ARGENTINA-COLOMBIA: Viuda e hijo de Pablo Escobar, detenidos

La viuda y el hijo de Pablo Escobar, el narcotraficante colombiano muerto en 1993, fueron detenidos hoy en Argentina acusados de falisficación de documento público y blanqueo de dinero procedente del comercio ilegal de drogas.

El presidente Carlos Menem aclaró que, si los familiares de Escobar están involucrados en "este tremendo y dramático comercio de la muerte", la detención y la investigación son justas, pero negó que el narcotráfico esté asentado en Argentina.

"Seguramente vinieron aquí aprovechando que Argentina es un país abierto", subrayó Menem, al tiempo que se refirió al narcotráfico como un fenómeno que afecta a todos los países del mundo.

Victoria Henao Vallejos y Juan Pablo Escobar estaban viviendo en Buenos Aires al menos desde hace ocho meses, procedentes de Chile, según confirmó un oficial de la policía perteneciente a la Unidad de Investigación Antiterrorista.

De acuerdo con información policial, Henao Vallejos y Escobar habían ingresado a su país y vuelto a Colombia en diversas oportunidades. Otra hija, Manuela, no estaba con su madre y su hermano en el momento en que fue allanado el apartamento en el barrio de Nuñez, y que es buscada intensamente.

Pablo Escobar era el líder del narcotrafiante Cartel de Medellín y uno de los hombres más ricos del mundo, según la revista Fortune. Fue acusado de ordenar asesinatos y secuestros y murió intentando huir de la policía de su país, el 1 de diciembre de 1993.

Henao Vallejos declaró este martes ante la justicia argentina, sospechosa de haber intentado blanquear unos cuatro millones de dólares procedentes del narcotráfico adquiriendo inmuebles, bajo la identidad falsa de María Isabel Santos Caballero.

Pero el hermano de Pablo Escobar, Roberto, que purga una condena de 20 años de reclusión en Medellín, aclaró que los documentos de su cuñada y su sobrino no son falsos, sino que fueron otorgados por Colombia para resguardar su identidad y seguridad.

En diálogo con una radioemisora de Buenos Aires, Roberto Escobar aseguró que su familia, así como él mismo, son víctimas de una "persecución política", y que seguramente Henao Vallejos y Juan Pablo Escobar quedarán en libertad en Argentina cuando la justicia compruebe que "son inocentes".

Roberto Escobar está ciego y parcialmente sordo tras haber sido víctima de un atentado perpetrado contra la prisión en la que purgaba su pena.

"Es hora de que dejen a la familia de mi hermano vivir tranquila. Se trata de personas inocentes que no tienen nada que ver", subrayó Roberto Escobar, quien opinó que no se puede culpar a terceras y cuartas generaciones "por lo que hizo, o no hizo" alguien de su familia.

El hermano de Pablo Escobar denunció que en su país hay 40 secuestros diarios y que todos los días aparecen muertos en las calles. "En Colombia ya no se puede vivir", consideró.

En su caso, dijo que lo persiguieron acusándolo "por lo que hizo" su hermano, y se quejó de que su familia sufrió confiscación de propiedades y atentados con bombas, y de que también se le atribuyen todos los crímenes que se cometieron en el país.

"Mi hermano no era narcotraficante, era un hombre dedicado a la ganadería y a la construcción, que vendía y compraba edificios", declaró Roberto Escobar, quien atribuyó la persecución de que fue objeto a su popularidad y a la posibilidad de que siguiera una carrera política.

De acuerdo con una investigación periodística realizada en Argentina, Henao Vallejos estaba en la mira de la policía desde hacía tiempo. Las autoridades decidieron proceder a su detención por una filtración de la pesquisa a periodistas.

Pablo Emilio Escobar Gavíria nació en el departamento Antioquia en 1949 y a los 12 años se trasladó con sus seis hermanos y su madre a la ciudad de Medellín.

En los años 60 comenzó su carrera delictiva robando lápidas, para lo cual formó una banda que pronto ganó influencia política y económica en Medellín. En los años 80, creó el movimiento político Civismo en Marcha y fue elegido diputado suplente.

"Prefiero una tumba en Colombia a una celda en Estados Unidos", dijo para oponerse a la extradición de narcotraficantes solicitada desde Washington.

Desde 1984 y hasta su muerte, comandó una ola de asesinatos de ministros, magistrados, políticos, gobernadores, hacendados, periodistas, policías y militares para presionar contra la extradición. También se le acusó de la muerte de cuatro candidatos a la presidencia.

Entre septiembre de 1989 y junio de 1990, los carteles de narcotraficantes detonaron 24 coches-bomba en toda Colombia. Esos atentados causaron 93 muertes y mellaron la influencia política de Pablo Escobar.

No obstante, la presión tuvo éxito y la Constitución promulgada en 1991 eliminó la posibilidad de que nacionales colombianos pudieran ser extraditados a otros países.

Escobar se entregó ese mismo año a las autoridades, pero escapó de la cárcel en junio de 1992. Desde la clandestinidad, continuó comandando el Cartel de Medellín hasta su muerte al año siguiente.

La extradición de colombianos fue restituida al sistema jurídico colombiano este año, lo cual hace temer una nueva ola de atentados terroristas.

"Cuando la muerte de los protagonistas permita develar las hipocresías, sabremos cuántos artículos de la Constitución del 91, cuántas leyes, cuántos decretos, cuántos silencios y omisiones, cuántos diseños de cárceles impuso Escobar", escribió en el diario El Tiempo, de Bogotá, el columnista Armando Benedetti Jimeno. (FIN/IPS/mv/mj/ip/99

Archivado en:

Compartir

Facebook
Twitter
LinkedIn

Este informe incluye imágenes de calidad que pueden ser bajadas e impresas. Copyright IPS, estas imágenes sólo pueden ser impresas junto con este informe