El gobernador estadounidense George Ryan se entrevistará en Cuba con varios ministros, concurrirá a centros científicos y de educación y se reunirá con representantes de la oposición, en una visita de cinco días que comenzará este sábado.
"No he sido avisado aún, pero lo más importante está en el hecho mismo de la visita, anunciadora de un futuro inevitable de buena vecindad entre nuestros países", comentó a IPS el opositor Elizardo Sánchez, presidente de la ilegal Comisión de Derechos Humanos y Reconciliación.
Sánchez no descartó figurar entre los activistas opositores que se entrevistarán con Ryan, cuyo programa preliminar de trabajo en la isla incluye además un encuentro con estudiantes de la Universidad de la Habana.
El gobernador del Estado de Illinois encabeza una delegación de 48 funcionarios, dirigentes políticos y religiosos, empresarios y personalidades de la salud, que llegará a la Habana alrededor de las 18 GMT del sábado en un vuelo especial de United Airlines.
Junto al grupo, pero sin formar parte del mismo, viajarán 47 periodistas de 31 medios de prensa.
Ryan, el primer gobernador en funciones que visita La Habana en 40 años de tensas relaciones entre Cuba y Estados Unidos, definió como humanitario el carácter de su gira, con la cual espera contribuir a una "nueva era de cooperación y entendimiento" entre los pueblos de ambos países.
"Vamos a tender puentes entre el pueblo de Illinois y el pueblo de Cuba. Aislar a Cuba no beneficia a Illinois ni es beneficioso para Estados Unidos", comentó el gobernador, en un comunicado difundido días antes de emprender viaje.
En declaraciones coincidentes, Sánchez consideró que "cuatro décadas de muy malas relaciones no han conducido a ninguna parte", de modo que lo más saludable es "la normalización de esos vínculos".
Ryan espera reunirse con los ministros cubanos Luis Ignacio Gómez, de Educación, Carlos Dotres, de Salud, y Abel Prieto, de Cultura, y visitar, entre otros, el hospital infantil Willian Soler, dotado para las intervenciones quirúrgicas a menores con cardiopatías.
Según informaciones de la propia delegación, Ryan dejará en la isla ayuda humanitaria estimada en un millón de dólares, parte de la cual será entregada al hospital William Soler.
Entre 1992 y 1997 llegaron de Estados Unidos a Cuba "donativos valorados en 23.559.086 dólares" y no 2.900 millones de dólares, como había asegurado el jefe de la Oficina de Asuntos Cubanos del Departamento de Estado, Michael Rannemberger, según información de medios oficiales cubanos.
Ryan desea conocer una cooperativa agrícola y el Centro de Ingeniería Genética y Biotecnología, pilar del desarrollo científico de este país, cuyos investigadores intentan encontrar una vacuna contra el sida.
La escuela primaria Abraham Lincoln, la Facultad Latinoamericana de Ciencias Médicas, el centro Histórico de la Habana Vieja, la Catedral habanera, la casa del Nobel de Literatura estadounidense Ernest Hemingway, hoy convertida en museo, serán también visitados por Ryan y su comitiva.
Oficialmente no se confirmó la versión de que el gobernador y sus acompañantes serán recibidos por el presidente Fidel Castro, aunque en medios diplomáticos se considera esa cita prácticamente segura.
Castro ha otorgado especial prioridad a la visita de personalidades de la política, los negocios, la intelectualidad y de las iglesias de Estados Unidos, que aumentaron después del viaje del papa Juan Pablo II en enero de 1999 a la isla.
Esta misma semana, el presidente se reunió cinco horas con una representación de la Junta de Educación Superior y de ministros de la Iglesia Metodista de Estados Unidos, que durante cuatro días exploraron en La Habana las posibilidades de intercambio entre universidades de ambos países.
En julio, Castro dedicó otras seis horas a un encuentro privado con el presidente de la Cámara de Comercio de Estados Unidos, Tom Donohue, quien definió como "el comienzo de un proceso" ese y otros contactos que sostuvo en La Habana con funcionarios gubernamentales.
La Habana recibió en septiembre la visita de tres delegaciones encabezadas por legisladores estadounidenses interesados en un cambio de la política de Washington hacia este país.
El Senado de Estados Unidos podría votar la semana próxima, en coincidencia con la visita de Ryan, una propuesta de exclusión de los alimentos y las medicinas del embargo comercial que Washington aplica a Cuba desde 1961.
De concretarse la votación, será la segunda vez en tres meses que la cámara alta del Congreso se pronuncia sobre asuntos relativos a las relaciones con Cuba.
La primera vez fue en septiembre, cuando la comisión bicameral que prepara el proyecto de presupuesto agrícola de Estados Unidos decidió descartar una enmienda presentada por el senador republicano John Aschcroft para permitir la venta de productos agropecuarios a Cuba.
Illinois, el estado que gobierna Ryan, es un importante centro de producción agrícola.
Los legisladores que proponen autorizar la venta de alimentos y medicinas a Cuba sostienen que 38 años es tiempo suficiente para demostrar la ineficiacia de una política y que los embargos afectan a las empresas estadounidenses, ya que les cierran el paso a mercados. (FIN/IPS/pg/ff/ip/99