El desarrollo humano sustentable en Honduras cobra fuerza a partir de la experiencia que realizan los habitantes de la sureña localidad de San Ramón Centro, con la instalación de electricidad en base a energía solar para uso doméstico y laboral.
Esta población de calles amplias y polvorientas, en el departamento de Choluteca, es desde hace tres meses una especie de laboratorio de ese tipo de desarrollo al constituirse en la primera aldea solar de América Central.
El proyecto apoyado por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) ha tenido ya resultados muy satisfactorios, según patrocinadores y beneficiarios.
Aprovechando las altas temperaturas que soporta la zona, los habitantes de San Ramón Centro acordaron embarcarse en esta experiencia que les proporcionó energía eléctrica, una demanda que no figuraba entre las prioridades del plan de electrificación rural del gobierno en los próximos cinco años.
Entre otros beneficios, permitió a un grupo de 300 niños y niñas conocer y manejar una computadora y a las mujeres capacitarse en costura y alfarería.
El representante de la UNESCO en Tegucigalpa, César Picón, dijo que el desarrollo del proyecto "nos ha enseñado que la ciencia y la tecnología son apenas un recurso, una herramienta y un instrumento que nos instruye cómo promover el desarrollo humano sustentable en Honduras".
Picón, quien desde que llegó a Tegucigalpa hace casi un año impuso una dinámica muy peculiar al trabajo de la UNESCO en el país, sostuvo que la experiencia de San Ramón Centro es un ejemplo para los pueblos de América Central en materia de sustentabilidad rural.
"Creo que se ha despertado un gigante dormido, y aquí hemos aprendido como los pobladores de esta comunidad poco a poco van logrando su propio desarrollo, con sus recursos y aprovechando las bondades de la naturaleza, en este caso, el sol", afirmó.
Una delegación del gobierno y la UNESCO se trasladó el día 9 a San Ramón Centro para supervisar los avances de la aldea solar, y encontraron que sus habitantes habían decidido crear su propio esquema de organización para cuidar y preservar el proyecto.
El viceministro de Educación, Armando Euceda, señaló que, no sólo el hecho de tener la primar aldea solar de la región representa un orgullo para el país, "sino también la lección que ustedes nos están dando, porque nos demuestran que sin mucha bulla, aquí se construye patria".
Euceda resaltó el espíritu y dinamismo de los casi 1.000 pobladores de la localidad, quienes instalaron energía solar en algunas viviendas, la escuela, la biblioteca, el centro de salud y en la única pulpería (centro de ventas de comestibles) comunitaria que tienen.
Las autoridades educativas señalaron que la instalación de aldeas solares es un proyecto que se intensificará en el 2000, como complemento del plan de Educación Comunitaria, que se propone alfabetizar a niños y adultos de las zonas más pobres y remotas del país.
La tasa de analfabetismo alcanza a 57 por ciento entre los 5,6 millones de habitantes de Honduras, donde ocho de cada diez personas viven en condiciones de pobreza y extrema pobreza, siendo las mujeres y los menores la población más vulnerable.
En ese sentido, la UNESCO y el estatal Consejo Hondureño de Ciencia y Tecnología anunciaron el propósito de instalar 50 aldeas solares en todo el país, como parte de un programa de promoción educativa y sustentabilidad en las zonas marginales y rurales.
En el caso de San Ramón Centro, por ahora la novedad en sus pobladores es saber que tienen energía eléctrica las 24 horas del día, un sueño que nunca imaginaron cumplir por su ubicación geográfica y los niveles de pobreza de sus habitantes.
Juan Vázquez, habitante de la zona, afirmó, emocionado, que su mayor satisfacción "es ver el pueblo iluminado por la noche.
"Parece que fuera de día y a mí me encanta ir al parque a ver lo lindo que está el pueblo, que vamos progresando y que los candiles ya casi no los usamos para alumbrarnos", comentó.
Por su parte, el presidente de la Asociación de Municipios de Honduras, Arnold Sánchez, indicó que el proyecto de las aldeas solares es algo que "beneficia a los municipios, particularmente a las alcaldías pobres y olvidadas como la de San Ramón Centro, en Choluteca".
La zona sur de Honduras es una de las más pobres del país, y el esfuerzo que hace seis años venían haciendo sus habitantes para mejorar la situación en los departamentos de Valle y Choluteca, fue arrasado un año atrás por el paso del huracán Mitch.
Ante esa situación, la instalación de la aldea solar en San Ramón Centro es un aliciente para sus habitantes y sinónimo de esperanza y desarrollo para una zona que clama por mayor atención estatal y cooperación internacional. (FIN/IPS/tm/dm/en pr/99)
