El presidente de Perú, Alberto Fujimori, atribuyó hoy en Quito las críticas de sectores de su país al acuerdo de paz con Ecuador a la incomprensión del derecho de esta nación a la libre navegación por el río Amazonas.
"Generalmente un acuerdo de paz se logra después de un conflicto. La historia recogerá este cambio y apreciará su valor", dijo Fujimori.
El jefe de Estado peruano se reunió este martes en Quito con su par de Ecuador, Jamil Mahuad, para celebrar el primer aniversario de la paz entre los dos países andinos y para firmar varios acuerdos binacionales en las áreas judicial, de cooperación científica y tecnológica y de sanidad agropecuaria.
En las afueras del Palacio de Gobierno, Fujimori fue silbado por la multitud, que le arrojó monedas y tierra.
Tras la reunión, Mahuad minimizó el hecho al señalar que se trató de una protesta aislada, y aseguró que en Ecuador quienes no están de acuerdo con la paz "integran una minoría que va contra la historia".
Al recordar las gestiones para llegar a la paz, Fujimori recordó los momentos de tensión que se vivieron en agosto del año pasado, dos meses antes del acuerdo.
"Recuerdo una reunión con los mandos militares, viendo en el mapa las posiciones de las tropas en la frontera y los riesgos que suponían sus desplazamientos y las precauciones que se debían tomar, porque un disparo de las partes podía generar la guerra total", comentó.
También aseguró que los jefes militares apoyaban una salida negociada, y que la contradicción radicaba en que un sector no militar del Consejo de Seguridad Nacional se inclinaba por llegar a la paz a través de las armas.
"En realidad, el canciller Eduardo Ferrero estaba bastante pesimista de que podría llegarse a una negociación y luego a la paz. La visión que tenía era mantener una paz armada", comentó.
Fujimori acordó con Mahuad el apoyo de Perú para que Ecuador integre el foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC). "Estamos haciendo gestiones para entrar y ya tenemos el apoyo de Chile, China y Perú", comentó Mahuad.
La profundización del comercio entre los dos países y una mayor cercanía entre sus habitantes, que antes se encontraban divididos por el conflicto, es lo más importante en las relaciones bilaterales este año, según los analistas.
Los créditos por 3.000 millones de dólares que ofrecieron los organismos multilaterales para impulsar el desarrollo en la frontera todavía no han llegado.
"Los devotos se van de la iglesia cuando acaba la misa", comentó irónicamente uno de los delegados peruanos a las conversaciones que precedieron a la firma de los tratados de paz, y señaló que ahora había que reclamar que cumplan sus compromisos para concretar los proyectos.
Mahuad aseguró que la promesa de créditos es parte de un plan que se desarrollará en 10 años, a 300 millones de dólares por año, y justificó las dificultades iniciales.
El plan incluye proyectos binacionales de desarrollo, entre ellos sobre riego y construcción de carreteras, que contarán con el apoyo del BID, que ya inició estudios de factibilidad.
Otros proyectos se refieren al manejo conjunto de parques ambientales, a la interconexión eléctrica y de telecomunicaciones, a la creación de empresas binacionales para la explotación minera en la frontera y al fomento a la inversión privada en la producción.
Más de veinte empresas ecuatorianas ampliaron este año su mercado hacia Perú, con un importante incremento de sus exportaciones.
La industria alimenticia Sumesa, por ejemplo, en su primera incursión en ese mercado, colocó productos de consumo masivo en los supermercados Wong y Metro, los más importantes de Perú.
La empresa alemana Osram, que tiene su fábrica para el norte de América del Sur en Ecuador, también aumentó sus exportaciones a Perú de 300.000 focos incandescentes por año a 1.000.000 tras firmarse la paz.
En 1998, el comercio entre ambos países vecinos no representaba ni 20 por ciento del intercambio que cada uno tenía con el resto de la Comunidad Andina de Naciones.
En 1999, a pesar de la crisis económica que afecta a las dos naciones, se espera superar ese porcentaje, pero la idea del gobierno es llegar a 35 por ciento en los próximos años.
Fujimori realiza su cuarta visita a Ecuador y permanecerá en este país hasta el jueves, con actividades en Quito, Guayaquil y varios puntos fronterizos.
La extrema seguridad implementada se refleja en los operativos policiales y militares dispuestos por el gobierno ecuatoriano y en los cambios constantes en su agenda de actividades.
El 26 de octubre de 1998, en Brasilia, se firmó el acuerdo de paz que puso fin a 50 años de conflicto fronterizo entre Ecuador y Perú.
El 12 de mayo de 1999 se terminó la demarcación de la nueva frontera común en la cordillera del Cóndor, zona fronteriza que fue escenario de guerras entre los dos países en 1941, 1981 y 1995. (FIN/IPS/kl/mj/ip/99
