Venezuela llegará al 2000 convertida en una nación multiétnica y pluricultural, con 1.500 comunidades indígenas que por primera vez en los últimos cinco siglos tendrán derechos consagrados por una Constitución.
Los pueblos indígenas aspiran a que sus reivindicaciones sean reflejadas en el preámbulo, en un capítulo especial sobre sus derechos y en otros sectores de la nueva ley fundamental, lo cual mejorará su actual confinamiento a un simple artículo en la Constitución vigente desde 1961.
El reconocimiento constitucional de los derechos de los indígenas permitiría a Venezuela sumarse a una decena de naciones de América Latina que ya dieron pasos en la misma dirección.
La nueva Constitución es redactada por una Asamblea Constituyente instalada desde agosto, que según su directiva comenzará a elaborar un texto definitivo a partir del día 14.
Una Comisión de Derechos de los Pueblos Indígenas formada por 11 constituyentes presentó una serie de propuestas para que sean incorporadas en la Constitución, con el objeto de garantizar "un orden jurídico de la diversidad".
La Comisión ha destacado que las constituciones de Bolivia, Brasil, Colombia, Ecuador, Guatemala, México, Nicaragua, Panamá, Paraguay y Perú incluyen disposiciones en favor de los indígenas.
La propuesta venezolana parte por sugerir que el preámbulo constitucional reconozca "la preexistencia de los pueblos indígenas como habitantes originarios del país y raíz primigenia de nuestra nacionalidad".
En el siguiente apartado, de las disposiciones fundamentales, propone declarar a Venezuela como país multiétnico, pluricultural y plurilingüe.
El análisis de la Comisión de constituyentes advirtió que este país tiene "el artículo más pobre y fuera de la realidad de todas las constituciones de América Latina en materia de derechos de pueblos indígenas".
La Constitución vigente desde 1961 sólo menciona a los indígenas en el artículo 77, donde dispone la posibilidad de un régimen de excepción, considerado "poco definido" y "asimilacionista".
Venezuela tiene 30 pueblos indígenas que agrupan a una 480.000 personas, quienes, según advirtió la Comisión, "se encuentran viviendo una situación de marginación, despojo de sus tierras e invasión de sus territorios, pobreza y discriminación…".
Los pueblos indígenas eligieron en comicios separados a tres de los 131 miembros de la Asamblea Constituyente, que garantizó su presencia en este cuerpo deliberante.
Otros tres candidatos indígenas que compitieron en las elecciones generales del 25 de julio, también consiguieron un puesto en la Asamblea.
Todos ellos participaron de un proceso de consulta a las comunidades y recibieron propuestas que invariablemente apuntaban hacia el anhelo de autodeterminación y, sobretodo, a la definición y propiedad de sus territorios.
La Comisión de Derechos de los Pueblos Indígenas sugirió que la Constitución venezolana debe incorporar un capítulo especial sobre el tema.
El Estado debería reconocer la existencia de los pueblos y comunidades indígenas, respetando su cultura y su diversidad lingüística, propuso la Comisión.
Además, dice que las tierras y territorios indígenas deben ser "inalienables, imprescriptibles, indivisibles e inembargables", sometidas a una demarcación con apoyo del Estado y de propiedad colectiva.
El capítulo de derechos indígenas también debería proteger las prácticas económicas de las comunidades, la propiedad intelectual de sus conocimientos intelectuales, su derecho a la salud y la educación, y su participación indígena.
La Comisión también pidió consagrar las "Regiones Indígenas" como unidad territorial en el capítulo sobre Organización Político Administrativa, en carácter de "entidades político territoriales de derecho público" sometidas a un régimen especial.
Finalmente, en el capítulo de la nacionalidad, la idea es consagrar la calificación de "venezolanos por nacimiento" a indígenas nacidos en países vecinos pertenecientes a etnias con presencia ancestral en Venezuela.
Las propuestas de cada una de las 20 comisiones constituyentes están siendo ensambladas por una Comisión Constitucional que prepara un anteproyecto, para someterlo luego a la sesión plenaria de la Asamblea.
Una vez que la Asamblea Constituyente complete la redacción de un texto constitucional, éste será sometido a la aprobación popular en un referendo que podría realizarse a comienzos de diciembre. (FIN/IPS/lc/dm/pr-ip la/99