las zonas de guerra son blanco de ataques de grupos armados, incendio, robo y bloqueo de vías, lo que ocasionan pérdidas materiales y bajas en la demanda de usuarios que prefieren la vía aérea por mayor seguridad, arguyó Asotrans.
Los transportadores piden también una legislación clara y estable de las reglas de juego, que sea concertada con el sector, y el estudio de medidas para enfrentar la desocupoación que se presenterá con la adopción del sistema masivo de transporte proyectado para Bogotá. (FIN/IPS/yf/ag/ip/99