El borrador de la nueva Constitución de Venezuela tiene 416 artículos, consagra cinco poderes públicos y plantea a sus 131 redactores el desafío de pulirla en menos de un mes con "sentido de la historia".
La Asamblea Constituyente inició este miércoles el proceso de ajustes finales del anteproyecto constitucional, con el fin de comenzar su revisión en sesiones plenarias a partir del sábado y someterla a referendo popular en diciembre.
El borrador fue presentado el martes por el presidente de la comisión constitucional de la Asamblea, Hermann Escarrá, quien recordó ante la sesión plenaria el objetivo de "construir una república distinta".
La entrega del primer texto estuvo minada por denuncias de e omisiones en algunos capítulos y por algunos errores técnicos, pero la mesa directiva de la Asamblea aseguró que todo será subsanado para la discusión definitiva.
"Estamos en la recta final", proclamó el presidente de la Asamblea Constituyente, Luis Miquelena.
Los 131 miembros de la Asamblea asumieron sus funciones el 3 de agosto, con la mision fundamental de redactar la Constitución que regirá los destinos de Venezuela a partir del 2000.
Durante las últimas 10 semanas, el organismo constituyente ha gravitado sobre la realidad venezolana, convertido en el eje de relaciones políticas, propuestas cívicas y económicas y demandas de reivindicaciones.
Tras protagonizar un episodio de tensión política cuando declararon en emergencia los poderes Legislativo y Judicial en agosto, los constituyentes se dedicaron exclusivamente a la redacción de la nueva carta fundamental.
Las 20 comisiones de trabajo de la Asamblea recibieron una lluvia de propuestas y sugerencias que terminaron en la redacción de casi un millar de artículos.
Todo ese articulado fue entregado a la comisión consitucional dirigida por Escarrá, que en el proceso de ensamblaje del proyecto logró limitar las disposiciones a las 418 que contiene el borrador actual.
Pero aún así, son demasiados artículos para una Constitución, y se espera que durante el debate en sesión plenaria puedan ser reducidos al menos a 320.
Entretanto, el borrador ha permitido a los venezolanos intuir cómo será el futuro del país. Uno de los cambios importantes será la creación de cinco poderes públicos, en vez de los tres que sustentan la democracia vigente.
Además del Poder Ejecutivo, del Legislativo y del Judicial, este país contará con un Poder Electoral, encargado de realizar consultas populares, y con un Poder Ciudadano, que incluirá la figura del defensor del pueblo.
El proyecto constitucional también concede el voto a los militares, autoriza la reelección inmediata del presidente, precisa por primera vez los derechos de los pueblos indígenas, contempla la doble nacionalidad y propone una policía nacional.
Escarrá advirtió a sus colegas constituyentes que el debate en sesión plenaria "tiene que ser tolerante" con toda idea, y que la Constitución a aprobarse "no tiene que ver con nuestro tiempo, sino con el de nuestros hijos".
La Constitución vigente data de 1961 y fue promulgada después del derrocamiento del dictador Marcos Pérez Jiménez en 1958, cuando se inició el actual ciclo democrático.
El presidente Hugo Chávez, principal impulsor del proceso constituyente, argumenta que es necesario redefinir la democracia venezolana, cuyos males atribuye a los partidos que controlaron el poder en los últimos 40 años.
Chávez considera que la Constitución vigente está "moribunda". (Fin/IPS/lc/ff/ip/99