TANZANIA: El legado de Nyerere en discusión

El ex presidente de Tanzania, Julius Nyerere, ideó durante su gobierno (1964-1985) un sistema de cooperativismo que llamó la atención de revolucionarios como Fidel Castro, de Cuba, y el Mariscal Tito, de Yugoslavia.

Ambos líderes viajaron a Dar es Salaam en los años 70 para que Nyerere, quien murió de leucemia el viernes 14 en un hospital de Londres y será enterrado este sábado, les explicara el sistema "ujamaa" que se proponía mejorar la calidad de vida de la población, aunque luego fracasara.

La ujamaa, una cooperativa de pueblos que constituyó la piedra angular del socialismo de Tanzania, permitió que 91 por ciento de la población, el porcentaje más alto de Africa, fuera alfabetizada.

George Mkuchika, comisionado regional para la región oriental de Tanga, sostuvo que la ujamaa hizo posible que todos los ciudadanos recibieran educación primaria y secundaria, sin distinciones religiosas, étnicas, ni sociales.

"Mi padre era muy pobre y éramos ocho en la familia. En 1964 fui elegido para ir a la escuela secundaria, y gracias a dios, el gobierno decidió ese año eliminar las mátriculas de escolaridad", relató Mkuchika.

Muchos altos funcionarios recibieron educación gracias a la ujamaa, señaló Mkuchika, militar retirado.

Nyerere definió a la ujamaa como la base del socialismo africano, en una declaración al Parlamento de Dar es Salaam en julio de 1970. "Ujamaa es cooperativismo, una actitud mental que se necesita para conseguir que cada persona se preocupe del bienestar de las demás", explicó en esa ocasión.

"En la sociedad africana tradicional, las personas se ocupan de la comunidad y la comunidad cuida a su gente, sin explotarlos", recalcó Nyerere en su discurso a los parlamentarios.

La implementación de la ujamaa estaba casi completa en 1976. Nyerere anunció en junio de 1975 que había 9,1 millones de habitantes en unos 6.940 comunidades, que representaban 65 por ciento de la población en ese momento.

Pero la rapidez con que se impuso el sistema y la desorganización de la agricultura tradicional causaron problemas sociales y económicos, según los críticos.

La "Operación Maduka", por ejemplo, cuyo objetivo era remplazar a los productores privados, las granjas, industrias y a los pobladores por cooperativas, comenzó a principios de 1976.

Pero su rápida implementación causó problemas de distribución y escasez de productos, lo cual enlenteció el procedimiento.

Muchos tanzanos sostienen que el fracaso de la ujamaa estuvo en su forma de aplicación.

"Algunos de los dirigentes no entendieron el objetivo de Nyerere. Durante el programa de 'aldeización' de 1971, algunos llegaron incluso a obligar a la gente a dejar sus hogares, y crearon campos de concentración en lugar de comunidades", se lamentó Mkuchika.

Joe Masanilo, periodista, atribuye el fracaso de la ujamaa a la "hipocresía" de los gobiernos locales a quienes Nyerere encargó la implementación de su sistema.

"Estoy seguro de el objetivo del sistema no era empeorar la vida de las personas sino mejorarla. Los dirigentes no explicaron la importancia del programa, y se limitaron a juntar gente y depositarla en áreas o en bosques, sin refugio ni agua", explicó.

El programa de 'aldeización' facilitaba el acceso a los servicios sociales provistos por el gobierno, ya que las personas vivían agrupadas y compartían escuelas y hospitales.

"Habría sido difícil que las autoridades brindaran servicios con una población dispersa", aclaró Mkuchika.

Sin embargo, Amon Kajiru, auditor de la Fabrica de Cemento Portland de Dar es Salaam, sostiene, al igual que muchos otros, que el fracaso de la ujamaa se debió a fuerzas externas al país. "Fue estrangulada por el capitalismo y el comunismo, que en aquel momento luchaban uno contra otro", señaló.

Kajiru acusó también a los países africanos de dejar solo a Nyerere. "No fue fácil para los tanzanos implementar la ujamaa aislados, necesitaban el apoyo de sus vecinos y de todo el continente", observó.

Edward Lowassa, uno de los ministros del gabinete, sostuvo que la ujamaa forjó la unidad entre los tanzanos al dirigirse a cada uno como "ndugu", que en swahili se utiliza para dirigirse a un familiar.

Sin embargo, el crítico Steven Katarama sostuvo que la ujamaa, que nacionalizó la propiedad privada, fue un desastre porque retrasó el desarrollo. Nyerere tendría que haber dejado a los ricos en paz, sostuvo.

El profesor Suleiman Ngware, de la universidad de Dar es Salaam, no está de acuerdo. Los críticos "creen que la ujamaa fue un fracaso, pero (en todo caso) fue tan buena como el colonialismo, que no nos cambió la vida", afirmó.

"Nyerere tenía sus problemas como ser humano, pero como gobernante creía en la dignidad humana y en la igualdad y, a través de la ujamaa, quería cumplir con sus objetivos", dijo.

Por su parte, Rashid Kawawa, el primer primer ministro que tuvo la República Unida de Tanzania, le quitó importancia a la discusión sobre el desarrollo.

"La ujamaa tenía que ver con salud, vivienda, educación y alimentación, esenciales para cualquier gobierno que aspire al bienestar de sus ciudadanos",

Después de la muerte de Nyerere, el legado positivo de la ujamaa empezó a desaparecer, en manos de Ali Hassan Mwinyi, el sucesor del líder, que abrió las puertas a la liberalización en 1985.

"Seguiremos implementando la política de la autoconfianza para el desarrollo de nuestro país", aseguró Mwinyi.

La tasa de alfabetización de Tanzania bajó a 84 por ciento, de lo cual se responsabilizó a las reformas económicas que obligaron al gobierno a implementar un sistema de costo compartido en el que los niños pobres no tienen acceso a la educación porque sus padres no pueden pagar las matrículas escolares.

También disminuyó el porcentaje de adultos alfabetizados, que había ascendido de 61 en 1975 a 90 en 1984, y ahora se encuentra en 80 por ciento.

Ngware sostiene que quienes dudan del legado de Nyerere deberían preguntarse por qué el mundo, representado por 70 países, comparecieron este jueves a rendirle tributo.

"¿Quién enterró a (el ex dictador congoleño) Mobutu (Sese Seko)?", preguntó.

Mobutu, que gobernó la República Democrática de Congo, ex Zaire, de 1965 a 1997, murió en el exilio en Marruecos, donde fue enterrado en 1997.

Nyerere, que será enterrado este sábado, aún es venerado en su país como el "padre de la nación", ya que lideró las luchas por la independencia y fue el primer presidente, desde 1964 hasta 1985. (FIN/IPS/tra-en/am/mn/ceb/ip/99

Archivado en:

Compartir

Facebook
Twitter
LinkedIn

Este informe incluye imágenes de calidad que pueden ser bajadas e impresas. Copyright IPS, estas imágenes sólo pueden ser impresas junto con este informe