El gobierno de Venezuela espera abordar con Guyana el tema de su espinoso diferendo territorial, tras reiterar su rechazo al laudo arbitral que hace 100 años otorgó a los colonizadores británicos 159.500 kilómetros cuadrados.
"Queremos colocar el tema en la mesa de negociaciones", comentó hoy el presidente Hugo Chávez, consultado por el aniversario del laudo arbitral de París, firmado el 3 de octubre de 1899.
Chávez, quien regresó este sábado de un viaje de cuatro días a Alemania e Italia, dijo que aspira debatir el diferendo territorial "con respeto a Guyana y a los hermanos guyaneses".
El Ministerio de Relaciones Exteriores de Venezuela emitió un breve comunicado en el cual reitera que considera el laudo "nulo e írrito", y que se mantiene "la aspiración nacional de obtener la reparación de la grave injusticia cometida".
El gobierno espera seguir negociando en el marco de un acuerdo suscrito en Ginebra en 1966, que compromete a las dos naciones a buscar soluciones prácticas al conflicto.
Las soluciones prácticas, según analistas políticos, implicarían diseñar algún tipo de compensación para Venezuela, dado que difícilmente este país recuperará el extenso territorio en reclamación, conocido como Guayana Esequiba.
La región se extiende desde la frontera oriental de Venezuela hasta el río Esequibo, en el corazón de Guyana.
Guyana, que se independizó de Gran Bretaña en 1969, heredó el diferendo de esa potencia colonial. El territorio reclamado por Venezuela cubre aproximadamente las dos terceras partes del territorio de ese país.
El caso de la Guayana Esequiba es una herencia típica del colonialismo. La región venezolana fue invadida por los británicos el siglo pasado, generando una fuerte divergencia entre el país sudamericano y la potencia europea.
Las escaramuzas generadas por el problema de la región esequiba provocó fricciones entre Gran Bretaña y Estados Unidos, que en esa época promovía la "Doctrina Monroe", que pregonaba "América para los americanos".
Estados Unidos defendió intereses de Venezuela, que fue representada por dos magistrados de ese país en la comisión que redactó el laudo.
La Guayana Esequiba es un territorio sensible para los venezolanos, que siguen colocando esa región en los mapas del país, indicando que se trata de una "zona en reclamación".
La prensa venezolana reflejó este sábado la sensación que genera el diferendo. "El despojo de 1899" tituló el editorial de El Nacional, mientras El Universal advirtió en un reportaje que "Venezuela sigue clamando justicia".
Sin embargo, el propio editorial de El Nacional incurrió en la autocrítica, al recordar que en 1899 Venezuela atravesaba por turbulencias internas y nadie estaba pendiente de lo que podía suceder en París.
El articulista de El Universal Adolfo Salgueiro consideró que la declaración venezolana de que el laudo es nulo e írrito "es unilateral y carece de efectos jurídicos ante la contraparte y ante terceros".
Venezuela aceptó el arbitraje que condujo al laudo, fue representada por dos estadounidenses y eventualmente aceptó el documento, recordó.
El diferendo territorial ha provocado algunos momentos de tensión entre Venezuela y Guyana en los últimos 30 años, aunque los dos países han logrado imponer un clima de buenas relaciones.
La cancillería venezolana manifestó este fin de semana que con Guyana existe "un auspicioso clima de entendimiento". (FIN/IPS/lc/ag/ip/99